Elcires Pérez González
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Elcires Pérez González: Destacado luchador revolucionario estudiantil que se enfrentó a la tirania de Fulgencio Batista.
Sumario
Incios
Nació el 16 de diciembre de 1938 en el poblado de Guayos, fueron sus padres César Pérez y Nila González, pero en realidad fue atendido por los ancianos Ismael Calero y Teodora Rodríguez los que lo criaron como un hijo.
Yiyo como lo llamaban cariñosamente, cursó sus primeros estudios en la escuela privada de la señora Eurania Gómez y luego en la del señor Eduardo Gómez del Valle, ambas en su pueblo natal. Al cumplir los trece años de edad ingresa en el Instituto de segunda enseñanza de Sancti Spíritus, centro en el que se destaca por su inteligencia y sentido del deber.
Sus características
Era un joven espigado de negros ojos, los que trasmitían a su rostro una sensación de inteligencia, que se reflejaba en su semblante juvenil, abierto siempre en perenne sonrisa. Su mayor placer era reunirse con los niños y viejos y conversar sobre todo con los indigentes que tenían por hogar los elevados de Guayos.
Líder del estudiantado revolucionario
Por las cualidades de su personalidad se transforma en el líder natural del estudiantado revolucionario progresista de dicho instituto y además logra la unidad e influye en otros centros como las Escuelas de Comercio, Artes y de Oficios donde muchos jóvenes siguen sus ideas.
Muchos de sus compañeros recuerdan a Elcire encabezando un desfile estudiantil en Sancti Spíritus para rendir tributo a nuestro apóstol José Martí en la fecha del centenario de su natalicio. Las manifestaciones llevaban un cartel donde se expresa que “la patria es ara, no pedestal”.
Tomás Álvarez de los Ríos y otros testimonios señalan que ese mismo día por la tarde se inaugura un busto de Martí en Guayos y allí la multitud presente pudo escuchar a Yiyo pronunciar la misma frase que había encabezado el desfile.
Otra de sus facetas
Una conocida faceta de su vida fue cuando junto a otros compañeros firma un documento contra el pretendido proyecto de realizar el canal marítimo Vía Cuba, en 1954, que dividiría a la isla en dos. Fue detenido y sometido a juicio quedando todos absueltos.
Su participación en el movimiento 26 de julio
A fines de 1955 se funda el movimiento 26 de julio en Guayos, en cuya tarea se destaca convirtiéndose en su jefe indiscutible, por su capacidad organizativa y dedicación a la causa de la revolución que se iniciaba.
Ante la constante persecución de que era objeto debido a su actividad clandestina en la propaganda contra el tirano y a la recaudación de fondos y otras tareas propias de la clandestinidad decide el movimiento su traslado hacia La Habana en los primeros meses de 1957 donde podía seguir trabajando favor de la Revolución con mayores posibilidades de burlar la vigilancia de los sicarios de batista. Se incorpora al llegar a la lucha clandestina bajo las órdenes de Faustino Pérez.
En noviembre de 1957 fue detenido y estuvo preso once días en la quinta estación y de ahí fue trasladado para el castillo del Príncipe, logra enviar una carta a su mamá de crianza, escrita el 4 de Febrero de 1958, en la que le expone de la prisión y le expresa muchas ideas que demuestran la profundidad de su pensamiento, cuando apenas cumplía los 19 años de edad.
Muerte
El 14 de marzo de 1958 Elcire subió con cuatro compañeros a un auto siendo perseguidos por un auto patrullero del SIM. Decidiendo los mismos saltar del vehículo y refugiarse en un garaje pero fueron localizados por los esbirros y resultaron ametrallados. Elcire murió posteriormente en un hospital militar después de nuevas torturas.
