Sionismo

Sionismo
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Símbolo del sionismo
Ideología(s) base(s):
Nacionalismo sionista
colonialismo sionista
Personajes destacados:
Theodor Herzl, Abraham Isaac Kook, Mordechai Anielewicz, Eliezer Ben Yehuda, Nahum Goldmann, Moses Hess, Zeev Jabotinsky, David Raziel, Jaim Weizmann, Abraham Stern
Organización(es) internacional(es):
Organización Sionista Mundial

Sionismo. Ideología nacionalista, colonialista y segregacionista judía que, desde finales del siglo XIX, se propuso la creación del estado de Israel y promovió la migración de judíos a Palestina, la tierra prometida. Los sionistas en estrecha alianza con el imperialismo internacional han practicado de forma sistemática y constante una política de exterminio contra el pueblo árabe palestino.

El Sionismo como ideología se asienta en cuatro mitos fundacionales[1], que los medios proisraelíes se han encargado de difundir, ellos son:

  1. Una tierra sin pueblo para un pueblo sin tierra: Cultivado por los primeros sionistas para crear la ficción de que Palestina era un lugar remoto y desolado que esperaba que alguien lo ocupase. A esta pretensión siguió enseguida la negación de la identidad, nacionalidad o títulos legítimos de posesión de esa tierra por los palestinos, que han vivido en ella por siglos.
  2. La democracia israelí: Los medios de difusión masiva venden a Israel como la única democracia del Oriente Medio cuando en realidad las libertades cívicas, los procedimientos judiciales y los derechos humanos básicos son negados por la ley a los que no cumplen requisitos raciales y religiosos.
  3. La seguridad del estado de Israel: Los sionistas mantienen que su estado tiene que ser una potencia militar para defenderse del peligro de las naciones árabes.
  4. El Sionismo es el heredero moral de las víctimas del Holocausto. En este aspecto se basa una gran parte de la propaganda del estado de Israel.

El Sionismo, como corriente ideológica hegemónica en la fundación y establecimiento del Estado de Israel tiene como uno de sus rasgos distintivos su carácter expansionista. David Ben Gurión, primer jefe del estado de Israel, dijo el 12 de diciembre de 1948:

"El sionismo ha alcanzado su meta el 14 de mayo con la creación del Estado judío. Este, sin embargo, no es el fin de nuestra lucha, sino que empezamos hoy y tenemos que seguir hasta crear un Estado desde el Éufrates hasta el Nilo. Tenemos intención de conquistar más y más."

Ariel Sharon, exprimer ministro de Israel declaraba en noviembre de 1998:

"Es el deber de los líderes israelíes explicar a la opinión publica, claramente y con valor, un cierto número de hechos que con el tiempo se van olvidando. El primero de ellos es que no hay sionismo, colonización ni Estado judío sin el desahucio de los árabes y la expropiación de sus tierras."

El sionismo israelí, a partir de su alianza estratégica con Estados Unidos y como potencia militar e incluso nuclear en el Oriente Medio destaca por la violencia en sus métodos de colonización y conquista de los territorios palestinos y de exterminio de sus pobladores. El sionismo participa en las políticas genocidas a nivel mundial. Hubo presencia de agentes israelíes como asesores de contrainsurgencia, represión policíaca y de tareas de inteligencia en la Sudáfrica del apartheid, en el Chile de Pinochet, en El Salvador durante la guerra revolucionaria, en Guatemala, y más recientemente en Iraq.

Historia[2]

El Sionismo tomó su nombre de una de las colinas de Jerusalén llamada Zion, y adquirió alcance político gracias a Theodor Herzl, un periodista austríaco que a finales del siglo XIX pensaba que los judíos debían formar una nación propia en un solo territorio, específicamente en Palestina, el cual ellos consideraban tierra prometida.

En 1897, Herzl organizó el primer congreso sionista en Basilea, Suiza, cuyo programa decía:

"El Sionismo quiere crear un hogar para los judíos en Palestina, al amparo de la ley pública."

El centro de este movimiento se estableció en Viena, donde Herzl publicó su semanario oficial Die Welt (El mundo). Los congresos sionistas se reunieron anualmente hasta 1901 y después cada dos años. Cuando el gobierno del Imperio Otomano rechazó la propuesta de Herzl de otorgar la autonomía a Palestina, los sionistas buscaron el apoyo de Gran Bretaña.

En 1903 el gobierno británico ofreció a los judíos 6 mil millas cuadradas deshabitadas en la colonia británica de Uganda para que se establecieran en ese lugar de África, pero los sionistas rechazaron esta oferta e insistieron en Palestina.

Con el estallido de la Primera Guerra Mundial, el sionismo se extendió, y los judíos rusos que vivían en Inglaterra promovieron la Declaración de Balfour, mediante la cual los británicos prometían apoyar a los judíos en la creación de un estado nacional judío en Palestina. Esta declaración fue incluida en el mandato británico de la Liga de las Naciones sobre Palestina en el año 1922. Tres años más tarde, la población judía en Palestina se estimaba oficialmente en 108 mil personas; ocho años después ascendía a 238 mil. La inmigración judía fue moderada, pero se incrementó significativamente cuando se produjo el ascenso del nazismo en Alemania.

Bajo el mandato británico, muchos campesinos árabes fueron desarraigados de sus aldeas y despojados de sus tierras. La población árabe temía que, eventualmente, Palestina se convirtiera en un estado judío y hacía todo lo posible para resistir a los sionistas y a la política británica que los apoyaba. Hubo varias revueltas árabes, especialmente en 1929 y 1936 - 1939, que provocaron que los británicos limitaran el apoyo a los sionistas, lo que causó una ola de atentados terroristas sionistas contra árabes e ingleses.

Uno de ellos fue la voladura del Hotel Rey David, cuartel general de los británicos, quienes perdieron en ese atentado a más de 90 de sus hombres. El Irgún, organización terrorista judía, se adjudicó el atentado, aduciendo que era la respuesta sionista a la acción que los soldados ingleses habían desarrollado semanas antes en la Operación Agatha (la invasión de tropas inglesas a la Agencia Judía, arrestando a más de dos mil judíos por porte ilegal de armas y asociación ilícita para atentar contra la presencia inglesa en Palestina).

Posteriormente, a partir de 1938, con la noche de los cristales rotos o Kristallnacht y la escalada del nazismo, la exterminación de judíos en Europa y el acoso que sufrieron en buena parte del mundo, provocó que un gran número de judíos buscara refugio en Palestina y muchos otros, especialmente de los Estados Unidos, se unieran al sionismo. Como la tensión árabe - sionista crecía, los británicos decidieron dejar el asunto en manos de la ONU. Ésta propuso, en noviembre de 1947, la división del territorio en dos naciones separadas, la árabe y la judía, así como la internacionalización de Jerusalén.

En 1948, una vez creado el estado de Israel, las organizaciones sionistas de todo el mundo se dedicaron a reunir fondos para apoyar a los israelíes y a los inmigrantes judíos que se establecían en Palestina.

Referencias