Stjepan Radić

Stjepan Radić
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Político y líder campesino
Nacimiento11 de julio de 1871
Trebarjevo Desno, cerca de Sisak, Croacia
Fallecimiento8 de agosto de 1928
Zagreb, Croacia
Causa de la muerteAtentado
EducaciónUniversitario
OcupaciónPolítico

Stjepan Radić. Político croata y yugoslavo y líder campesino croata. Luchó por la igualdad de derechos de los croatas dentro del reino de serbios, croatas y eslovenos.

Datos biográficos

Siendo todavía estudiante, fue encarcelado por sus actividades nacionalistas croatas contra el Imperio austro-húngaro. Residente algún tiempo en París (1897-1899), sirvió de corresponsal en los Balcanes de varios periódicos. En 1902 se estableció en Zagreb, donde fundó el Hrovatsko Misao, órgano informativo del Partido Campesino croata, que bajo su jefatura llegó a ser pronto el partido más importante del país. Aunque encarcelado en 1911 por el gobierno húngaro, apoyó la causa imperial al estallar la I Guerra Mundial. Al derrumbarse el Imperio, pidió la autonomía política para Croacia y su unión política con Serbia y Montenegro. No logró, sin embargo, armonizar sus puntos de vista con los mantenidos por los gobernantes serbios y fue nuevamente encarcelado en 1919 y 1920. Mantuvo una constante, aunque inútil oposición al gobierno antes de marchar al extranjero (1923-1924). A su regreso, abrazó un programa paneslávico basado en el principio de la unidad de obreros y campesinos y fue a parar de nuevo a la cárcel. Recobrada la libertad, indujo a su partido a colaborar con el gobierno y ocupó un ministerio; mas pronto se erigió en jefe de la oposición

Trayectoria

Estudió derecho en Zagreb y en Praga y pronto se dio a conocer como un acérrimo anti-húngaro: en 1895 fue condenado a seis meses de cárcel por quemar una bandera magiar durante la estancia del emperador de Hungría en Zagreb. Viajó a Rusia y a París, tras lo cual se estableció en Praga, donde, desde 1898, colaboró en lengua checa con varias publicaciones, encargándose principalmente de los asuntos croatas. Después de una corta estancia en Zemun, donde desarrolló una activa política paneslavista, permaneció en Zagreb, abogando por la unión nacional de Serbia y Croacia. Tras el final de la Primera Guerra Mundial, Radic empezó a colaborar con el Consejo Nacional de Zagreb para el establecimiento de una Yugoslavia con igualdad de derechos entre croatas y serbios y el reconocimiento de la tradicional autonomía de Croacia, pero desacuerdos con el régimen de Belgrado causaron su encarcelamiento entre 1919 y 1920. Dominó la política croata tras la guerra, siendo sus principales reivindicaciones la reforma agraria y la bajada de los impuestos a los campesinos. A pesar de la victoria electoral de su partido en Croacia, Radic rehusó participar en el Parlamento Nacional, permitiendo así al primer ministro, Nikola Pasic, imponer un gobierno centralizado en Yugoslavia.

Viaje a Moscú

Las elecciones de 1920 supusieron un estancamiento de su actividad opositora, pero en 1923, Radic viajó a Moscú con el fin de conseguir apoyos para la creación de una república campesina en Croacia, sin obtener resultados favorables. Por esta actividad, que le relacionaba con los comunistas, fue de nuevo encarcelado entre 1924 y julio de 1925; su partido político se disolvió entonces. Entró en el gobierno en 1925 como ministro de Educación (1925-1926), aceptando la Constitución centralista de 1921, pero en 1927 volvió a la oposición. Desde aquel año trabajó junto con Svetozar Pribicebic, un dirigente demócrata serbio, por la formación de una alianza democrática-campesina, demandando la organización federal de Yugoslavia.

Asesinato

En la mañana del 20 de junio de 1928, Radić recibió un aviso sobre el peligro de asesinato contra él si acudía al Parlamento y sus diputados le suplicaron que se ausentase de la Asamblea ese día. Contestó que él era como un soldado en la guerra, en las trincheras, y como tal era su deber de asistir pero, sin embargo, se comprometió no pronunciar una sola palabra en la sesión.

En la Asamblea, Račić, se levantó e hizo un discurso provocativo que produjo una

Radiç en el Parlamento cuando ocurrió el atentado

airada reacción de ofensa entre la oposición, mientras Radić permanecía completamente en silencio. Ivan Pernar, diputado croata, acabó por gritar a Račić, "¡bey saqueador!" (refiriéndose a las acusaciones de corrupción política contra él). Al no solicitar el presidente del parlamento una disculpa del croata, Račić sacó un revolver y disparó a Pernar. A continuación, siguió disparando a Radić y a otros tres diputados del CPP. Dos de los diputados murieron en el acto y otros dos consiguieron recuperarse. Radić quedó por muerto aunque, en realidad, sólo se hallaba gravemente herido en el estómago. Murió varias semanas más tarde a la edad de 57 años de la herida recibida. Su entierro en Zagreb fue multitudinario y su muerte se consideró como causa de una brecha permanente en las relaciones entre croatas y serbios en Yugoslavia.

Legado

La muerte violenta de Radić lo convirtió en un mártir y en un icono de la lucha política para los campesinos y la clase obrera, así como un referente de los nacionalistas croatas. La

Estatua a Radić en el centro de Zagreb

iconografía de Stjepan Radic fue posteriormente utilizada no sólo por su sucesor, Vladko Macek, sino también por otras opciones políticas en Croacia, de derecha e izquierda.

Los ustacha interpretaron la muerte de Stjepan Radic como prueba de la hegemonía serbia y, más adelante, como excusa para su tratamiento de los serbios en el nuevo estado croata durante la guerra mundial. A la vez, muchos de los principales figuras del CPP fueron encarceladas o asesinadas por las ustachas a los que se oponían. Los partisanos por otro lado, utilizaron esta represión para atraer a parte de los miembros del CPP, desilusionados con el Estado Independiente de Croacia, y llegaron a formar una brigada con el nombre de Antun y Stjepan Radic en 1943. La imagen de Stjepan Radic fue utilizado ampliamente durante la Primavera croata de principios de la década de 1970. Numerosos grupos folklóricos, asociaciones, escuelas primarias y secundarias llevan el nombre de Stjepan Radic. Muchas ciudades croatas tienen calles y plazas con su nombre y las estatuas de Stjepan Radic son comunes. Su retrato está impreso en el anverso del billete croata de 200 kuna, que apareció en 1993 y 2002. En 1997, una encuesta en el semanario croata Nacional nombró a Stjepan Radic como la figura histórica croata más admirada.

Fuente