Yazidismo

Yazidismo
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Concepto:El Yazidismo es una religión preislámica de Oriente Medio de remoto origen. Los Yazidíes forman una minoría religiosa cuyos orígenes se remontan a 2.000 a.C.


El yazidismo, consiste en la pertenencia a una religión preislámica de Oriente Medio, cuyas raíces se remontan al año 2.000 antes de Cristo. Se trata de una corriente minoritaria del yazdanismo, existiendo otras dos ramas; el alevismo y el yaresanismo, las cuales se diferencian del yazidismo en no disimular su fe cuando está en peligro la propia vida (taqiyya).

La principal ciudad santa del yazdanismo es Lalish (Nínive) antes Mosul (Irak), siendo poco frecuentes las relaciones entre sus tres ramas. El yazidismo fue la religión oficial de los kurdos hasta el siglo VII después de Cristo, aunque la posterior islamización obligatoria, redujo el número de sus practicantes.En total suman unos 800.000 fieles, aunque esta estimación es poco precisa debido al secretismo que envuelve a la confesión en cuanto al reconocimiento del propio credo. Aparte de los mencionados países del Caucaso y Oriente Medio, hay casos de yizadíes viviendo en Europa, especialmente en Alemania así como en Norteamérica. Malak Taus, el ángel caído que dirige a los arcángeles y a menudo está representado por un pavo real en esta religión, es identificado de forma poco precisa por los cristianos y musulmanes como Satanás o Lucifer («Portador de luz»), lo que ha provocado la creencia popular de que los yasidíes son adoradores del Diablo. No en vano, la veneración hacia Malak Taus, que nació de la iluminación del ser supremo, sigue siendo motivo de muchos interrogantes dada la personalidad rebelde, orgullosa e incluso tiránica de este ángel.

Dialecto

Los yizadíes suelen hablar un dialecto del kurdo, el kurmanji. El sustrato del Yazidismo se encuentra en las religiones de la antigua Persia, sobre todo en el Zoroastrismo de los siglos VII al IV a.C. de los kurdos del valle de Lalish.

Historia

En el siglo VII, el islam se impone en toda la región, y debido a la persecución contra zoroastristas y similares, los yazidíes se repliegan alrededor de Mosu, mezclándose con la población kurda.

De acuerdo con la cosmovisión yazidí, Dios creó el mundo, que ahora está al cuidado de Siete Seres Santos, conocidos como ángeles. El superior es Melek Taus, el ángel del pavo real, que es considerado por los cristianos y musulmanes más cerriles e integristas como Satanás. El Kiteba Cilwe o Libro de la Revelación considerado como la Palabra de Melek Taus, y que recoge lo esencial de las creencias yizadíes, indica que Melek taus asigna responsabilidades, bendiciones y desgracias según su voluntad y que no le compete a la raza de Adán (deduzco que se refiere a los cristianos), juzgarlo. Así como Melek Taus es el Dios, la figura de el Sheij Adí, es el Profeta. Según la antigua creencia, Melek taus le otorgó al Sheij Adí, siete tierras y el Trono del Cielo.

Los yazidíes creen que el Bien y el Mal conviven en la mente y el espíritu humanos. Al igual que en el Zoroastrismo, elegir entre ambos depende del ser humano. El otro gran libro del Yazidismo, junto con el Kiteba Cilwe, es el Mishefa Res (Libro Negro). Las dos principales claves del yazidismo son la preocupación por la pureza religiosa y la creencia en la metempsicosis. Esto último se refiere a que los yazidíes creen que los Siete Seres Santos se reencarnan periódicamente en forma humana, llamada Koasasa. También existe una creencia en la reencarnación, sólo al alcance de unos pocos yazidíes.

Los yazidíes tienen cinco rezos diarios que deben realizarse mirando hacia el sol, y en el rezo de medodía, hacia Lalish. Estos rezos diarios no deben realizarse en presencia de extraños. El día sagrado es el miércoles y el de descanso, el sábado.

El ritual más importante es el peregrinaje anual de seis días de duración a la tumba del sheij Adi en Lalish, al norte de Mosul. Durante esta celebración, los yazidíes se bañan en e río, lavan figurillas de Melek taus y encienden multitud de luces en la tumba del sheij Adi y de otros santos. También se sacrifica un buey, lo que simboliza la llegada del otoño y sirve para implorar la lluvia durante el invierno, de forma que a la primavera siguiente, la vida renazca.

El año nuevo yazidí cae en primavera, poco después del equinoccio. En ese día, las mujeres se lamentan en los cementerios al son de la música, pero los demás eventos de ese día, son alegres.

Al igual que los zoroastristas, los yazidíes también son víctimas del Terror impuesto por el Estado Islámico. Son ya miles los zoroastristas y yazidíes asesinados por éI.

Malak Tawus se negó a someterse a Adán

La creencia fundamental del Yazidismo narra que su ser supremo, Yasda, envió a siete arcángeles a cuidar de la tierra y puso al mando a su favorito, Malak Tawus, también llamado «el Ángel Pavo Real», que fue creado el primero a partir de la propia iluminación divina. Dado que Yasda es una fuerza inactiva, las tareas de guardar la tierra y sus criaturas recayeron en estos arcángeles. Pero, cuando este dios reclamó a los siete arcángeles que le trajeran polvo de la tierra para crear al primer ser humano, Adán, y ordenó a Malak que lo protegiera a toda costa, éste contestó enfurecido: «¡Cómo puedo someterme a otro ser! Soy de tu iluminación, mientras que Adán está hecho del polvo». La negativa de Malak Tawus a ponerse al servicio de los seres humanos provocó la furia divina y le condenó al infierno.

El ángel caído –identificado por los cristianos y musulmanes como el Diablo, Lucifer o Satanás– consiguió apagar el infierno con las lágrimas acumuladas durante 7000 años, granjeándose el respeto de los yasidíes que, según la teoría más aceptada, no veneran a Malak Tawus por amor hacia él, sino con el objetivo de que alcance algún día el perdón de Yasda y se acuerde entonces de quienes le ayudaron a conseguir este propósito. Así, «el Ángel Pavo Real», que en el Cristianismo primitivo era un símbolo de inmortalidad porque se considera que su carne aguanta más tiempo sin descomponerse, se convirtió con su acto de desobediencia en el álter ego de Dios, inseparable de él, y protagonista de los cinco rezos diarios. Su vinculación directa con el Diablo deriva del otro nombre que recibe este ángel, Shaytan, que es la palabra árabe para designar a Satanás, lo que ha provocado que se etiquete erróneamente a los yazidíes como «adoradores del Diablo», tal y como lo entienden los musulmanes y los cristianos. No obstante, la palabra «Taus» se deriva, muy probablemente, del griego y se relaciona con las palabras Zeus y Theos, aludiendo al significado de Dios. De esta forma, Melek Taus sería traducido como el «Ángel de Dios».

La principal razón del hermetismo en las comunidades yasidíes, achacado en parte al carácter oral de sus narraciones, nace de la imposibilidad de ingresar sin tener lazos sanguíneos dentro de ellas. La conversión a otra religión es algo poco habitual, así como su salida de la comunidad, puesto que los yasidíes creen que el alma atraviesa distintas formas humanas –transmigración– y que la purificación gradual se hace posible con el renacimiento constante dentro de su entorno social. A falta de un infierno, lo peor que le puede ocurrir a un integrante de esta religión es la expulsión de su comunidad, por cuanto esto significa que el alma no podrá nunca progresar.

Otra de las diferencias respecto a las principales religiones monoteístas está en la fecha del año nuevo yazidí, en primavera, poco después del equinoccio. En lo referido al papel de las mujeres, los yasidíes no tienen ceremonia de matrimonio religioso por lo que la tradición es secuestrar, de forma teatral, a la novia de la casa familiar y retenerla durante un breve tiempo antes de hacer un arreglo de dote. Se acepta el divorcio, y el adulterio femenino es consentido, siempre y cuando sea aprobado por el marido. Por otro lado, los varones pueden beber alcohol, y el cerdo no está vetado como en el Islam.

Fuentes