Mikan Enikki (serie)

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Mikan Enikki (serie)
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Mikan es un gato que al quedarse huérfano de amo decide ir a la ciudad, donde conoce a Tom (Tomu Kusanagi). A partir de entonces, Mikan empieza una nueva vida junto a Tom y la familia Kusanagi, hasta que la nueva familia nota que el gato puede hablar.
Características Generales:
Creador de la historieta:Editor Miwa Abiko
Escritor(a):Miwa Abiko
País de origen:Japón
Demografía:Shōnen,Shōjo
Género:Serie de TV. Animación, Comedia, Anime
Fecha de inicio:16 de octubre de 1992
Edición en papel:
Revista:LaLa
Volúmenes:14
Versión para televisión:
Estudio:Nippon Animation
Director(a):Noboru Ishiguro
Guionista(s):(Manga: Miwa Abiko)
Productores(as):Nippon Animation
Episodios:31
Compositor(a):Tomoki Hasegawa
Reparto:Animación, Akiko Hiramatsu, Chie Satô, Sumi Shimamoto

Mikan Enikki. Conocida también como Mikan el Gato o Mikan el Gato naranja en español, es una serie de anime japonés de género comedia y romance creada como manga por Miwa Abiko en el año 1988. Compuesta de 31 episodios y producida por Nippon Animation Co. LTD. Transmitida en Japón los primeros 30 episodios desde el 16 de octubre de 1992 y 24 de agosto de 1993 el episodio 31.

Argumento

Mikan es un gato que al quedarse huérfano de amo decide ir a la ciudad, donde conoce a Tom (Tomu Kusanagi). A partir de entonces, Mikan empieza una nueva vida junto a Tom y la familia Kusanagi, hasta que la nueva familia nota que el gato puede hablar.

La nueva personalidad del gato se rebela mostrando que no solo puede hablar sinó caminar en dos patas, leer e incluso ha adquirido el gusto por el licor. La serie aparece narrada por Mikan a inicios y final de cada capítulo con el púnto de vista humorístico propio del personaje.

La serie fue emitida en la década de 1990 por Cable Kin de México. Transmitida también en Perú, y algunos capítulos en Colombia, fue transmitida en Cuba por Cubavisión y en Catalunya por TV3.

Comentarios

Mikan vino a representar un inmenso oasis en medio del marasmo de 1995. Aunque aun se emitía Saint Seiya o Captain Tsubasa, estas ya eran repeticiones y pasaría un año antes de que salieran otras series como Dragon Ball o Sailor Moon. Claro, fui de los pocos afortunados que logre verla (en compañía de mi hermano) en aquel entonces, ya que cuando quería platicarla con amigos y compañeros, estos no la habían visto o sencillamente no le prestaban atención a un canal de corte infantil como Cable Kin. Aun hoy en día, es una serie casi desconocida (casi al nivel de Yat-1) para la mayoría. Sí conservo un buen recuerdo de ella, se que en su momento grabe con mi vieja VHS varios episodios bastante emblemáticos de la serie.

Mikan es un anime clásico, es decir, que tiene una idea original, bien desarrollada, pero sin grandes giros argumentales. Técnicamente es la narración de la convivencia entre Tom y Mikan, así las vivencias que tiene este último con la familia Kusanagi (los padres también se llegan a enterar de que Mikan habla), no solo desde la perspectiva de un gato, sino de un gato que habla y que aparte tiene un carácter bastante peculiar (por momentos rebelde pero muy perspicaz). Es curioso que para una idea tan sencilla, la serie fuese tan entretenida, llegando a tener partes muy diferenciadas.

La primera es simplemente la presentación de todos los personajes y como Mikan es aceptado por los Kusanagi, llegando a culminar con los regalos que recibe el susodicho durante navidad, que consiste en su moño, donde porta la armónica, así un diario de dibujo, donde cual chiquillo de preescolar, el protagonista gatuno va plasmando toda su vida en base a garabatos que luego se volverían muy temáticos en la serie. La segunda es cuando se hace una presentación bastante generosa de los secundarios. Y no solo hablamos de los compinches de Mikan (que llegan a hablar en nuestro idioma entre ellos, aunque solo se escuchen maullidos desde la óptica de un humano), sino también de los compañeros de Tom. Esto último es lo más simpático de la serie, ya que hay un romance entre el protagonista humano con la chica bonita del salón, que igualmente parece desarrollar sentimientos hacia él. Aparte de el mejor amigo, que pese a su expresión de villano, en realidad es todo lo contrario. Por supuesto, los amigos de Mikan también son muy característicos. Desde el gato sin dueño que le gusta vivir así, hasta el Persia sumamente mimado y gordo, como inclusive el perro del doctor de la familia Kusanagi, con el cual Mikan hace buenas migas.

Este desfile de personajes, muy bien definidos y manejados, hacen que el segundo tercio de la serie sea sumamente divertido y ameno. Te sacaba, sea una risa o algún momento de drama, como cuando la enfermera del Doctor se decide ponerse a dieta y se desmaya por ello, siendo auxiliada por el gato gordo que tiene por mascota. Curiosamente, esta trama acaba cuando Mikan consigue "pareja" y tiene un hijo que también se vuelve mascota de los Kusanagi.

Este hecho me pareció muy curioso, ya que la primera mitad de la serie te muestra a Mikan como un niño pequeño, inclusive más que Tom. Sin embargo, luego te llevas la sorpresa de que anda de coqueto con una gatita (la cual él vio nacer, aun más extraño) y terminan teniendo al chamaco. Este cambio de paradigma me llego a desconcertar y de repente el aire infantil del protagonista se había desvanecido, viéndolo como padre y mucho más maduro. Esto en retrospectiva me parecía un punto muy realista y atinado de la serie, ya que te permitía ver una evolución diferente a la humana, mucho más rápida pero natural. Claro, esto conllevo a un tercer acto mucho más serio, menos comedia, a veces dramático y aprovechando para contar el pasado de Mikan con el abuelo, siendo de los episodios más lacrimógenos de la serie. Extrañamente (sí, para variar), también tiene de los episodios más chistosos que he visto, ya que Mikan, su hijo y los Kusanagi se van de paseo en coche, teniendo aventuras tal como familia normal, pero claro, con los clichés de la descomposición del auto hasta los gruñidos de la señora Kusanagi por ser la conductora.

Como ven, la combinación de comedia/romance/drama era bastante equilibrada y aunque el tono de la serie era ligero en su mayoría, había momentos que hacían muy emotivo el episodio, sea desde un aspecto serio (los episodios donde conocemos al abuelo son bastante durillos) o muy emotivos (al nivel de romance o de pura hilaridad). Claro, también había una cierta moralina en algunos episodios, pero sin expresarla directamente, sino mediante las acciones de los personajes. Curiosamente, pesé a que Mikan era el protagonista, este muchas veces servía de conductor o enlace a los personajes humanos de buena manera.

Aunado a esto, teníamos una buena banda sonora, no solo a nivel instrumental, sino también en un opening bastante original y dos endings sumamente dispares: uno bastante dramático (con imágenes del manga) y otro más cómico y hecho con los dibujos del protagonista gatuno. Aquí tengo que comentar algo que le dio un plus positivo: el doblaje. Sep, la serie la disfrutamos en Cable Kin con doblaje colombiano y debo decir, que pese a la rareza de algunas voces (ni se diga de ciertos términos, como decirle pasabocas a los bocadillos), este hizo que realmente me enganchara a la serie, ya que la actriz de doblaje de Mikan le daba un aire muy carismático al personaje e igualaba o diría, superaba la voz de la seiyuu original, Tarako. Por supuesto, también llegaron a ponerle voces masculinas a los chicos (pese que el original son chicas) y eso hacía más adoc la serie.

Dato Curioso

El nombre de "Mikan" es dado por la propia familia Kusanagi, ya que antes el protagonista tenía precisamente el nombre de "Tomu" (y lo cual sirve para que este y el chico se conozcan). La palabra significa "naranja" en japonés.

Fuentes