Talleres Ferroviarios de Ciénaga

Taller de Ciénaga
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Institución con sede en Bandera de Cuba Cuba
Terminal (devenido Taller) de Ciénaga.png
Terminal de Ciénaga, devenido taller: Sede del ferrocarril colonial de Cuba.
Apertura:1837
Tipo de unidad:Reparación y mantenimiento de servicios ferroviarios
País:Bandera de Cuba Cuba
Empresa Matriz:Empresa Consolidada de Ferrocarriles Nacionales

Los Talleres Ferroviarios de Ciénaga o simplificadamente Taller de Ciénaga fue la sede del ferrocarril colonial de Cuba y el lugar de donde salió el primer tren que se deslizó por las paralelas de hierro de Cuba, en un viaje de prueba, el 13 de noviembre de 1837. Son los talleres de reparación y mantenimiento de servicios ferroviarios de Cuba.

Origen

En 1837 se desecó la ciénaga formada por la Zanja Real, para el primer paradero del primer “camino de hierro” o ferrocarril cubano.

Ubicación

Trenes de muchas procedencias reciben en Ciénaga revisiones y mantenimientos

La Ciénaga se encontraba en calle Almendares y Calzada Real, hoy Calzada del Cerro y calzada a Puentes Grandes, en Aldecoa, comunidad habanera del municipio Plaza de la Revolución.

En la historia

En 1814, el mecánico inglés George Stephenson diseñó una extraña máquina capaz de transitar por sobre rieles. Apenas unos años después la locomotora transitó en naciones como Francia, Suiza y Estados Unidos. España entendió la importancia de adquirir esta novedosa creación, sobre todo, después de la extraordinaria demanda de café y azúcar que trajo consigo la gran sublevación haitiana de 1791.

Conocedor de la relevancia de Cuba para el mercado azucarero, el comerciante y publicista andaluz Marcelino Calero y Portocarrero, elaboró un proyecto relacionado con la construcción de un camino ferroviario que enlazara a La Habana con el Valle de Güines.

El primer tramo ferroviario fue de La Habana a Bejucal, de 17 millas (27,3 kilómetros), se concluyó e inauguró el domingo 19 de noviembre de 1837, 11 años antes de que España tuviera el suyo, entre Barcelona y Mataró. El tramo Bejucal - Güines, de 19 millas (30,5 kilómetros), fue inaugurado ese día de noviembre, pero de 1838.

Desde el Taller de Ciénaga el primer tren

Acceso de pasajeros

En realidad el primer tren que se deslizó por las paralelas de hierro salió del Taller de Ciénaga, sede del ferrocarril colonial de Cuba, en un viaje de prueba, el 13 de noviembre de 1837. Arribó a Bejucal a las 10:18 a.m. Esa prueba la publicó el Diario de la Marina el 18 de ese mes.[1]

El servicio se inició con ocho locomotoras: “Cubana”, “Havana”, “Villanueva” y “La Comisión”, construidas por John Braithwaite en Inglaterra. Las restantes las fabricó Renais y fueron nombradas “Herrera”, “Escovedo”, “Villa Urrutia” y “Cruger”.

A lo dos meses de inaugurada la vía ocurre el primer accidente: un toro es atropellado. La locomotora se descarrila y las vías se desplazan. En un primer año cuatro locomotoras estaban en reparaciones en los talleres de Ciénaga.

Luchas obreras

En estos talleres obreros y comunistas libraron grandes luchas por la violenta represión desatada contra el movimiento obrero durante los gobiernos de Grau, Prío y Batista.

  • 1946, octubre: los obreros de los Talleres Ferroviarios acuerdan un paro en protesta por la sustitución de Lázaro Peña como Secretario General de la CTC. Varios agentes sindicales del gobierno tratan de romper la huelga en los talleres, un grupo de trabajadores les salen al paso y es apresado José Ramírez Casamayor.
  • Varios años más tarde fue asesinado (15 de enero de 1957).

Cambio de nombre

Al triunfo de la Revolución Cubana los Talleres Ferroviarios de La Ciénaga, fueron renombrados, en su honor, Talleres Ferroviarios José Ramírez Casamayor; con sus sucesivas remodelaciones se le conoce oficialmente por Unidad Empresarial de Base José Ramírez Casamayor.

Áreas

  • Área de mantenimiento
  • Biblioteca técnica
  • Laboratorio de aceites y lubricantes
    Obreros en revisiones y mantenimientos

Inversiones

Una inversión millonaria (2020-2021) con crédito de la empresa rusa Sinara (STM), permitirá convertir el taller en centro con capacidad para la reparación general de las locomotoras y la fabricación de partes, piezas y agregados.[2]

El equipamiento, unos 300 equipos, llegará a todas las fases de trabajo y dará la posibilidad de optimizar los procesos. La nueva tecnología permitirá la reparación de todos los tipos de locomotoras: diésel eléctricas y diésel hidráulicas y prestar servicios a terceros.[3]

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Referencias

Fuentes