Candelabro de Paracas

Candelabro de Paracas
Información sobre la plantilla
Candelabro paraca-.jpg
Localización
ContinenteSudamericano
País(es)Bandera de Perú Perú Bahía de Paracas
Provincia(s)Sur de Lima
Características
Longitud183 m.
Anchura60 m.

Candelabro de Paracas, Llamado "tridente" o "candelabro" de Paracas, sus grandes dimensiones y su diseño sobre la arena permiten distinguir una relación con las líneas y geoglifos de Nazca.

Ubicación

El Candelabro, ubicado al noroeste de la bahía de Paracas, es un geoglifo (canales o líneas grabados en roca) que tiene una extensión de 120 metros, al que se le denomina también Tres Cruces o Tridente

Características

  • Longitud máxima: 183 m.
  • Ancho: 60 m.
  • Profundidad de los surcos: entre 1 y 1,20 m; actualmente, en algunos tramos, la arena ha cubierto parte de los surcos, reduciendo la profundidad a 30 cm.
  • Rectángulo en la base: 20 por 14 m.
  • Técnica de elaboración: Vaciado y prensado de las paredes, al excavar 10 o 15 cm aparece una formación de naturaleza cristalina.
  • Inclinación respecto al mar: 40°.
  • Antigüedad: no precisada.

El candelabro es grabado en roca de color crema, pero mayormente tapado con arena. La arena nunca llega a borrar por completo el candelabro debido a los vientos que siempre están quitando el exceso de arena de los canales. (muestra foto con la roca crema con arena) Se cree que el candelabro de Paracas tiene relación con las líneas y geoglífos de Nazca y de Pampas de Jumana.

La mejor forma de apreciar este geoglifo es desde el mar y los tours a las Islas Ballestas siempre pasan y paran algunos minutos para que los turistas pueden tomar sus fotos.

Descubrimiento

Julio César Tello Rojas

La cultura paracas fue descubierta por el médico y arqueólogo Julio César Tello Rojas en 1925. Halló los cementerios de Cerro Colorado y Cavernas cuatrocientos veintinueve fardos funerarios, muchos de los cuales contenían hasta dieciséis mantos además de esclavinas, turbantes, paños y demás adornos de uso personal.

Halló los cementerios de Cerro Colorado y Cavernas cuatrocientos veintinueve fardos funerarios, muchos de los cuales contenían hasta dieciséis mantos además de esclavinas, turbantes, paños y demás adornos de uso personal.

Dividió la cultura en dos períodos: Paracas Cavernas (7000 a.C.) y Paracas Necrópolis (2000 a.C.). Destacan muy especialmente las piezas textiles que envolvían las momias humanas contenidas en estos fardos.

Los tejidos Cavernas se caracterizan por ser de tipo geométrico y rígidos, predominando la técnica de doble tela Los tejidos Necrópolis, en cambio, presentan mayor maestría y delicadeza en los diseños debido a que eran bordados, lo cual permitía obtener hermosos motivos y creaciones llenas de color.

Mapa ubicación del Candelabro

Hipótesis interpretativas

Lo único verdaderamente cierto es que se desconoce cuales fueron sus orígenes, tanto en lo que respecta a sus constructores, fechas, y por supuesto, su significado y utilidad.

Pero si hay algo que no pasa inadvertido para nadie es que, tanto su estratégica situación como sus enormes proporciones indican una clara intención por parte de sus realizadores para que fuese visto desde grandes distancias (con tiempo despejado es perfectamente visible a 20 kilómetros de la costa), destacando especialmente su contemplación desde el mar, pero sobre todo desde el aire.

Extraterrestres

Los defensores de la teoría extraterrestre, sostenida por investigadores como Von Däniken o L.Taylor Hansen, aseguran que tales líneas, imborrables al paso de los siglos, serían obras de alienígenas, pues el Candelabro apunta directamente a las famosas líneas de Nazca, las que igualmente solo pueden apreciarse desde el aire y que sería señales de un gigantesco puerto sideral para naves extraterrestres.

Antiguos peruanos

Un examen detallado de los surcos de las líneas del candelabro de Paracas revela que al excavar la tierra del fondo, tras unos diez o quince centímetros, aparece una costra blanquecina, muy habitual en esa zona, que se supone que era el verdadero suelo del surco y que quizás pudiera resplandecer bajo la acción del sol, siendo entonces visible a gran distancia, al modo de un moderno faro.

El investigador Guillermo Illescas lo ha asociado a la Constelación de la Cruz del Sur, conocida también como la Cruz de los navegantes, por indicar a los marinos del Hemisferio Sur la ubicación del Polo Austral por medio de su eje principal que les servirá de guía y orientación en sus viajes. De cada uno de los brazos laterales, arranca su correspondiente poste, paralelo al eje principal, del que equivaldría al eje de la cruz del Sur.

Una señal para piratas

Hay una serie de investigadores que opinan que este geoglifo fue realizado por los piratas que infectaban las rutas comerciales oceánicas de los galeones españoles que llevaban los impuestos y las riquezas de América a la metrópoli durante los siglos XVI y XVII.

Para ellos su función sería la de indicar una ruta hacia un posible gran tesoro. Una teoría similar a esta es la que defiende el francés Robert Charroux que pensaba que era un indicador que señalaba donde se encontraba un fastuoso y legendario tesoro inca.

San Martín

Una teoría señala que fue realizado por José de San Martín (1778-1850), interpretando que se trata de un símbolo de la masonería.

Son muchas las leyendas que circulan acerca de la presunta pertenencia a la masonería de muchos de los grandes personajes que participaron en las distintas guerras de liberación de las colonias americanas respecto de España.

Un símbolo ritual de sacrificios humanos

Otra de las funciones del extraño geoglifo podría ser, como apuntan otros investigadores, un símbolo ritual de sacrificios humanos.

Dicha opinión estaría basada en que el eje principal apunta directamente al rumbo de la isla Blanca y del archipiélago de Las Chinchas, donde se encontraron momias de mujeres jóvenes decapitadas muy posiblemente como sacrificio a los dioses.

Una leyenda fantástica

Un hombre de gran estatura, con barba y larga melena, llega desde el oeste (tal vez Wakea, desde la polinesia), se hace famoso y notable por explicar de manera concisa extraordinarias historias de países lejanos que visitara, a lo largo del tiempo se le conoció como Viracocha. Era un hombre que promulgaba el amor y el bien, y curaba a los enfermos.

Continuó con sus asombrosos relatos, entre ellos la historia de un hombre odiado y perseguido por sus enemigos, siendo crucificado junto a dos compañeros en una colina. Los hombres crucificados llegaron al lugar, cuando estaban agonizando, apareció Viracocha, señaló la horrible injusticia, sus seguidores subieron a la colina y cavaron configurando el candelabro.

Galería de imágenes

Fuentes