Hamilton Naki

Hamilton Naki
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El jardinero que ayudó a trasplantar el primer corazón y fue ignorado por negro.
NombreHamilton Naki
Nacimiento26 de junio de 1926
Ngcingane, Bandera de la República de Sudáfrica Sudáfrica
Fallecimiento29 de mayo de del 2005
Bandera de la República de Sudáfrica Sudáfrica
Causa de la muerteInfarto cardíaco
NacionalidadSudafricano
OcupaciónCirujano autodidacta

Hamilton Naki.Fue un cirujano autodidacta que figuraba como jardinero en el equipo de Christian Barnard, cardiólogo y cirujano sudafricano, recordado especialmente por efectuar con éxito el primer trasplante de corazón.

Síntesis biográfica

Los primeros años

Nació el 26 de junio de 1926 en Ngcingane,una aldea pobre cerca de Centani, perteneciente al protectorado británico en Transkei, uno de los futuros bantustanes creados a la fuerza por el apartheid sudafricano. Este territorio era rico en recursos naturales, pero con una enorme población negra discriminada y sometida a formas de explotación medievales. Tuvo padres preocupados y suerte, ya que pudo ir a la escuela donde aprendió a leer, a escribir y algunos rudimentos de matemáticas. No era mucho pero sí lo suficiente para que sintiera el impulso de buscar mejores horizontes en Cape Tow, la moderna ciudad del Cabo de Buena esperanza. Concluyó la escuela primaria en esa localidad y luego se trasladó a la Ciudad del Cabo en busca de trabajo.En esto también fue afortunado, pues después de 1946 las leyes raciales impedirían que un negro pudiera viajar de una ciudad a otra y mucho menos desde un batustán.En Ciudad del Cabo, sobrevivió como pudo hasta que después de tocar varias puertas, logró conseguir trabajo en la Universidad de la ciudad sureña, en una plaza como jardinero, puesto realmente codiciado para un negro. Allí se ocupó durante 10 años de cuidar el césped en las canchas de tenis y en los jardines de la institución.

El jardinero devenido cirujano eminente

Hamilton Naki vivía en una barraca, sin luz eléctrica ni agua corriente, localizada en un gueto de la periferia de la ciudad.En 1954 fue seleccionado para ayudar al doctor Robert Hans Goetz, que hacía investigaciones con animales de laboratorio. Goetz, médico judío que había escapado de la Alemania nazi, no solo reconoció las habilidades de Naki, sino que simpatizó con los marginados. El primer encuentro entre ambos sucedió cuando Goetz le pidió al jardinero que le ayudara a sostener una jirafa que intentaba operar. El galeno quería hacer una disección de venas yugulares para estudiar la estructura y función de las válvulas, y así entender por qué el mamífero, de cuello tan largo, no se desmayaba al inclinar la cabeza para beber agua.Naki sorprendió gratamente al especialista alemán por sus capacidades manuales. Ya en el laboratorio primero limpiaba la jaula de los perros y los cerdos con los que se experimentaba, luego aguantaba a los animales, después los anestesiaba; más tarde se hizo cargo de los cuidados postoperatorios y suministros de medicamentos, hasta que terminó operándolos. Así pues, trasplantó órganos en mandriles, cerdos, perros, conejos y pollos.Goetz, afirmaría años después, que Naki lo ayudó en su primer trasplante cardiaco hecho en dos perros anestesiados por Gershon Efron y Arthur Bull. Con el tiempo el joven bantú se ganó un reconocimiento especial por los trasplantes de hígado que realizaba en cerdos con asombrosa maestría. Por su elevada responsabilidad y perseverancia Naki desarrolló habilidades que le granjearon puestos de responsabilidad, así formó equipo con los médicos, a partir de la mera observación, según explicaba él mismo, “yo robé con mis ojos”.En consecuencia se consagró como un experto cirujano de manos precisas y firmes, aunque solo conocido para los que compartían quirófano con él,de cara a la ley era el jardinero. En 1958 Barnard, después de su formación en la Universidad de Minnesota, regresó al Hospital Groote Schuur como cirujano cardiovascular. Allí rehabilitó el laboratorio de cirugía experimental e inmediatamente descubrió las habilidades de Naki y le pidió que se uniera a su equipo de transplantes.El hospital dio permiso, pero no sin antes aconsejar a Naki que mantuviera su papel en secreto porque él era negro, y las leyes del apartheid le prohibían cortar carne blanca o tratar con sangre blanca. Durante 50 años, los registros institucionales lo catalogaron como jardinero,a pesar de que le pagaban salario como técnico superior de laboratorio, el máximo que el hospital podía pagar a un negro. Es justo subrayar que Naki no fue el único colaborador negro de Christiaan Barnard pero ninguno alcanzó las virtudes del jardinero. Barnard inicialmente lo responsabilizó con la esterilización y cuidado del instrumental quirúrgico, luego con toda la preparación preoperatoria, tareas que Naki desarrolló con destreza y rapidez; a los que se añaden sus conocimientos sobre nombres anatómicos y anomalías congénitas, adquiridos en la práctica con Roseman Hickman, así paulatinamente llegó a convertirse en el principal y más veterano asistente quirúrgico del grupo. Los que pudieron observar los procederes de Naki se asombraban por su magistral delicadeza para suturar pequeños vasos sanguíneos y realizar anastomosis quirúrgicas. En cierta ocasión, Russell Claude Brock (más tarde Lord Brock de Wimbledon), el famoso cirujano cardíaco líder del Guy’s Hospital, fue invitado por Barnard para mostrarle el avance de sus investigaciones.Claude preguntó por la calificación de Naki y se sorprendió al saber que no tenía ninguna formación académica.En concordancia con todo lo anterior, Barnard comenzó a utilizarlo como su anestesiólogo y, más tarde, como su primer ayudante. Naki se convirtió en la mano derecha de Barnard, hecho que se volvió más relevante a partir de que el cirujano blanco comenzó a padecer de artritis reumatoidea. En el Hospital Groote Schuur se creaban las condiciones para realizar trasplantes cardíacos, su líder Cristiaan Barnard solicitó a los directivos incorporar a Naki al selecto equipo. Se le dio permiso, no sin antes aconsejar a Naki que mantuviera su papel en secreto porque él era negro, y las leyes del apartheid le prohibían cortar carne blanca o tratar con sangre blanca.

Participación en el primer trasplante cardíaco entre humanos

En la tarde del 2 de diciembre de 1967, Denise Darvall, joven sudafricana, fue atropellada por un auto, recibió un traumatismo craneoencefálico grave y se convirtió en donante de órganos. Al activarse el equipo de trasplantes, Barnard llamó con urgencia al único asistente del que no podría prescindir:Hamilton Naki. Fue Naki quien realizó la extracción del corazón para entregárselo a Barnard que en otro salón de operaciones preparaba al paciente receptor. Nueve horas duró todo el proceder quirúrgico y el 3 de diciembre la prensa dio la sensacional noticia; por primera vez un corazón humano había latido en dos personas, dentro de la joven que falleció en el accidente y dentro del tórax de Louis Washkansky, paciente diabético, fumador, que estaba a punto de morir por una insuficiencia cardíaca.

La polémica

la presencia de Naki en el primer trasplante cardíaco ha sido ampliamente cuestionada por algunos medios y personalidades alegando que la informacion proviene de fuentes secundarias, pues ya Barnard y Naki estaban muertos y era poco probable encontrar a sus antiguos colegas,hay incongruencias en las opiniones de los que niegan la cooperación de Naki, incluso algunos que lo aceptaron luego se retractaron.Por otra parte,múltiples autores han reconocido la participación de Naki. Otros elementos que apuntan hacia su participación fueron las veces en que públicamente Barnard tuvo elogios para él. Cuesta creer que con la personalidad histriónica de Cristiaan Barnard este se hubiera gastado en reconocimientos a Naki, si realmente no le agradeciera su contribución decisiva en el acto quirúrgico que lo catapultó a la fama. Sobre Naki expresó Barnard: "Tenía mayor pericia técnica de la que yo tuve nunca. Es uno de los mayores investigadores de todos los tiempos en el campo de los trasplantes, y habría llegado muy lejos si los condicionantes sociales se lo hubieran permitido”.

La jubilación y las distinciones

Hamilton Naki nunca reclamó por las injusticias acumuladas durante su vida, era agradable en sus relaciones y siempre regalaba una sonrisa.La jubilación y las distinciones le llegaron casi juntas, se jubiló en 1991, con una pensión de jardinero de 275 dólares mensuales.Dos años después de jubilado, en 1993, el Parlamento sudafricano aprobó una constitución en la que ponía fin a la política segregacionista racial.Creadas las condiciones que permitían reconocer a los negros, en el año 2002 Naki obtuvo dos importantes reconocimientos: el Doctorado Honorario en Medicina por la Universidad de Ciudad del Cabo y la Orden Nacional de Bronce Mapungubwe, una de las mayores condecoraciones del país, instituida por el gobierno de Nelson Mandela.el 21 de junio de 2003, el presidente del país Thabo Mbeki, le entregó el título honorario de Magister Scientarum en Cirugia,que equivale al Doctor Honoris Causa.Por coincidencias, Thabo que también fue víctima del apartheid, había nacido en Transkei, al igual que Naki. En 2005, poco, antes de la muerte de Naki, el presidente Thabo Mbeki hizo su discurso presidencial ante el Parlamento sudafricano y allí estaba, distinguido entre los guardas de honor, Hamilton Naki.

Fallecimiento

Falleció rodeado del cariño de sus hijos y nietos, el 29 de Mayo del 2005, por un infarto cardíaco, tenía 78 años. Después de su deceso, el gobierno sudafricano creó la beca “The Hamilton Naki Clinical Scholarship”, con la finalidad de formar médicos de todo el mundo en la investigación clínica de diferentes áreas de la Medicina.

Fuentes