Angels on horseback (receta)

Angels on horseback
Información sobre la plantilla
Angels on horseback.jpg
Descripción de la receta
Entremeses
País de origen
Inglaterra
Ingredientes
ostras, linchas finísimas de tocino, pimienta, limón


Angels on horseback. Estos ángeles a caballo son una especialidad de la cocina inglesa, aun cuando no es raro encontrarlos en la carta de los restaurantes de otros países. Así ocurre en Francia, donde se denominan “anges á cheval”. Se trata de unos entremeses muy sabrosos, siendo muy raramente servidos como primer plato.

Características

El tocino tiene que estar crujiente u en su punto, pudiéndose emplear para su preparación tocino ahumado en lugar del salado y grasiento. Es cuestión de gustos. Las ostras sólo se deben tomar de septiembre a abril. En los meses restantes no son tan buenas y se estropean con facilidad. En la actualidad los bancos naturales de ostras sólo proporcionan una mínima parte de las que se consumen en el mundo, que proceden, en su inmensa mayoría, de “criaderos artificiales”, espacios cerrados, próximos a la costa, que se llenan con agua salada de mar y en los que se crían.

Origen

Aunque el plato es de origen inglés, el nombre procede probablemente del francés anges à cheval. Su primera ocurrencia, confirmada por el Oxford English Dictionary y otras fuentes, fue en 1888, en Mrs Beeton's Book of Household Management. Sin embargo, debe señalarse que hay una referencia al plato en un diario neozelandés, que incluye una receta breve, en 1882.Las relaciones ostra/ángel y panceta/caballo parecen carecer de importancia. Aunque a veces se considera un plato inglés tradicional, el plato también tiene seguidores irlandeses: recientemente apareció en el menú que dio a Danny Millar el premio regional irlandés a en el Great British Menu.

Historia

Los angels on horseback también se sirven en los Estados Unidos, donde el plato nunca parece haber estado tan difundido como en el Reino Unido. Probablemente fue introducido de mediados a finales de los años 1890. Una de las primeras referencias en un diario estadounidenses es un artículo de 1896 del New York Times, donde el plato es sugerido como aperitivo. Según el Times, el plato se debe a Urbain Dubois, el cocinero del emperador alemán. En esta versión, se pinchan, se espolvorean con un poco de pimienta roja y se hacen a la parrilla, sirviéndose con limón y perejil (sin tostada). Extrañamente, la primera ocurrencia citada en el Dictionary of American Regional English es de 1909. En los años 1930, eran sugeridos, por ejemplo, como parte de un menú de picnic, y en 1948 de nuevo como aperitivo. En los años 1950, aparecieron varios artículos en diarios estadounidenses cuyos mismos títulos ya sugieren que el plato es poco conocido: For Oyster Treat, Try Angels on Horseback: They're Delectable Appetizer Sunday Menu (‘Para tomar ostras, pruebe los ángeles a caballo: son un aperitivo delicioso para la comida del domingo’) Angels on Horseback, English Monkey? Those Are Recipes! (‘¿Ángeles a caballo, mono inglés? ¡Estas son las recetas!’), y These Angels on Horseback Are Oysters (‘Estos ángeles a caballo son ostras’). Los angels on horseback alcanzaron cierta popularidad en los años 1960 en Washington D. C.: Evangeline Bruce, esposa del embajador estadounidense y enviado diplomático David K.E. Bruce, famosa por sus «veladas washingtonianas», los sirvió con regularidad durante el mandato de John F. Kennedy, pero incluso entonces, el nombre no era muy conocido, como sugieren las palabras de la periodista rosa Liz Smith: «A veces las ostras estaban crudas, y a veces a la parrilla y envueltas en panceta. Entonces Mrs. Bruce las llamaba angels on horseback.» Tan tarde como en los años 1980, el Chicago Tribune llamaba al plato «intrigante», sugiriendo que no se había popularizado en los Estados Unidos.

Ingredientes

  • 12 a 16 ostras
  • 12 a 16 linchas finísimas de tocino
  • Pimienta
  • 1 limón

Elaboración

Abrir las ostras y extraer la carne. Emplear solamente las ostras que estén fuertemente cerradas; las que se encuentren entreabiertas deberán desecharse. Envolver cada ostra en una loncha fina de tocino, sujetándolo con un palillo, y espolvorear con pimienta recién molida. Poner las “ruladas” de ostras en una fuente refractaria, metiendo a continuación en el horno, previamente calentado, y dejar durante 10 a 15 minutos. Servirlas calientes con limón y tostadas de pan. Las ostras pueden prepararse también en el grill, debiendo mantenerse a una distancia de unos 10 cm de éste. Dejarlas hacerse por cada lado de 3 a 4 minutos. Pueden recubrirse con pan rallado, si así se desea, pero en este caso deber a emplearse solamente mantequilla.

Fuentes