Estado depresivo en el adulto mayor

Estado depresivo en el adulto mayor
Información sobre la plantilla
Estados depresivos en el adulto mayor (EDAM) .jpg

Estado depresivo en el adulto mayor. Situación afectiva de tristeza que ocurre en el adulto mayor.

Introducción

Para que se pueda realizar el diagnóstico de un estado depresivo, el DMS-IV y la ICD-10 afirman que debe existir un estado de ánimo depresivo o una pérdida de interés o de placer. Aunque no forman parte de los criterios diagnósticos, la depresión en esta etapa de la vida se suele acompañar de cambios corporales, como hipercortisolemia, aumento de la grasa abdominal, pérdida de densidad mineral ósea, incremento en el riesgo de diabetes tipo 2 e hipertensión.

Los estados depresivos en los adultos mayores (EDAM) son frecuentes y de diagnóstico difícil, las dimensiones sociales, psicológicas, ambientales y biológicas están entrelazadas en esta patología. Se estima que la sexta parte de los individuos de una comunidad experimenta un episodio depresivo mayor a lo largo de su vida, de los cuales la mitad contacta a un médico. Los EDAM son banalizados y a menudo considerados como una consecuencia del envejecimiento del ser humano. Por este motivo, son insuficientemente tratados y no reciben un apoyo multidisciplinario.

Son las patologías psiquiátricas que más se presentan en los consultorios del internista, solo el 43% de estos pacientes son diagnosticados y tratados adecuadamente.

Síntomas de depresión en los adultos mayores

La depresión no es una parte normal del envejecimiento, y la mayoría de las personas mayores se sienten satisfechos con sus vidas. Sin embargo, la depresión puede ocurrir y ocurre en los adultos mayores. Por desgracia, a menudo no se diagnostica ni se trata. Muchos adultos con depresión se sienten reacios a buscar ayuda cuando se sienten abajo.

En los adultos mayores la depresión puede ir sin diagnosticar porque los síntomas – por ejemplo, fatiga, pérdida de apetito, trastornos del sueño o pérdida de interés en el sexo puede parecer que es causada por otras enfermedades.

Los adultos mayores con depresión pueden tener síntomas menos evidentes. Puede que se sientan satisfechos con la vida en general, aburrido, impotente o sin valor. Ellos siempre pueden querer quedarse en casa, en lugar de salir a socializar o hacer cosas nuevas. Pensamiento suicida o sentimientos en los adultos mayores es un signo de depresión grave que no debe tomarse a la ligera, especialmente en los hombres. De todas las personas con depresión, los hombres adultos mayores están en mayor riesgo de suicidio.

Problemas de diagnóstico

Muchos de los problemas de diagnóstico están en relación con: •La dificultad de los adultos mayores (AM) en expresar su sufrimiento moral.

• La falta de sensibilidad clínica de los médicos generalistas para sospechar una enfermedad psiquiátrica subyacente a sus problemas orgánicos.

• Al poco tiempo de consulta dedicado a los pacientes adultos mayores

• La consecuencia a corto y mediano plazo del insuficiente diagnóstico es el suicidio, sobre todo en pacientes mayores de 80 años.

• El riesgo de suicidio es mucho más importante en los adultos mayores que en los jóvenes, 1/10 jóvenes llegan al acto de suicidio después de un intento; esta cifra se eleva a 6/10 en los adultos mayores.

El trastorno distímico

Es un síndrome de depresión leve a moderada que dura al menos 2 años. La depresión menor en personas añosas se asocia con incapacidad de tipo funcional y en cerca del 25% aparece depresión mayor en los 2 años siguientes.

Algunos autores postulan que el estrés, la depresión mayor y las enfermedades orgánicas se vinculan de forma recíproca, dado que el estrés promueve adaptación, pero cuando sus mediadores no pueden inhibirse se deteriora la inmunidad y se favorece el desarrollo de aterosclerosis, obesidad, desmineralización y atrofia neuronal.

Epidemiología

Los EDAM tienen una frecuencia bastante importante aunque el porcentaje es aún muy variable según los estudios analizados. El uso de escalas o instrumentos de evaluación no fueron creados para los AM, hoy en día existen escalas adaptadas.

En la población general los síntomas depresivos pueden llegar al 15 - 17 %, este valor se potencializa dependiendo de la situación en que se encuentran los pacientes, por ejemplo los AM que se encuentran en casas de reposo y lejos de la vida familiar presentan una prevalencia del 5 al 30%.

Factores desencadenantes

Los factores genético] cumplen un papel etiológico importante en relación con la depresión. La heredabilidad varía entre el 31-42% y la contribución del medio ambiente llegaría al 67%. La coincidencia familiar sería más frecuente en los casos de episodios depresivos recurrentes de comienzo temprano. En general se acepta que existen numerosos genes con efectos importantes. El factor neurotrópico cerebral (BDNF [brain-derived neurotrophicfactor]) desempeñaría un papel importante en relación con la efectividad del tratamiento antidepresivo. No obstante, no existen datos concretos acerca de la asociación entre sus alelos y el TDM. En ciertos subgrupos de pacientes se hallaron polimorfismos del promotor del gen de la monoaminooxidasa A (MAO-A), enzima sobre la cual actúan los antidepresivos

Las formas clínicas de presentación difícil

Delirio de persecución congruente con su estado de humor.

Ideas de enfermedad incurable o de ruina.

Hipocondría.

Depresión y demencia: Las demencias degenerativas de tipo subcórtico frontales y vasculares pueden estar asociados a cuadros depresivos en el curso de su evolución, esta depresión no mejora hasta que un tratamiento anticolinesterásico sea instaurado asociado a su antidepresivo.

Cambios en el desempeño cognitivo: el EDAM se asocia con la presencia de disturbios cognitivos, especialmente de la memoria episódica, lo cual se relacionaría con la disfunción hipocámpica. El subtipo y gravedad de la depresión y la edad del paciente pueden modificar la memoria episódica.

Fuentes