Batalla de Cuaspud
La Batalla de Cuaspud  | |
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| Fecha | 6 de diciembre de 1863 |
| Lugar | Cuaspud, departamento de Nariño, Colombia |
| Resultado | Victoria decisiva colombiana |
| Territorio | Ecuador y Colombia |
La Batalla de Cuaspud se llevó a cabo el 6 de diciembre de 1863 entre los ejércitos de la República de Ecuador y los Estados Unidos de Colombia, como era llamado la actual República de Colombia. Fue una guerra de corta duración iniciada por diferencias de limitaciones entre fronteras.
Historia
Después de la ser eliminada la Gran Colombia, el General Tomás Cipriano de Mosquera intentaba reconstruirla proponiendo al Presidente de Ecuador Gabriel García Moreno, el proyecto para lograrlo, lo cual este rechazó por contar en su plan en instituciones muy diversas a las de él, ya que sus ideologías eran distintas. García Moreno era un ferviente católico que buscaba la reforma del clero ecuatoriano con la ayuda de un concordato con la Santa Sede y por el otro lado, Mosquera era un total opositor de la Iglesia en Colombia.
Esto conllevó a que el General, arremetiera contra el presidente ecuatoriano enfadado tras su negativa, acusándolo de teocrático y haciéndose ver a él mismo como hijo de Bolívar y salvador de la patria. Los ecuatorianos también rechazaron la posible anexión a los Estados Unidos de Colombia y no permitirían la intromisión del presidente colombiano en asuntos internos del país, mientras que Mosquera daba apollo a todo revolucionario que pretendía derrocar al gobierno de García Moreno.
Sumándole a los problemas existían diferencias y choques de poder en las fronteras con los insurgentes conservadores, con quienes se había librado la Batalla de Tulcán en 1862, lo que preveían un inevitable conflivto.
En Ecuador se decía que el General tenía la intención de entragra el territorio ecuatoriano a Perú y quería que regresara a la Presidencia del Ecuador el Gral. Urbina, enemigo acérrimo de García Moreno. Al mismo tiempo Los liberales colombianos acusaron a García Moreno de querer adueñarse de la provincia de Pasto y parte del Territorio del Caquetá (actual Putumayo), y de pretender apoyar a los conservadores.
EL gobierno ecuatoriano envió al diplomático Antonio Flores Jijón, para realizar un acuerdo con el gobierno colombiano, pero el presidente de Ecuador no reconoció el acuerdo e inició la guerra. García Moreno envió al general Juan José Flores, mientras que Mosquera se apersonaba de las acciones del lado colombiano.
La batalla
El 15 de agosto el ejercito de Mosquera llegó al territorio del actual departamento de Nariño donde se enfrentaron en pequeños combates. Los ecuatorianos contaban con fortaleza en la caballería pero hasta diciembre no entró en batalla.
Moreno ordenó al general Flores moverse hasta el norte de Ecuador con alrededor de 8.200 hombres de infantería y 1.150 Jinetes distribuidos en 4 divisiones: la Draquea, la Salvador, la Maldonado y la Dávalos, casi la totalidad de los batallones existentes El General Tomas Cipriano de Mosquera logró movilizar a 4.000 soldados y 120 jinetes, al mando estos últimos por el Coronel Acero, el cual sólo pudo organizar tres divisiones dirigidas por los generales Sánchez, Rudensindo López, y el Coronel Gregorio Rincón.
En una haciendo fronteriza con Ecuador, Mosquera había señalado que anularía la caballería de Flores tras tomar un mapa donde se marcaba Cuaspud. El lugar era pantanoso con colinas y fangales completamente ocultos por espesa vegetación, producto natural de la humedad estancada como en un gran lago de lodo.
El día 4 de diciembre llegó el ejército colombiano al pueblo de Cumbal y el de Ecuador se situó en la hacienda Chautalá. El día 5 de diciembre Flores recibió el último refuerzo de tropa enviado desde Tulcán por el Coronel Gómez de la Torre, anunciando la proximidad del combate.
Flores, solamente se movía según su adversario, sin ningún plan de campaña. El 6 de diciembre Mosquera levantó el campamento de Cumbal y se dirigió en dirección del Carchi, Flores inmediatamente puso en movimiento a sus ocho mil soldados, enviando a los batallones 1º y 2º y trescientos jinetes en dirección de su contrincante, encontrándose repentinamente los dos ejércitos en las faldas de una colina llamada Cuaspud, amabos lados a muy corta distancia donde los disparos eran prácticamente a quema ropa.
Mosquera hizo creer con una orden fingida a su lugarteniente el General Payan que éste se lanzaría sobre Quito, y Flores cargó contra ellos, así Payan fingió retirada hasta Cuaspud haciendo que los ecuatorianos cayeran en el pantano. De esta forma Payan lanzó su ataque con violencia mientras Mosquera, con tropas frescas, se coronaba con la victoria.
Con esta estrategia, Mosquera y su ejército lograron situar en la colina a Flores y el Carchi y además defendido en buena extensión a causas de las profundas ciénagas que a simple vista parecían simples pastizales.
El día 6 de diciembre de 1863, quedaron atrapados más de mil doscientos jinetes de caballería de las fuerzas ecuatorianas, los cuales fueron fusilados por los tiradores colombianos.
Los sobrevivientes del ejercito ecuatoriano huyeron, de los cuales más de tres mil cayeron prisioneros entre oficiales y subalternos, y bajo la promesa de no empuñar las armas contra Mosquera, fueron puestos en libertad.
Luego de la derrota, muchos militares ecuatorianos huyeron buscando refugio en casas cercanas e incluso en pueblos aledaños al campo de batalla. Flores y algunos de sus soldados lograron huir hacia territorio ecuatoriano.
Mosquera, por su parte, avanzó hasta Carlosama, estableciendo allí su cuartel Militar. El día 7 de diciembre recibió una carta de Flores, fechada en Tusa, proponiendo la paz, a lo cual el presidente colombiano accedió, y para negociarla encargó al general Antonio Gonzales Carazo; el 21 de diciembre se firmó en Ibarra el armisticio.
El día 30 de diciembre de 1863, se firmó el tratado de paz, en la hacienda de Pizanqui. Mosquera hizo un pacto con Ecuador, reconociendo los límites ya existentes, la no intromisión en asuntos internos mutuos y un acuerdo de paz permanente. En consecuencia, nunca más se presentaron diferendos fronterizos entre estos dos países. Mosquera consolidó su poder interno y Ecuador pudo hacer lo mismo, ya que se concentró de lleno frente a la invasión urbinista.
