Palabras a los intelectuales (libro)

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Palabras a los intelectuales
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Autor(a)(es)(as)Fidel Castro
Editorial:Ocean Sur
Edición2011
ISBN978-1-921438-86-8
PaísCuba

Palabras a los intelectuales es el nombre conocido para el Discurso histórico, que en junio de 1961, de Fidel Castro en reunión con artistas y escritores cubanos. El discurso se ha editado en forma de libro para su divulgación.

Contenido

Discurso pronunciado por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz como conclusión de las reuniones con los intelectuales cubanos, efectuadas en la Biblioteca Nacional el 16, 23 y 30 de junio de 1961

Datos

En junio de 1961 —año en que se desarrollaba la épica campaña contra el analfabetismo—, Fidel Castro, reunido con artistas y escritores cubanos, pronuncia un discurso históricamente conocido como Palabras a los intelectuales.

La intervención marcó la ruta de la política cultural de la Revolución y fue, también, punto de partida para la naciente Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC).

La definición de principios «dentro de la Revolución, todo; contra la Revolución, nada» fue el pedestal para la unidad entre los mejores exponentes del arte y la literatura de una nación que defendió y defiende el derecho a existir de su Revolución.

En la historia

El detonante de la reunión había sido la prohibición de la exhibición del documental "PM" (pasado meridiano), un cortometraje de 16 minutos que ya había sido estrenado en la televisión en los primeros días de mayo pero sería desautorizada su presentación en los cines del país.

Alfredo Guevara, como presidente del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (Icaic), comunicaría a Edith García Buchaca, secretaria del Consejo Nacional de Cultura, el desacuerdo de la Comisión de Estudio y Clasificación de Películas del Icaic con la idea de su proyección masiva.

En la película, realizada por Orlando Jiménez-Leal y Sabá Cabrera Infante, se mostraban las actividades nocturnas de divertimento en bares, clubes y cantinas de La Habana de una parte de la población, algo intrascendente si lo vemos a la luz de hoy, pero que en aquel contexto de 1961, cuando el país se encontraba movilizado y enfrentando masivamente las agresiones constantes del imperialismo, podía prestarse a otras lecturas, como de hecho ocurrió.

El documental no dejó de recibir elogios y críticas positivas pero fue cuestionado por extemporáneo y nocivo a los intereses del pueblo cubano y su Revolución.

Ante las inconformidades surgidas con la censura de PM, se convocó a una reunión con un grupo de artistas y escritores el 31 de mayo en la Casa de las Américas, pero luego de acaloradas discusiones no se llegó a conclusiones definitivas.

Se propuso que el filme fuera analizado por las organizaciones de masas y que estas dieran la última palabra, pero la consulta no llegó a realizarse: El 2 de junio, el periódico Hoy hizo público el acuerdo de la Comisión de Estudio y Clasificación de Películas del Icaic, lo que enrareció aún más el ambiente.

Guillermo Cabrera Infante escribió una carta de protesta a Nicolás Guillén, quien presidía la Asociación de Escritores y Artistas. Fue necesario entonces aplazar el Congreso de Escritores y Artistas, en preparación, y que el Primer Ministro Fidel Castro pidiera al Consejo Nacional de Cultura la convocatoria a un amplio encuentro con los artistas e intelectuales en el que estuvieran presentes todas las tendencias.

Relevancia de las palabras de Fidel

Llama a construir y reconstruir consensos en Cuba. Con los intelectuales cubanos como protagonistas de ese importante proceso, el discurso también sentó las bases para un diálogo permanente entre los escritores y artistas y la institucionalidad.

El discurso tendrá un papel importante en la conformación de lo que sería luego la política cultural de Cuba, las principales ideas en él expresadas:

  • Los cambios en el ambiente cultural y el mejoramiento de las condiciones de trabajo de los artistas y escritores, “La revolución no puede pretender asfixiar el arte o la cultura cuando una de las metas y uno de los propósitos fundamentales de la Revolución es desarrollar el arte y la cultura”.
  • El respeto a la libertad formal para la creación artística y literaria, se considera la libertad de contenido para expresarse dentro de la revolución, pero no es admisible que se expresen contra la revolución.
  • La Revolución como acontecimiento cultural más importante.
  • Convertir al pueblo en actor, pensar por el pueblo y para el pueblo, lo que encierra, lo bello, lo útil y lo buenode cada acción, lo estético. “No quiere decir esto que el artista tenga que sacrificar el valor de sus creaciones, y que necesarimentente tengamos que sacrificar su calidad. Quiere decir que tenemos que luchar en todos los sentidos para que el creador produzca para el pueblo y el pueblo a su vez eleve su nivel cultural a fin de acerse a los creadores.”

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Fuentes