Invasión a Occidente en La Habana

Plantilla:Hechos Invasión a Occidente en La Habana. Hecho histórico acontecido en la antigua provincia de La Habana (actual provincia Mayabeque), con la invasión mambisa en 1895, llevada a cabo por el Generalísimo Máximo Gómez Báez y el Lugarteniente General Antonio Maceo Grajales.

Partida de la invasión

El llamado "plan militar más audaz de la centuria", comenzó el 22 de octubre de 1895 en el oriente cubano, bajo la dirección certera del Generalísimo Máximo Gómez Báez y el Lugarteniente General Antonio Maceo Grajales.

Gómez y Maceo en La Habana

El primer día del año 1896, las tropas invasoras penetraban en la tierra habanera, y al anochecer acampaban en Bagáez.
Con el inicio del 2 de enero las fuerzas desfilaban muy cerca de Nueva Paz, donde se encontraba el general de brigada Rafael Aldecoa, quien impávido, no se atreve a actuar. Mientras, el coronel mambí Roberto Bermúdez toma la población de Vegas, ocupando pertrechos y provisiones. A su vez, dejando fuego a todo su alrededor, los invasores desfilan por San Nicolás de Baris con la bandera cubana al frente, todo el pueblo les saluda jubiloso y la guarnición militar se entrega.
El Capitán General Arsenio Martínez Campos dicta un bando declarando en estado de guerra a las provincias de Pinar del Río y La Habana.
Al caer la noche, la columna invasora pernocta en una finca ubicada al sur del ingenio "Providencia", en [[Güines], donde se encontraban las ruinas del ingenio "Las Ninfas", que otrora perteneció a Francisco de Arango y Parreño.
Al amanecer del día 3 de enero, la columna reemprende su marcha, cruza el río Mayabeque, y desde los miradores del ingenio La Teresa, de Arango, es observada por los generales José García Navarro y Aldecoa, quienes no se atrevieron a enfrentárseles.
El coronel José Massó Parra ocupa Melena del Sur, obteniendo 80 fusiles y 1,500 balas, y el coronel Antonio Núñez ataca Guara, consiguiendo también armas. El resto de las columnas van a la zona de Novo.
Otros altos oficiales españoles, con sus hombres, se encontraban en el territorio, pero evadían los encuentros con los insurgentes. En Güines se encontraba el General de Brigada Ramón Echagúe, en Jaruco se hallaba Agustín Luque, por su parte Suárez Valdés en Melena, y les seguía el Coronel Galbis.
Se ataca a las poblaciones de Quivicán, Gabriel y La Salud.
En la tarde del 4 se combate en Güira de Melena, donde se obtiene un botín tan considerable como el de la batalla de Mal Tiempo; el destacamento enemigo se le rindió al capitán mambí Manuel Aranda, y ocuparon en total 300 armas 10,000 cartuchos y 100.000 pesos, pertrechos y múltiples mercancías.
El 5 salieron para Alquízar, donde sus voluntarios se rindieron; allí los invasores fueron recibidos por la población y lograron obtener armas y municiones; continuaron para Ceiba del Agua, donde acamparon; Maceo envió al joven general Juan Bruno Zayas a Caimito, donde se habían refugiado los voluntarios, los cuales fueron desarmados, y ocuparon dos depósitos de armas en la Iglesia.
Desde Ceiba, se atacaron y rindieron poblaciones del territorio: Vereda Nueva, Guayabal, Punta Brava y Hoyo Colorado.
Gómez y Maceo se separan en El Mosquito, cerca del Mariel, el 7 de enero; Gómez le expresó al Titán: " Uno de los dos tiene que quedarse para guardar la puerta. Vaya usted por Pinar del Río, que yo lo esperaré en La Habana."

Maceo desde el occidente regresa a La Habana.

En la provincia más occidental, Maceo efectuó una ejecutoria de hazañas: Mariel, Cabañas, Bahía Honda, San Diego de Núñez, Paso Real, San Cristóbal, Los Palacios, Santa Cruz de los Pinos, San Juan y Martínez, Consolación del Norte y del Sur, Guanes, La Palma, Las Taironas, y llega el 22 de enero a Mantua la población del extremo más occidental del país, de donde sale el 24, y prosigue hacia Santa Lucía, San Diego, Candelaria, Río Hondo, San Cristóbal, arribando de nuevo a La Habana: Güira, Melena, Quiivicán, San Antonio de los Baños, San Antonio de las Vegas, Jaruco, Moralitos, Catalina de Güines.

Gómez en La Habana.

Mientras el Titán completa la Invasión, el Generalísimo en 43 días desarrolla la "Campaña de la Lanzadera" en La Habana. Significó movimientos ágiles y ruidosos para atraer la atención, disgregar las fuerzas del enemigo, desacreditar a las autoridades coloniales, e incrementar el prestigio de la revolución. Esta proeza constituye otra joya del arte militar cubano.
Los mambises combatían en un territorio reducido y llano, con gran densidad de población, con más recursos por su cercanía a la capital pero con los ya dictados bandos de reconcentración, con abundante aglomeración de fuerzas militares enemigas, sin grandes bosques, con abundantes y amplias cercas de piedras y de piña de ratón que producto de la estructura agraria dificultaban el movimiento, y una vasta red de vías de comunicación y líneas de ferrocarril.
Gómez se mueve incesante: Gabriel, Güira de Melena, Ceiba del Agua, Alquízar, Mi Rosa, La Salud, Bejucal, San Antonio, Nazareno, Santa Amelia, Moralitos, Catalina de Güines.

Últimos encuentros entre los dos grandes.

Tras el combate de Moralitos, en San José de las Lajas, el 19 de febrero, Gómez y Maceo se encuentran en San Pablo, Catalina de Güines. Gómez pernoctó con la impedimenta en la finca Pedroso, Güines, mientras que Maceo lo hizo en las ruinas del ingenio "Nuestra Señora de la Encarnación", en El Gato, al sureste de Catalina de Güines, donde en la mañana del 20 de febrero sostiene un combate con el enemigo.
Se reencuentran el 21 en el ingenio San Luis, cerca de Nueva Paz.
El 23 Gómez parte para Hanábana, y Maceo para Matanzas, ubicándose el 26 de nuevo en la provincia habanera: Ibarra, Bainoa, Nazareno, Río Bayamo, Dolores y Ácana, partiendo de nuevo para Matanzas.
El 10 de marzo ocurre la última entrevista entre los dos.
El 11 de marzo de nuevo Maceo en Nueva Paz, el 12 pasa por el sureno ingenio La Teresa, al sur Güines y Melena, prendiéndole fuego, el l3 ataca Batabanó y de nuevo prosiguió imperturbable para su épica campaña en Pinar del Río.
El Titán regresa a la provincia habanera a principios de diciembre, cuando en la noche del 4 cruza la trocha de Mariel Majana, por la bahía, para caer en combate el 7 de marzo de ese último mes del año 1896, en momentos en que Gómez ejecuta la magistral Campana de la Reforma en el centro del país.

Fuente

• Documentos del Museo municipal Güines. Lic. Abilio González González

Véase también

• Invasión a Occidente