Augusto Revilla Rodríguez

Augusto M. Revilla Rodríguez
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Nacimiento25 de abril de 1936
Finca Monserrat, Municipio El Caney, antigua provincia de Oriente

Entre los profesionales destacados de la prensa santiaguera, durante este medio siglo de periodismo revolucionario, está Augusto Revilla Rodríguez.

Sintesis biográfica

Nacido en la Finca Monterrey del municipio el Caney en la antigua provincia de Oriente el 25 de abril de 1936. De Modesto Joven campesino que era al triunfo del Primero de Enero de 1959, en pocas años se convirtió en un eficiente reportero de Sierra Maestra, que como un Quijote, pero con pericia e inteligencia, recorrió los más apartados lugares de la extensa geografía de la antigua provincia de Oriente. Su mérito principal es la entrega total al trabajo y a la Revolución durante este medio siglo, con modestia y sin condicionamiento alguno. A esto añade su condición de trabajador internacionalista en Angola; destacado en la defensa de la Patria; fundador de los CDR y otras muchas realizaciones.

Actividad Laboral

Graduado escuela nacional del [[PCC], Ñico López en el curso 1976-1977, cursos diversos de superación política, cultural y profesional de la UPEC,el PCC y la Defensa.Escuela de corresponsales Pablo de la Torriente Brau,año 1966. Antes de 1959 laboró como campesino en las tierras de su familia en el Caney.En el periodo de 1959 a 1961 fué obrero en los viveros de la Forestal en Santiago. Hasta 1966 fué operador de planta de radio en la antigua Delegación del INRA de Oriente. De 1966-1977 fué reportero del Periódico Sierra Maestra. De 1978-1983 Realizó diversas labores en Radio Mambí, donde se le hizo un reconocimiento especial por el trabajo al frente del noticiero, y en momentos , también de la emisora. En 1983 trabajó seis meses en el noticiero de Tele-Turquino. De 1983 a 1985 cumplió misión internacionalista en la República Popular de Angola, donde se desempeñó como jefe de redacción del periódico Verde Olivo en Misión Internacionalista, a la vez que fue Foto reportero de esa publicación. Recibió varios recocimientos en el desempeño de esta misión. De 1986 a 1993 laboró nuevamente en el periódico Sierra Maestra donde tuvo buenas evaluaciones y el reconocimiento por su alto nivel profesional y sentido de la responsabilidad.

Aspectos destacados de su vida laboral

Durante diez años, del 1966 al 1977 cubrió las actividades que le correspondieron como reportero del Sierra Maestra, labor que realizó en el extenso territorio de la antigua provincia de Oriente, en la mayoría de las ocasiones sin contar con transporte. Con similar responsabilidad colaboró a la fundación de los Periódicos de las antiguas regiones. Fue seleccionado,junto a otros compañeros, para editar el periódico Recta Final, en la parte norte de la antigua provincia de Oriente, cuando la zafra de 1970. Cumplió los requisitos de trabajador de avanzada por más de 10 años, y fue seleccionado mejor trabajador en la categoría de técnico en varias ocasiones, así como obtuvo otros muchos reconocimientos en la emulación sindical, por su disciplina,cumplimiento y sobrecumplimiento de los planes, la superación personal y la calidad de su trabajo. Por ello en su expediente laboral acumulo decenas de méritos, sin demérito alguno. Resultó Destacado en l989,movilizado a las tareas del agro en el plan viandero de Laguna Blanca; en 1969 ,cortando caña en Manatí ocupó el primer lugar, y recibió diploma de reconocimiento por su participación en el fin de zafra 1978-1979 en el central Mella. Coberturas periodísticas como la marcha de los seguidores de Camilo y el Ché, de 400 kilómetros desde la Sierra Maestra a Yaguajay, merecieron el reconocimiento de la Dirección del Periódico a Revilla en 1966, su primer año de labor en el medio. En sus eváluaciones profesionales se reconoce el alcance político e ideológico, económico y social de sus trabajos, el dominio de los géneros, la investigación y lo acertado en el ejercicio de la crítica, así como su disposición para acometer cualquier tarea.

Obras

Décimas

Ellos mienten, nosotros no

|EL adversario delira
--desquiciado su fracaso—-
y utiliza en todo caso
el puñal de la mentira;
el gran imperio con ira
amenaza, agrede, engaña,
hoy nos acecha con saña
y algo que a nadie conviene;
por filosofía tiene
la infamia de la patraña.

El discurso patrañero
e infame del adversario:
es un arpón temerario,
venenoso y traicionero;
pero con vigor de acero
y rotunda convicción
se impone en cada ocasión
--en toda la sociedad--
la inequívoca verdad
de nuestra revolución.

La contrarrevolución
tiene con mucho caudal
en la patraña imperial
su fuente de nutrición;
mentiras que muchas son
del norte revuelto vienen,
pero en nuestra patria tienen
invencibles valladares
y son muchos los pilare
que al socialismo sostienen.

Jamás podrán la maldad,
la difamación, el odio,
la mentira y el oprobio
doblegar nuestra verdad;
aquí con serenidad
y fuerza imperecedera
sigue firma mi bandera
-- enarbolada y viril--
pese a la potencia viril,
agresiva y patrañera.

Seguirán mintiendo ahora
como en tantas ocasiones
y en Cuba con más razones
lucharemos como en otrora;
una lucha vencedora
por hoy, por nuestra mañana,
por la dignidad humana
de un pueblo grande y maduro:
¡para que tenga futuro
la revolución cubana!

Fuentes

  • Periódico Sierra Maestra