Bamboleo torácico en el niño

Bamboleo torácico en el niño
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Concepto:Alteración que sufre la parrilla costal cuando se produce fractura doble de varias costillas

Bamboleo torácico en el niño. El bamboleo torácico o tórax batientes es una patología poco frecuente en la infancia. Es la alteración que sufre la parrilla costal cuando se produce fractura doble de varias costillas

Concepto

Se denomina Bamboleo torácico o Tórax batiente a la alteración que sufre la parrilla costal cuando se produce fractura doble de varias costillas contiguas, determinando pérdida de la rigidez de la caja torácica. Esto trae como consecuencia que la zona fracturada se mueva libremente y en sentido contrario a los movimientos del tórax, así que durante la inspiración se deprime la zona fracturada y en la espiración se abomba, produciéndose graves trastornos de la mecánica cardiorespiratoria.

Etiología

La causa habitual de las fracturas costales de este tipo son las contusiones intensas del tórax y las lesiones por aplastamiento. Con frecuencia se producen fractura del esternón y lesiones de los órganos intratorácicos, lo que empeora el pronóstico.

Fisiopatología

Las alteraciones fisiopatológicas que se producen al moverse libremente la zona fracturada están dadas porque durante la inspiración aumenta la presión negativa intratorácicos produciéndose la retracción de la zona fracturada; esto ocasiona una disminución de la expansión en el pulmón del lado lesionado. También se produce desviación mediastino hacia el lado sano por ser mayor la presión negativa en este lado y se produce el fenómeno del “aiere péndulo”, del lado lesionado hacia el lado sano.

Durante la espiración la zona fracturada se abomba y el mediastino se mueve hacia el lado lesionado, pasando aire pobre en oxígeno desde el pulmón del hemitórax sano al lesionado.

Estos movimientos del mediastino, llamados “bamboleo”, aleteo o flutter mediastinal, producen una expansión pulmonar insuficiente y disminución del retorno venoso al corazón.

Todas estas alteraciones producen hipoxia marcada, paro cardiocirculatorio por hipoxia y shock hipovolémico por disminución del gasto cardíaco.

Diagnóstico

Se basa fundamentalmente en los antecedentes de trauma violento, examen físico, donde se constata el movimiento paradójico de la zona fracturada y el Rx del tórax donde se comprueba la presencia de varias costillas fracturadas.

Tratamiento

Consiste en restablecer la estabilidad de la caja torácica lo antes posible para evitar que se produzcan los trastornos fisiopatológicos antes descritos. Se procede a inmovilizar la región afectada por diferentes métodos: bandas de espradrapo previo empaquetamiento con gasa o algodón de la zona afectada; tracción, ya sea de la piel, con seda o con pinzas erina, o alambre de acero a nivel de las costillas.

Otra forma de tratamiento es la ventilación mecánica con PPI (Presión Positiva Intermitente) o la ventilación de alta frecuencia (HFV). La duración del tratamiento nunca es menor de 15 a 21 días. Otros aspectos del tratamiento son: analgésicos, cambios postulares, colchón antiescara, alimentación adecuada, etc.

Atención de enfermería

  • Recepción del paciente según el manual de procedimientos de enfermería en Terapia Intensiva Pediátrica.
  • Aseo si lo permite su estado crítico; en caso contrario se pospondrá para después de las medidas emergentes y mejoría del paciente.
  • Colocar en área cercana y listo para su uso el “carro de paro”.
  • Canalización de vena periférica con “mocha” o trocar plástico.
  • Preparación del área para realizar el abordaje venoso profundo así como el arterial si está indicado.
  • Colocar el paciente a 30 grado para mejorar la dinámica respiratoria, eliminando en parte la prensa abdominal.
  • Ofrecer oxigenación adecuada (carpa, cámara, mascarilla, catéter, etc.) hasta tanto se prepare para intubación y ventilación si fuera necesario.
  • Mantener preparado el equipo necesario para intubación y ventilación si lo indicaran.
  • Movilización del paciente con sumo cuidado (recordar las fracturas dobles de varias costillas).
  • Preparar y ayudar a la inmovilización torácica si lo requiere según indicación médica.
  • Preparar y realizar metodología para la alimentación:
    • Bucal: Biberón, cucharita, jarrito.
    • Gavaje: colocación de sonda nasogástrica y administración de la alimentación convenida.
    • Gastroclisis: igual que el anterior, pero administrando la alimentación a goteo permanente y continuado, o discontinuo y cíclico.
    • Parenteral: puesta en marcha de bomba de infusión y preparación de las soluciones pertinentes para este tipo de alimentación o mixta.
  • Vigilancia de los signos vitales.
  • Vigilancia del estado de gravedad del paciente y su mejoría o progresión, para su informe correspondiente.
  • Control y anotación de los ingresos y pérdidas para conocer del balance hidromineral (peligro de deshidratación o sobrehidratación).
  • Cuidados del paciente encamado en evitación de escaras (movilización cuidadosa, uso del colchón neumático antiescaras, mantenerlo seco, etc.).

Fuente