Manuscritos bajo la tierra congelada
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“Manuscritos bajo la tierra congelada” En este manuscrito se devela la historia hasta ahora desconocida de La reina de las nieves (Freya) y la desmedida pasión que sintió por el joven Kay.
Sinopsis
Es un libro singular en el que cada personaje vive su propia historia amorosa y su relación con el mundo entre la pasión y el deseo de tantos sueños imposibles que se le atragantan y, pese a los obstáculos, le ayudan a seguir adelante. Estos manuscritos de nostalgias, ilusión, olvido y desengaños están escritos desde la fibra del mejor sentimiento, ese que nadie avasalla y que aun, más allá de la muerte, consigue triunfar.
Fragmentos
Después que escape del castillo y fue dada por muerta Freya “La Reina de las nieves”, fui nuevamente donde estuve cautivo sin acordarme cuánto tiempo estuve allí, fui con el hecho de encontrar el medallón que herede de mis antepasados, al que había dado por perdido. La mansión helada se encontraba completamente en ruinas, entre con cuidado, y para mi sorpresa debajo de algunos escombros encontré un cofre de cristal completamente intacto con mi medallón dentro y algunas hojas manuscritas perfumadas de sándalo atadas con una cinta de seda blanca. Cuál fue mi asombro al darme cuenta que aquellos manuscritos estaban destinados hacia mí. Sentado sobre la tierra congelada leí hasta que mis ojos se cubrieron de lágrimas y supe por vez primera lo que se es capaz de hacer por amor. En los manuscritos Freya confiesa a gritos, el amor que sentía por mí el cual le llevo a perder la razón hasta cegarla y luchar por conquistar a cualquier precio ser merecedora absoluta de esa divina afinidad entre dos seres repleta de mágicas sensaciones. Cada página escrita es un canto al amor, ese que nos sorprende, nos atrapa y nos hierre, un canto a la esperanza, a la espera y a la valentía de luchar por obtener ese don que todos perseguimos y muy pocas veces se nos otorga: Amor correspondido. Nunca descubrí y ni imaginé que fuera Freya la que dejaba sus huellas para mí en las calles de esta pequeña cuidad, huellas que me asaltaban a cada paso, con mensajes bien legibles y gritados que no supe comprender. ¡Que despistado!, ¡como desconozco el amor! De Freya recuerdo con exactitud su piel pálida, la que se confundía con los paisajes nevados, pero lo que más retengo es su encantadora belleza, su rubio y largo cabello, sus labios rojos y sus ojos negros. Pensé que era incapaz de amar por su corazón helado, pero me equivoque todas las criaturas de este universo necesitamos y buscamos amor. Ahora no la juzgo se es posible hacer cualquier cosa por amor. He decidido apostar por el amor, el odio es una carga demasiado pesada.
Kay de Malborne Komeda
Desde que escuche tu risa Kay correteando en la nieve, mi corazón sintió lo que nunca antes había experimentado. Detrás del abeto me escondí y pude observarte tirado en la nieve haciendo ángeles, movías los brazos y los pies con altanera gracia. Tu risa contagiosa, tus ojos, tus labios… hizo no sé qué estragos en mi ser. Mi mundo en un segundo cambio, mil mariposas de cristal en mi estómago se acumularon las quise todas para ti entregar, pero: ¿cómo poder amar a este frío ser de congelado corazón? me pregunte, y supe en ese preciso instante que tú eras la razón por la cual mi mundo estaba cambiando.
Finalmente, ha llegado el amor a mi vida. No importa descubrir el camino, el cúmulo de casualidades y azar que llevó a que se cruzaran nuestras órbitas. No interesa cómo ha llegado a mí ni por cuales senderos. Eres lo más esencial un soplo de oxigeno que llena mis pulmones. "Hoy es la primera vez que me doy cuenta de la presencia de la vida".
Te quiero sin simulaciones, sin dobleces: natural y sencillo; esperando de mí, exigiendo de mí todos los sueños a realizar. Una idea que nos haga mejores. De tu beso soñado queda la huella palpitando encendida aquí en mi alma como un cielo en ardientes estrellas. Siempre voy a rendirme a tus pies. Seré por siempre sinceramente tuya.
Las cosas más bellas y significativas de la vida son casi siempre breves, escribir con el alma encierra tanta belleza como ese sentimiento que se clava en el corazón, el Amor. Nadie quiere perderse la posibilidad de amar a otra persona como pareja. Quizá con más sabiduría, no empecinadamente, ni haciendo de ese amor un tormento, sino su contrario. Nunca buscando al perfecto amor, pero si a alguien que sin ser perfecto nos haga soñar. Kay no te quiero para mi… te quiero conmigo… es diferente.
Datos del autor
José Ángel Muñoz Juárez. Destacado poeta, escritor, artista de la plástica, guionista de programas de Radio y televisión, editor y profesor. Licenciado en Ciencias Informáticas.
Escribió su primer poema a la edad de 7 años el cual título “Razones” y obtuvo el 1er lugar con dicho poema en el Evento de niños escritores de la Casa de Cultura María Montejo en Jatibonico. Ha obtenido diferentes reconocimientos literarios, como Premio en el Concurso de Poesía de amor Roberto González Calero en Jatibonico 2005 - 2015 Concurso de poesía Jornada Cucalambeana, Holguín 2005, Concurso de poesía Ada Elba Pérez en Jaragueca, Yaguajay 2009, así como menciones, premios y reconocimientos en Encuentros Debates de Talleres Literarios. En el 2011 la Casa de Cultura María Montejo lo reconoció por su aporte a la cultura literaria en Jatibonico. Textos suyos han aparecido en diferentes publicaciones y sitios digitales. En el 2012 fue seleccionado para representar a Cuba en el Festival Internacional de poesía de Managua Nicaragua. Tiene publicados: “El vuelo del ángel y otros poemas” bajo el sello editorial Cause de Ecuador (2010), “Letargo inquieto de la memoria” bajo Belgeuse Grupo Editorial de España (2011), "Poemas desde el consuelo" (2013), “Poemas bajo la lluvia” (2017) y “Manuscritos bajo la tierra congelada” (2018) estos últimos bajo el sello Editorial Con Luz Propia (España) con el cual obtuvo el Premio Biblioteca Breve en la categoría literatura juvenil en el 2019. Fuente Muñoz Juárez, Jose Angel. Manuscritos bajo la tierra congelada., Con luz propia. España.
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