Polución

Polución
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Concepto:Contaminación intensa y dañina del agua o del aire, producida por los residuos de procesos industriales o biológicos

Definición

Polución es una noción que tiene su origen etimológico en el vocablo latino pollutio. Se trata de la contaminación ambiental que provocan ciertas sustancias y desechos. La polución, en este sentido, genera múltiples problemas para la naturaleza y para todos los seres vivos. Por ejemplo: “El grupo ambientalista exigió medidas para reducir la polución en el centro de la ciudad”, “La fábrica fue clausurada por las autoridades debido al elevado nivel de polución que generaba”, “Sueño con vivir en un mundo sin polución, en el que nuestros hijos puedan respirar aire puro”. La polución implica una modificación dañina de un ecosistema, a partir de la introducción al ambiente de un agente contaminante. Dicho agente puede tener diferentes características, de acuerdo a su origen.

El ser humano y la polución

Lo habitual es que la polución sea provocada por la acción del ser humano. Las actividades que realizan las personas suelen acarrear una huella ambiental; es decir, dejan su marca en el planeta. Si una industria, en el marco de su proceso productivo, genera emanaciones de gases contaminantes, estará causando polución. Quienes vivan en los alrededores de la fábrica en cuestión pueden sufrir diversos problemas de salud debido al contacto con esos gases. Si bien muchas organizaciones luchan por proteger la integridad del planeta y por promover estilos de vida más respetuosos, nuestra civilización ha llegado a un punto en el que resulta prácticamente imposible frenar la polución: si queremos continuar disfrutando de ciertos beneficios como los vuelos en avión, el transporte automovilístico, la televisión y los productos masivos, deberíamos hallar métodos revolucionarios para sostenerlos sin generar ningún tipo de contaminación ambiental.

El mal menor

Ante esta realidad, así como sucede en otros casos, se suele buscar el mal menor o, como lo definía santo Tomás de Aquino, la «menos dañina de las soluciones». Por lamentable que parezca, el sistema en el que vivimos es demasiado complejo como para resolver todos los problemas que acarrea, y por eso la manera realista de encararlos consiste en eliminar los pocos que pueden ser eliminados y reducir el impacto del resto.

En las ciudades más organizadas y con un control estricto del estado de los vehículos, la polución no se hace tan evidente como en aquéllas en las que las reglas parecen haber sido creadas para evadirlas. Mientras en ciertos lugares del mundo la nube gris es imposible de ignorar y representa una pesadilla para personas con problemas respiratorios, otros disimulan los daños que causan al planeta con abundantes árboles en sus calles y con coches mantenidos rigurosamente. En todos los casos, ningún paisaje urbano es sinónimo de aire puro, algo que sólo podría conseguirse si no hubiésemos alterado ningún ecosistema de manera violenta. A gran escala, la polución es señalada como la responsable de diversas alteraciones ambientales que amenazan la vida en la Tierra. Los científicos afirman que, debido a la polución que existe en la atmósfera (provocada por las emanaciones de los vehículos, la actividad industrial, etc.), se produce el llamado efecto invernadero que lleva al calentamiento del planeta.

Polución nocturna

Se conoce como polución, en otro sentido, a la expulsión de semen. La polución, en este sentido, es sinónimo de eyaculación, aunque el concepto suele usarse asociado sólo a la eyaculación que no es voluntaria y que se concreta mientras el hombre duerme (la denominada polución nocturna). La polución nocturna aparece en el paso de la niñez a la adolescencia y suele causar sorpresa, a la vez que vergüenza, dada la normal falta de comunicación entre padres e hijos. Para un varón de 12 años que no ha recibido la información pertinente acerca del desarrollo de su cuerpo, despertarse en medio de la noche o por la mañana habiendo experimentado su primera eyaculación puede resultar raro y desesperante ante la idea de que sus padres se enteren.

Medio ambiente

Polución o contaminación, en general. • A la polución atmosférica o contaminación atmosférica o contaminación del aire o polución del aire; • A la polución acústica (también, contaminación acústica, polución sonora o contaminación sonora), la contaminación debida a sonidos o ruidos molestos y fuertes; • A la polución del agua (también, contaminación del agua o contaminación hídrica); • A la polución de la tierra, la referida a los suelos; • A la polución electromagnética, la referida al electromagnetismo; • A la polución por plástico, la contaminación por acumulación de productos de plástico en el medio ambiente, lo que produce efectos adversos sobre la vida silvestre, el hábitat de la vida silvestre y/o sobre los seres humanos; • A la polución visual o contaminación visual, aquello que afecta o perturba la visualización de algún sitio o que rompe la estética de una zona o paisaje;

Diferencia entre contaminación ambiental y polución

En términos coloquiales, usamos estas dos expresiones como si fueran sinónimas. Sin embargo, los conceptos de contaminación ambiental y polución presentan ciertos matices que los diferencian. Es interesante llegar a este nivel de detalle porque es la manera más eficiente de encontrar soluciones específicas a los problemas que cada una de estas realidades provocan.

Cómo distinguir entre polución y contaminación ambiental

Para poder entender los matices que marcan las diferencias entre contaminación ambiental y polución, hay que recurrir a sus correspondientes definiciones léxicas recogidas en la RAE. Así, podríamos resumir que: • La contaminación ambiental es el resultado de introducir en un entorno agentes físicos o químicos con capacidad de alterar nocivamente ese determinado medio. • La polución es una forma de contaminación originada por residuos provenientes de procesos biológicos o industriales, que se caracteriza por manifestarse de una forma especialmente intensa y dañina en medios fluidos (el aire o el agua). Atendiendo a esta referencia terminológica, ya se pueden elevar conclusiones que marcan las diferencias entre estos dos conceptos. A grandes rasgos, se puede afirmar que cualquier tipo de polución es contaminación, mientras que la contaminación ambiental no siempre podría ser considerada polución.

Ejemplos para entender la diferencia entre contaminación y polución

No hay una forma más eficaz y potente de entender un concepto que a través de un ejemplo extraído de la realidad. Por eso, teniendo en cuenta una posible dificultad para apreciar los matices que distinguen la polución de la contaminación ambiental, nos parece interesante exponer casos concretos representativos de ambas situaciones. Seguramente, la primera imagen que se nos viene a todos a la cabeza al pensar en polución es una oscura y densa nube de humo proyectada a la atmósfera desde una fábrica. Efectivamente, este es un supuesto más que representativo de lo que es la polución. Lo mismo podríamos decir de los vertidos de aguas grises que desembocan en nuestros ríos, que llevan una elevada carga de polución biológica porque se trata de aguas no tratadas y filtradas, por lo que presentan altos niveles de concentración bacteriana. Si ahora ponemos el foco en ejemplos representativos de contaminación ambiental, el más simbólico es el de los vertederos de residuos naturales. Para que estos lugares puedan identificarse como un problema de polución, tendrían que generar una contaminación de tal intensidad que lleguen a verse alterados y afectados los acuíferos cercanos.

Las repercusiones de la polución

Ha quedado claro que la polución es un problema mucho más agudo que merece la adopción de medidas inmediatas y contundentes para frenarla, porque la afectación sobre el medioambiente y sobre nuestra salud es altamente nociva y peligrosa. Pero, además de esta primera distinción, hay otros elementos que ratifican por qué los términos contaminación ambiental y polución no deberían usarse como sinónimos si queremos ser rigurosos en el uso que hacemos del lenguaje y, sobre todo, precisos a la hora de afrontar los problemas específicos que acarrea cada uno de ellos. En concreto, otra de esas diferencias es la que se refiere al medio en el que se manifiesta la polución, que queda reducido exclusivamente a los fluidos. Es decir, solo se puede considerar polución al fenómeno contaminante intenso que afecta al aire o al agua. Este factor, lejos de ser menor, es esencial porque permite entender hasta qué punto las repercusiones directas que tiene la polución sobre nuestra salud son más graves que las de la contaminación medioambiental. Respirar un aire altamente intoxicado es una de las causas que explican el aumento exponencial de la prevalencia de enfermedades cardiacas y respiratorias en zonas con niveles elevados de polución de todo el planeta. De igual forma, la utilización para el consumo humano de aguas con niveles de contaminación excesivos se traduce en la aparición de enfermedades tan graves como el tifus, el cólera, la disentería o, incluso, la poliomielitis. De hecho, una de las alertas más urgentes que lanza la OMS se refiere a la necesidad de garantizar el acceso a agua potable para todo el mundo. Según sus propios datos, la polución del agua es responsable de más de 500.000 muertes por diarrea al año

Fuentes