XXV Festival Internacional Boleros de Oro

XXV Festival Internacional Boleros de Oro
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Evento Cultural
TipoFestival musical
Fechadel 19de junio al 23 de junio del 2013
PaísBandera de Cuba Cuba


XXV Festival Internacional Boleros de Oro . Evento cultural realizado en Santiago de Cuba (Cuba), entre el 19 de junio y el 23 de junio de 2013. Organizado por la Unión de Escritores y Artistas de Cuba

Historia del Bolero

El bolero enteramente cubano surge en el tercio final del siglo XIX, en la trova tradicional de Santiago de Cuba. Uno de los hijos de esta ciudad, Pepe Sánchez, se considera entre sus más tempranos cultores y un pionero de la definición de los caracteres estilísticos del género. Pero muy pronto se dispersó por todo el país y se catapultó a toda América.

En la década de 1950 alcanzó su apogeo mayor en México. No obstante, su relación con la música española del siglo XVII es lejana. La base musical la componían dos guitarras y un requinto para las melodías, a lo que se sumaban dos voces que realizaban las armonías. Así lo idearon Los Panchos en 1944.

Tal como asegura el musicólogo Helio Orovio (ver su Diccionario de la música cubana), el bolero constituye la primera gran síntesis vocal de la música del país, que al traspasar fronteras registra permanencia universal. Es también la suerte de fusión de factores hispanos y afrocubanos, presentes en la línea acompañante de la guitarra y la melodía.

El bolero fue alcanzando su grandeza cuando los compositores fueron musicalizando versos de poetas conocidos. En su incansable evolución, diversas variantes como el bolero-moruno, bolero-mambo y bolero-beguine, dieron éxito a sus cultores.

A pesar de todas sus modificaciones a lo largo de los años, el contenido de sus letras ha tratado siempre sobre amores imposibles o inútiles. En Cuba suele llamarse bolero sangriento a aquellas historias narradas en las que la muerte por desamor, el crimen apasionado o el suicidio son capaces de arrancar lágrimas a los oyentes.

Tal magnetismo, sin embargo, ha logrado que el bolero siga siendo un género preferido en fiestas, descargas románticas y, sobre todo, centros nocturnos, donde las parejas van con la finalidad deliberada de enamorarse.

Las copas y el beso en la penumbra han sido temas también socorridos en este tipo de canción. Pero, sin dudas, es además un género para interpretarse en grandes escenarios, por lo que en Cuba existen diversos certámenes, algunos de alcance internacional como el Festival Boleros de Oro, dedicados a su competición.

Tal vez por ello adquiere más relevancia un dicho que corre en boca de los cubanos, cuando se usa si se quiere exhortar a alguien a dedicarse a aquello verdaderamente importante: "Olvide el tango y cante bolero, amigo".

Dedicado

En esta ocasión estuvo dedicado a cuatro emblemáticos cultivadores del género en esa ciudad, destaca hoy un despacho de la Agencia Cubana de Noticias. A Minín Flores, Mirtha Arencibia, Ana Potrié y Eddy Álvarez está consagrado "Boleros en Santiago", como se le denomina a esta versión de la cita, figuras indisolublemente ligadas al bolero en la Isla desde la década de los años 50 del pasado siglo, informaron los organizadores.

Participantes

Un elenco con numerosas voces dedicadas al género llenó los programas del Festival: Nancy Maura, Zulema Iglesias, Eva Griñán, Luis Magarola, Sergio Aristóteles, Trío Melodías de Oro, los guitarristas Gabino Jardines y Hermes Martínez, Elsa Moreno, Albis Garrido, Miguel A. Jústiz, Enrique Molina, Ernesto Roel, Douglas Delgado, Angelito Bonne, Griselda Ortega, María Julia, María Elena, María del Carmen, Joel Leyva, Trío Romance, César René y Aracelis Iglesias. Otros solistas completaron el talento en las veladas en barrios y comunidades: Dúo Melodías Cubanas, Grisel Gómez, Altica Sánchez, José Armando Garzón, Ricardo Sierra, José Antonio Girón, Dúo Cohíba, Trío Ensueño, Coco Freeman, el Orfeón Santiago, Ernesto Roel, Coro Madrigalista, Quinteto Las Adalias, Cuarteto Vidas, Quinteto Las Divas.

Programa de Actividades

Se desarrolló un espacio teórico dedicado a la vida y obra de Álvarez y de Mirtha.en la sala Titón de la UNEAC, en la calle Heredia, El Boleros de Oro cumplió un programa abarcador: veladas en cuatro comunidades y barrios de la ciudad, con la intervención de cantantes invitados al Festival y talento de aficionados al arte del propio entorno; también visitaron y actuaron los boleristas en los poblados de El Cobre, El Cristo y El Caney. Cada noche se sucedieron en el "Patio de la Jutía Conga", en la sede de la UNEAC, las concurridas "descargas bolerísticas", un espacio que luego de las 22:00 o 23:00 horas comenzaba con la intervención informal de los invitados y anfitriones del Festival. También cada noche hubo conciertos-gala en la Sala Dolores, entre estos uno como homenaje a Eddy Álvarez y Mirtha Arencibia, siempre con la participación sobresaliente de los cantores llegados desde otros sitios del país y los de esta localidad.

Fuentes