Hermes Peña

Hermes Peña
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Combatiente revolucionario cubano
NombrePeña Torres, Hermes Santo
Nacimiento7 de abril de 1938
finca La Plata,
barrio de Los Letreros,
cerca del Salto del Cilantro,
pueblo de Marea del Portillo,
municipio de Pilón,
provincia de Granma,
República de Cuba Bandera de Cuba
Fallecimiento18 de abril de 1964 (26 años)
río Piedras,
municipio de Yuto,
departamento Ledesma,
provincia de Jujuy,
República Argentina Bandera de Argentina
Causa de la muerteMuerto en combate
ResidenciaPilón
Nacionalidadcubana
Otros nombresMarea
Ocupaciónmilitar
CónyugeCatalina Siblez Sánchez
HijosTeresa y Ana María
PadresClemente Peña y Paula Torres

Hermes Santo Peña Torres (Pilón, 7 de abril de 1938 - provincia de Salta, 18 de abril de 1964) fue un combatiente revolucionario cubano caído en combate en Argentina.

Síntesis biográfica

Nació en el seno de una familia muy humilde formada por Clemente Peña y Paula Torres, y compuesta por ocho hermanos.

La familia Peña Torres vivía en una zona montañosa muy intrincada conocida como Los Letreros, cerca del Salto del Cilantro, en el río del mismo nombre. No tuvo la posibilidad de estudiar y desde pequeño se vio obligado a trabajar en tareas agrícolas para ayudar a la subsistencia de la familia. Durante su adolescencia trabajó en una panadería en el poblado de Pilón.

El 20 de mayo de 1959 ―apenas después del triunfo de la Revolución cubana (1 de enero de 1959)― conoció durante un desfile patriótico en Santiago de las Vegas a la joven Catalina Siblez Sánchez. El 12 de diciembre de 1959 contrajeron matrimonio en Calabazar. A la ceremonia de la boda asistió el comandante Ernesto Che Guevara. Del matrimonio nacieron dos hijas: Teresita y Ana María.

Hermes Peña y su esposa con sus compañeros en la boda

Trayectoria revolucionaria

El 24 de noviembre de 1957, con 19 años de edad, Hermes se incorporó en Marea del Portillo al Ejército Rebelde para combatir contra la tiranía de Fulgencio Batista bajo las órdenes del Comandante Ernesto Che Guevara, jefe de la Columna n.º 8 Ciro Redondo.

Era conocido en la tropa como Marea debido a su lugar de procedencia, una práctica habitual entre los combatientes del Ejército Rebelde. Desde el principio, por su disciplina y seriedad, se ganó la confianza del Che. Participó en los combates de Las Mercedes, Fomento, Remedios, Caibarién, Güinía de Miranda, Cuatro Compañeros y Santa Clara.

Al triunfo de la Revolución el 1 de enero de 1959 ostentaba los grados de primer teniente y era miembro de la escolta personal del Che. Fue alfabetizado junto con otros combatientes por una maestra que le asignó el Che.

En 1959 y finales de 1960 acompañó al Che en actividades políticas y militares, en recorridos por las industrias de Cuba, y en giras por la Unión Soviética, China y Argelia. En 1961 cursó la Escuela de Oficiales de Matanzas.

En aquellos años un combatiente preguntaría a Guevara quiénes eran los compañeros más valientes que él tenía junto a sí, provenientes de la Sierra Maestra y el Che dijo: «Uno de los valientes es Hermes». Pero no fue solo coraje, sino honestidad y sinceridad, muy apegado al Che, como un hijo a su padre, al que demostró siempre una lealtad sin límites en aquellos años. Muchos afirman que el sentido de su vida fue entonces cuidar al Che, acompañarlo, ayudarlo, estar a sus órdenes disciplinadamente.

Su última misión

Cuando el Che y el periodista argentino Jorge Ricardo Masetti organizaron la Operación Sombra, que pretendía extender la lucha guerrillera por América, el primer hombre elegido para secundarlo fue precisamente Hermes Peña Torres; más adelante también selecciona a Juan Alberto Castellanos y a José María Martínez Tamayo, quien luego caería combatiendo en tierras bolivianas. Hermes Peña sería designado el segundo de la columna del Frente de Liberación del Ejército Guerrillero del Pueblo que comandaba Massetti.

En noviembre de 1962, Hermes Peña se despidió de su esposa y abandonó Cuba en avión hacia La Paz (Bolivia).

En una de las cartas que le escribió a su esposa algún tiempo después, le dijo:

¿Recuerdas que el día de nuestra despedida te negaste a creer que yo iba a volver? Puede que tú tengas razón. Tal vez yo no regrese nunca, pero la historia dirá hasta dónde llegué.
Hermes Peña, carta a su esposa en 1963
En La Paz [Bolivia] me encontré con Abelardo Colomé Ibarra (Furry), y José María Martínez Tamayo, quienes junto con Hermes se ocupaban de crear condiciones con vistas a la misión en Argentina. Con ellos regresé a Cochabamba [Bolivia] tres días después y nos dirigimos a la finca Emborozú, en Tarija (Bolivia)|Tarija [Bolivia], muy cerca de la frontera, donde se encontraban Masetti ―identificado como el Comandante Segundo―, y el capitán Hermes Peña, su segundo al mando.
Juan Alberto Castellanos, compañero de Hermes Peña en la guerrilla de Salta[1]

Los guerrilleros cruzaron el puente Emborozú, a 115 km al sur de la ciudad de Tarija (Bolivia), que a su vez se encuentra a 798 km al sur de Cochabamba (Bolivia) y 889 km al sureste de La Paz (Bolivia). Ingresaron al territorio argentino por la provincia de Salta (Argentina), y recorrieron 200 km hacia el sur a través de un denso bosque árido, las selvas andinas yungueñas, forestas de montaña que desde Venezuela se desarrollan a lo largo de 5000 km sobre las laderas orientales de la cordillera de los Andes.

El 7 de abril de 1964 cumplió los 26 años de edad.

Los combatientes internacionalistas del Frente de Liberación del Ejército Guerrillero del Pueblo arribaron a la frontera entre la provincia de Salta y la provincia de Jujuy, conformada por el Río de las Piedras.

Su muerte en combate

A las 19:30 del 18 de abril de 1964, a los 26 años de edad, cayó en combate contra una patrulla de la gendarmería nacional argentina en la orilla sur del Río de las Piedras, que sirve de frontera entre el noreste de la provincia de Jujuy y el límite oeste de la región noreste de la provincia de Salta. Ese río se encuentra a 3 km al noreste de la villa de Yuto, en el departamento Ledesma (provincia argentina de Jujuy.

El combatiente cubano Juan Alberto Castellanos, su compañero en la Columna 8 y en la guerrilla en Argentina, fue hecho prisionero tras el combate, y fue el que identificó el cadáver de Hermes Peña.

Más de cuarenta años después (en 2006) se conocería a través de una fotocopia del acta de defunción n.º 104, de «Hermes (Capitán Guerrillero)», firmada al dorso por Marta Patricia Tejerina, jefa del registro civil de la ciudad de Orán (provincia de Salta), 74 km al norte de la villa de Yuto:

Hermes (Capitán Guerrillero), de nacionalidad desconocida, de sexo masculino, de veintiocho [sic, por veintiséis] años de edad, de profesión Capitán Guerrillero, con domicilio desconocido. [...]
[En el párrafo que indica la muerte dice:] Y ocurrida en márgenes del río Piedras, Yuto, provincia de Jujuy, el 18 de abril de 1964, a las 19.30, a consecuencia de heridas toráxicas por arma de fuego, según certificado archivado bajo el número de la presente, otorgado por el doctor Pascual Asencio
Marta Patricia Tejerina, jefa del registro civil de la ciudad de Orán (Argentina)[2]

No se debe confundir el Río de las Piedras (que divide Salta de Jujuy) con la aldea salteña de Río Piedras, que se encuentra 242 km al sur de Yuto.

Regreso a la patria (2006)

Tras una larga y paciente búsqueda, los restos mortales de este combatiente internacionalista cubano fueron encontrados en el cementerio de la ciudad de Orán, enclavado en medio de una selva subtropical, a 1654 km al noroeste de Buenos Aires y 47 km al sur de la frontera con Bolivia a través del pueblo de Aguas Blancas. En el cementerio no había registros de entierros anteriores a 1980, pero se halló un certificado que indicaba que en mayo de 1964 Peña Torres había sido enterrado cerca de una pared de nichos mortuorios.

Sus restos fueron trasladados a Cuba y en la mañana del 13 de abril de 2006 fue realizada la ceremonia de inhumación de los restos mortales del miembro del Ejército Rebelde y combatiente internacionalista, Hermes Peña Torres, en el mausoleo de la Plaza de la Revolución Comandante Ernesto Guevara, de Santa Clara; en un nicho junto al Che, su jefe de siempre, y en unión de los guerrilleros de la tropa del Che en América que allí se encuentran.

La ceremonia, presidida por el General de Cuerpo de Ejército Abelardo Colomé Ibarra, el Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, sus hijas y otros familiares así como representantes del pueblo de la provincia de Villa Clara.

En este homenaje póstumo se colocaron ofrendas florales y fueron disparadas tres salvas de fusilería y entonadas marchas y himnos de guerra y victoria por la Unidad de Ceremonia y la Banda de Música del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR).

Fuentes