Santa Cunegunda de Luxemburgo

Santa Cunegunda de Luxemburgo
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Religión o MitologíaCatólica
Día celebración3 de marzo
Patrón(a) o Dios(a) deLuxemburgo, Diócesis de Bamberg
Fecha de canonizaciónPor el papa Inocencio III el 3 de abril de 1200
País o región de origenLuxemburgo
Venerado enIglesia Católica Romana

Santa Cunegunda de Luxemburgo. Descendiente de Carlomagno, nació hacia 975 en Kaufungen, Alemania, hija de Sigfrido I, conde de Luxemburgo y de su santa esposa, Eduviges.

Contrajo matrimonio con el duque Enrique de Baviera, quien fuera después coronado Rey de Alemania, Rey de Italia y emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, conocido como Enrique II el Santo o Enrique II de Alemania (6 de mayo de 973 – 13 de julio de 1024.

Fue coronada emperatriz, junto a su esposo, el 14 de febrero de 1014 en la basílica de San Pedro, Roma, por el papa Benedicto VIII.

El 13 de julio de 1025, primer aniversario de la muerte de su esposo, Santa Cunegunda cambio sus vestiduras imperiales por el hábito religioso, recibió el velo de manos del obispo de la ciudad de Kaufungen e ingresó en el monasterio benedictino, en Hesse, cuya construcción había sufragado su esposo, quien había prometido erigirlo si sobrevivía a una grave enfermedad.

En el monasterio benedictino construido en Kassel, tercera ciudad en cuanto a importancia, de la región de Hesse, ofreció una reliquia de la Vera Cruz, se despojó de las insignias reales, tomó los hábitos y se consideró la última de las monjas, convencida de que eso era a los ojos de Dios, temerosa de lo que pudiera recordarle su antigua dignidad.

Oraba y leía mucho y se dedicaba especialmente a visitar y consolar a los enfermos. Murió el 03 de Marzo de 1040. Su cuerpo fue sepultado en Georg Simon Ohm, Bamberg junto al de su esposo.

Síntesis biográfica

Nace alrededor del año 975. Como tantos santos medievales, la biografía de Santa Cunegunda se basa en relatos mezclados con datos históricos y leyendas, de los que no siempre es fácil deslindar lo real. En el caso de Santa Cunegunda, existe una crónica que escribió Teitmaro de Merserburgo a principio de siglo XL, referente a su esposo, el Emperador San Enrique II, en la que hace hace justicia a la figura de su esposa y existen además los escritos que aparecieron con motivo de la canonización de ambos: San Enrique en 1146 y Santa Cunegunda el 3 de abril de 1200 en los que se recogen varios datos biográficos de ambos.

No son abundantes pero sí significativas y ejemplares las vidas de esposos santos, cuyo matrimonio adquiere la máxima virtualidad al convertirse en el camino por el que se ayudan y crecen espiritualmente mutuamente marido y mujer para seguir a Cristo. En el caso de Santa Cunegunda de Luxemburgo, esposa de San Enrique II, rey emperador, el ejemplo de sus vidas dejó expuesto que en el matrimonio unido por el amor en nombre de Cristo, es posible ser santo en el mundo, en el matrimonio y en la más alta sociedad.

Matrimonio

Cunegunda fue hija de Sigfrido fundador de la Casa de Luxemburgo. Hacia los 20 años contrajo matrimonio con Enrique, duque de Braviera. Tras la muerte repentina del emperador Otón III, Enrique fue coronado rey de Germania, el 7 de julio de ese año , en Maguncia. Poco después Cunegunda era coronada reina en Paderborn, y ambos recibieron la corona de emperadores en Roma, en el año 1014, por Papa Benedicto VIII, que anteriormente había pedido y obtenido la ayuda de Enrique II.

Los esposos emperadores no pudieron engendrar hijos que les sucedieran en el trono. Cuando se habla de castidad de Cunegunda (por ejemplo) el Papa Inocencio III en la bula de canonización no se trata de virginidad de la santa sino de la castidad conyugal: llegó virgen al matrimonio, hizo vida matrimonial con Enrique y mantuvo su castidad durante los 9 años que sobrevivió su marido. Se habla en su biografía de cierta acusación de adulterio a la Santa Emperatriz. Y como prueba irrefutable de su castidad conyugal, Cunegunda no dudó en caminar descalza por encima de una reja incandescente, sin que le causara ningún daño en los pies.

Cunegunda y Enrique aceptaron serenamente el designio divino de la esterilidad y entendieron que el Señor le pedía dedicar más tiempo a los asuntos que se refieren a la vida de la Iglesia y a la expansión del evangelio ambos dedicaron de común acuerdo nombrar a Jesucristo como heredero universal]. Y eran consciente de que era mejor entregar a Cristo su herencia y dedicar sus bienes de sus reino en la tierra: a los pobres, a las obras de religión.

Los santos esposos fundaron el obispado de Bamberg y el monasterio de Oberkaufunge, en el actual Land Alemán de Hesse. Tanto en la fundación como en el posterior seguimiento y dotación económica, el papel de Cunegunda fue decisivo.

Muerte

Cuando murió el emperador Enrique II, el 13 de julio de 1024, la viuda Cunegunda, que nunca había abandonado la vida ascética, ingresó en el monasterio de Kaufungen, actual Oberkaufungen. Los últimos 9 años de su vida hasta su muerte], el 3 de abril de 1200, los dedicó más plenamente a Dios.

El ejemplo que había dejado su marido a quién ya todos veneraban como santo, fue un motivo más para consagrar su vida al Señor. Por eso mereció que a raíz de su muerte el pueblo cristiano de la Europa Central le rindió culto, que Inocencio III aprobó con la bula de canonización en 1200 y posteriormente trasladó sus restos a la Catedral de Bamberg, al año siguiente . En el siglo XVI el escultor Riemenshneider dedicó un hermoso mausoleo a los dos esposos santos en la Catedral de Bamberg.

Fuentes