Sistema Penitenciario Cubano

Sistema Penitenciario Cubano
Información sobre la plantilla
Institución con sede en Cuba
País:Cuba
Dirección:Todo el país


"El Sistema Penitenciario Cubano"El Sistema Penitenciario Cubano Un Sistema es un conjunto de elementos que ordenadamente entre sí contribuyen a un fin. Al asignar al régimen penitenciario la calificación de Sistema Penitenciario se hace referencia al conjunto de normas, procedimientos y dependencias dispuestas por el Estado para la ejecución del régimen penitenciario.

Panorámica

Manuel Osorio, creador del diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales, asocia el Sistema Penitenciario con régimen penitenciario, definiendo éste régimen como: "Conjunto de normas legislativas o administrativas encaminadas a determinar los diferentes sistemas adoptados para que los penados cumplan sus condenas. Se encamina a obtener la mayor eficacia en la custodia o en la readaptación social de los delincuentes. Esos regímenes son múltiples, varían a través de los tiempos y van desde el aislamiento absoluto y de tratamiento rígido, hasta el sistema de puerta abierta con libertad vigilada”. El Sistema Penitenciario, es el conjunto de normas generales, establecidas y específicas referidas a las penas en sí, el modo de su cumplimiento y el tratamiento de los penados y procesados. En el caso de la República de Cuba, tal sistema está constituido por la legislación vigente, los métodos que se emplean para lograr su funcionamiento, las diferentes dependencias encargadas de su aplicación, los equipos de trabajo y la infraestructura carcelaria. El Reglamento del Sistema Penitenciario de Cuba establece que, el Sistema Penitenciario Cubano es el encargado de garantizar el proceso de ejecución de la sanción de privación de libertad, de la sanción de trabajo correccional con internamiento, la medida de seguridad reeducativa de internamiento y la medida cautelar de prisión provisional. Este sistema, dirigido por la Dirección de Establecimientos Penitenciarios del Ministerio del Interior, se sustenta en la integración de principios, conceptos, procedimientos, fuerzas y medios que garantizan el funcionamiento de los centros destinados al internamiento y el tratamiento a los internos.

Al triunfo revolucionario en 1959, se había heredado un sistema penitenciario caracterizado por la promiscuidad, la corrupción judicial y administrativa, el crimen despiadado, la discriminación racial y social y el tratamiento brutal al hombre sancionado en detrimento de su integridad y dignidad humana. Desde el propio triunfo revolucionario se comenzó un proceso de transformaciones que contribuyeron al mejoramiento de la condición humana y conducta social a los privados de libertad. Este proceso se orientó, entre otras, en las direcciones siguientes:

  • Adopción de un sistema progresivo más avanzado y justo.
  • Criterios de clasificación de la población penal que aseguran mejor tratamiento colectivo e individualizado.
  • Incorporación voluntaria al trabajo socialmente útil y remunerado, con fines educativos y de asistencia y seguridad social para la familia.
  • Organización de un subsistema educacional para la enseñanza general y técnica insertado en el sistema educacional gratuito del país.
  • Organización de un subsistema de atención médica y estomatológica primario y especializado, insertado en el sistema nacional de salud.
  • Desarrollo de actividades de carácter artísticas, culturales y deportivas con la participación de instituciones de gobierno y organizaciones sociales y de masas.

Desde ese entonces, mucho se ha avanzado en este terrero. Fueron construidas o acondicionadas instalaciones como centros penitenciarios con mejores condiciones de reclusión, la población penal participó activamente en la ejecución de obras sociales y económicas (escuelas, centros productivos, viviendas y otras) así como en la producción de alimentos, producciones varias y de materiales de construcción, las cuales además de contribuir a formar valores humanos, representaron importantes aportes económicos y sociales y tuvieron un importante impacto social en los reclusos y sus familiares. Unido a lo anterior, a la población penal se le garantizó su instrucción escolar, capacitación técnica en oficios, una adecuada alimentación y comunicación con su familia y un trato justo y humano.

El Programa Audiovisual

Comenzó a materializarse en octubre de 2001 y hoy se encuentra implantado en todos los centros penitenciarios del país.

Aula de presos

Se dotó a cada centro penitenciario de televisores y equipos de vídeos con fines educativos, organizándose un plan de estudio denominado “Por Nuevos Caminos”, sustentado en cursos de diferentes materias contenido en el Programa “Universidad para Todos” (de cultura general para toda la población) y otros materiales educativos y películas. El monitor se afianza hoy en día en las prisiones cubanas como un líder positivo, que a la vez de contribuir a la superación del resto de la población penal, contribuye a su propia formación para su reincorporación a la sociedad.

El Proyecto Reincorporación

Quizás resulte el más avanzado de los programas en marcha. Está dotado de personal profesional con alta calificación que trabaja directamente con los internos, los cuales se encuentran organizados en grupos de 25 a 30 integrantes. Cada interno es valorado por un grupo multidisciplinario de psicólogos, pedagogos y juristas. Se realizan pruebas psicométricas y entrevistas tanto a ellos como a sus familiares allegados, con el fin de elaborar un plan de acción individual con cada uno y lograr el compromiso consciente y voluntario de estos de trabajar unidos para su adecuada reinserción a la sociedad.

Programa de Tratamiento Diferenciado a los Jóvenes Reclusos

Muy asociado al programa anterior. A pesar de las limitaciones económicas con pocos recursos y esfuerzos propios, el sistema penitenciario cubano ha ido creando instalaciones especializadas para jóvenes reclusos en todo el país, donde además de garantizar una adecuada clasificación de estos reclusos con respecto al resto de la población penal, se crean las condiciones para lograr la aplicación de un sistema de tratamiento educativo acorde a edades jóvenes, en las que aún está en proceso de formación la personalidad.

Programa para el desarrollo de las bibliotecas en las prisiones

Biblioteca de presos

Actualmente se cuenta con bibliotecas para uso y disfrute de los penados y funcionarios.

Además del convenio de trabajo con la Biblioteca Nacional José Martí, existen otros con bibliotecas provinciales y municipales, los cuales facilitan, además de la capacitación anteriormente señalada, el préstamo y donación de libros. En muchos establecimientos penitenciarios se han promovido actividades de donación de libros a sus respectivas bibliotecas por organizaciones sociales y de masas, por los propios funcionarios penitenciarios y por los familiares de los reclusos.


Programa para el desarrollo de cursos de Enfermería

Este programa organizado por cooperación del Sistema Penitenciario con el Ministerio de Salud Pública, comenzó a ejecutarse, con el inicio del 1er Curso, en marzo de 2004. Se imparte a reclusos previamente seleccionados bajo el principio de voluntariedad, buena disciplina y que tengan aprobado el 12 grado de escolaridad. El curso se imparte en el Hospital Nacional de Reclusos, hospital docente radicado en la Prisión Combinado del Este, en la capital del país. Se proyecta su ampliación a las demás provincias del país.

Trabajo socialmente útil en la población penal

El empleo voluntario de la población penal cubana en el trabajo socialmente útil y remunerado, ha sido siempre, desde el triunfo de la Revolución Cubana, uno de los objetivos prioritarios del Sistema Penitenciario Cubano.

Programa Atención Diferenciada a la Mujer Reclusa

El sistema penitenciario cubano le presta particular atención a la mujer reclusa. La población penal femenina en Cuba se encuentra debidamente clasificada en instalaciones penitenciarias exclusivas para ellas, que son atendidas directamente por personal penitenciario de igual género. Como los hombres, las mujeres reclusas se encuentran incorporadas al estudio y al trabajo remunerado, así como se capacitan en oficios, entre ellos: de profesoras de cultura física y deportes, bibliotecarias, cocineras, gastronómicas, costureras, peluqueras y otros.

Programa para el desarrollo del deporte

La práctica sistemática del deporte es parte integrante del sistema de tratamiento educativo que se le dispensa a la población penal.

Fuentes

  • ÓCEANO, E. G. Diccionario de la Lengua española y de nombres propios. Barcelona, España, Océano, p. 84-494.
  • OSORIO, M. Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales.
  • http://embacu.cubaminrex.cu