Trastorno de pánico

Trastorno de pánico
Información sobre la plantilla
Panicos.jpg

Trastorno de pánico . Es un tipo de trastorno de ansiedad en el cual se tiene ataques repetitivos de intenso miedo de que algo malo va a ocurrir. El trastorno de pánico es un trastorno de ansiedad en el que la persona afectada sufre repetidos ataques súbitos de terror en ausencia de estímulos externos que puedan desencadenarlos. Los episodios frecuentes de terror acompañados de un fuerte estado de ansiedad se denominan ataques de pánico o, en algunos casos, ataques de ansiedad o crisis de ansiedad. Según el NIMH, el trastorno de pánico es un trastorno de ansiedad que se caracteriza por episodios inesperados y repetidos de intenso miedo acompañados por síntomas físicos que pueden incluir dolor en el pecho, palpitaciones aceleradas del corazón, falta de aire, mareos, angustia o molestia abdominal. En el trastorno de pánico, los episodios sucesivos de terror aparecen acompañados de cambios significativos en el comportamiento del individuo y de una preocupación continua por que se produzcan nuevos ataques de pánico. Se pueden producir cambios en la vida del individuo que pueden conllevar a evitar las situaciones o lugares temidos, a huir de los estímulos fóbicos, a apoyarse excesivamente en personas o en sustancias y a intentar controlar a toda costa las reacciones temidas. Si se producen cambios importantes de dependencia imperativa de personas y de lugares para que el afectado pueda sentirse seguro el trastorno desemboca en agorafobia.

Causas

La causa se desconoce, aunque los genes pueden jugar un papel. Otros miembros de la familia pueden tener el trastorno. Sin embargo, el trastorno de pánico a menudo ocurre cuando no hay ningún antecedente familiar. El trastorno de pánico es dos veces más común en las mujeres que en los hombres. Los síntomas por lo general comienzan antes de los 25 años de edad, pero pueden ocurrir hacia los 35 años. El trastorno de pánico también se puede presentar en niños, pero no suele diagnosticarse hasta que son mayores.

Síntomas

Una crisis o ataque de pánico comienza de repente y con mucha frecuencia alcanza su punto máximo al cabo de 10 a 20 minutos. Algunos síntomas pueden continuar durante una hora o más. Un ataque de pánico se puede confundir con un ataque cardíaco. Una persona con trastorno de pánico a menudo vive con miedo de otro ataque y puede sentir temor de estar sola o lejos de la ayuda médica. Las personas con trastorno de pánico tienen por lo menos 4 de los siguientes síntomas durante un ataque:

  • Molestia o dolor torácico
  • Mareo o sensación de desmayo
  • Miedo a morir
  • Miedo a perder el control o de muerte inminente
  • Sensación de asfixia
  • Sentimientos de separación
  • Sentimientos de irrealidad
  • Náuseas y malestar estomacal
  • Entumecimiento u hormigueo en manos, pies o cara
  • Palpitaciones, frecuencia cardíaca rápida o latidos cardíacos fuertes
  • Sensación de dificultad para respirar o sofocación
  • Sudoración, escalofrío o sofocos
  • Temblor o estremecimiento

Los ataques de pánico pueden cambiar el comportamiento y desempeño en el hogar, el trabajo o la escuela. Las personas con este trastorno a menudo sienten preocupación acerca de los efectos de sus ataques de pánico. Las personas con trastorno de pánico pueden abusar del alcohol u otras drogas y se pueden sentir tristes o deprimidos. Los ataques de pánico no se pueden predecir. Al menos en las primeras etapas del trastorno, no hay ningún desencadenante que comience el ataque. El recuerdo de un ataque pasado puede provocar ataques de pánico.

Pruebas y exámenes

Muchas personas con trastorno de pánico acuden primero a buscar tratamiento en la sala de urgencias, porque el ataque de pánico a menudo se siente como un ataque cardíaco. El médico llevará a cabo un examen físico y una evaluación psiquiátrica. Se harán exámenes de sangre. Se deben descartar otros trastornos médicos antes de poder diagnosticar un trastorno de pánico. También se deben considerar los trastornos relacionados con el abuso de sustancias, dado que los síntomas pueden parecerse a ataques de pánico.

¿Cómo reducir la cantidad o la gravedad de los ataques de pánico?

• No tomar alcohol • Comer a horas regulares • Hacer ejercicio regularmente • Dormir lo suficiente • Disminuir o evitar la cafeína, ciertas medicinas para los resfriados y los estimulantes

Grupos de apoyo

Puede aliviar el estrés causado por el trastorno de pánico al unirse a un grupo de apoyo. Compartir con otros que tienen experiencias y problemas comunes puede ayudarlo a no sentirse solo. Los grupos de apoyo generalmente no son un buen sustituto para la psicoterapia o tomar medicinas, pero pueden ser un buen complemento.

Expectativas (pronóstico)

Los trastornos de pánico pueden ser duraderos y difíciles de tratar. Es posible que algunas personas con este trastorno no se curen, pero la mayoría mejora cuando se realiza un tratamiento correcto.

Fuentes