Caraísmo
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Caraísmo o Karaísmo: La palabra "Caraíta" deriva del término Hebreo Karaim que significa "Seguidores de la Escritura". Las Escrituras Hebreas contienen el plan maestro del Creador del universo revelado a la Nación de Israel a través de Moisés y los Profetas. El caraísmo es conocido también como el judaísmo caraíta, siendo este grupo religioso, caracterizado por reconocer al Tanaj como única autoridad religiosa para fines de la Halajá y su teología.
Es la secta religiosa que apareció dentro del pueblo judío, representando el rompimiento más importante en la historia del mismo, adquiriendo gran jerarquía también por su número de practicantes.
El Judaísmo Caraíta se basa en la fe original de las Escrituras Hebreas del Antiguo Testamento. Desde su mismo comienzo el papel de Israel ha sido enseñar la voluntad divina, la cual dota a aquéllos que viven por ella con la vida eterna tal como está escrito, ya que el Creador reveló su voluntad a la nación Israelita con la misión de ser una "Luz para las Naciones”.
Sumario
Historia
El caraísmo debe su origen a Anán (m. c. 780 d.C.) y por un tiempo llevó el nombre de ananismo. Según Anán, no solo la Torá sino también los libros de los profetas podían considerarse palabra divina, con lo cual amplió la base para generar la jurisprudencia religiosa de lo que entonces se llamó ananismo. En el siglo IX sus practicantes comenzaron a ser denominados karaim (“los de las escrituras”, en referencia a la lectura exclusiva de la Torá), y varios de los grupos heterodoxos preexistentes se unieron al movimiento.
Los ancestros de los caraítas eran un grupo llamado Benei Ṣedeq, en tiempos del Segundo Templo. Las creencias del caraísmo sobre Dios, están basadas esencialmente en aquellas del judaísmo ortodoxo. Los mismos siempre han mantenido que, a pesar de existir ciertas similitudes con los saduceos, (el rechazo a la autoridad rabínica y tradición oral), también existen entre ellos diferencias considerables. En armonía con su principio de que sólo el texto bíblico es autoritativo, los caraítas han hecho algunas valiosas contribuciones a la gramática y filología bíblica; pero en su búsqueda de hallar en la Biblia una justificación para ciertas creencias, los ha llevado a reivindicar reglas de interpretación tan arbitrarias como muchas del antiguo judaísmo.
Los Caraítas, en ausencia de su Templo, no ofrecen sacrificios ni siquiera los que se pueden ofrecer fuera del mismo. Los creyentes de esta secta religiosa se esmeran en adherirse al más simple significado no necesariamente literal de las escrituras. Como parte de su análisis del mensaje, consideraban otras explicaciones posibles, ya que no estaban dispuestos a basarse solo en las interpretaciones y argumentos de los sabios de Talmud, aunque no descartaban sus decisiones, pero distan de ellos porque en el Talmud, existen numerosos aspectos que quedan sin respuesta.
Doctrinas
Los Judíos Caraítas se guían por una interpretación sencilla (Peshát) de la Biblia Hebrea y de la Ley Mosaica, y rechazan las innovaciones posteriores tales como la Ley Oral Rabínica, el Nuevo Testamento, así como la forma de judaísmo más practicada hoy día, que en sus tres corrientes mayores se guía por el Talmud.
Los caraítas sostienen que todos los mandamientos, o mitzvot (mandamientos), que fueron transmitidos a Moisés por Dios, están descritos en la Torá, sin ninguna explicación o detalles adicionales, a diferencia de las tradiciones orales. Como resultado, los judíos caraítas no aceptan como obligatorias las tradiciones descritas en el Midrash o Talmud, porque creen que "los talmudistas" adulteran el verdadero mensaje de las Escrituras Hebreas agregando las enseñanzas de los Rabinos que se encuentran en el Talmud.
Los Caraítas han aprendido a tener tolerancia con gran variedad de interpretaciones con tal de que se deriven de principios legítimos de análisis bíblico, aunque no comparten algunas costumbres de sus antepasados. Los mismos mantienen que cada ser humano tiene la obligación de estudiar las Escrituras Hebreas y determinar por si mismos el significado correcto de los mandamientos del Omnipotente basándose en su propio razonamiento y entendimiento.
La mujer en el Caraísmo
La información existente en textos legales Caraítas en cuanto a los diferentes papeles de la mujer es normalmente una reacción contra órdenes Rabínicas formuladas contra ellas. Las mujeres en la tradición Caraíta siempre han sido consideradas como iguales. Nunca han sido excluidas de servir en ningún oficio religioso, como tampoco han sido etiquetadas como ciudadanos de segunda-clase.
La Torah hace distinción entre hombres y mujeres en casos muy específicos, que depende de los miswot, ya que algunos corresponden específicamente a hombres, y a mujeres, y esto se debe a que existen leyes que se aplican para cada uno de ellos.
Los roles de la mujer
En la ley Caraíta, ambos testimonios son válidos en cualquier situación legal, por lo tanto el testimonio de la mujer es tan válido como el testimonio del varón. A las mujeres en el Caraísmo nunca se les ha restringido en cuanto a cantar o a hablar en el Santuario. Ellas pueden ostentar la posición de la que dirige las oraciones. Los ritos conyugales pertenecen a la mujer, no al hombre. Si un hombre toma a una segunda esposa, sólo puede hacerlo con el permiso de la primera.
El divorcio y y sus derechos
En la ley de la Torah, una mujer puede reclamar el divorcio. Si un hombre se niega a darle el divorcio a su esposa, la corte legal judía puede ejercer su poder legal y conceder el divorcio en su lugar. Un marido no tiene ningún derecho sobre la propiedad de su esposa a menos que ella se la conceda, por lo tanto la propiedad de una mujer es suya, y sigue siendo suya siempre, además cuando una mujer muere, sus hijos heredan su propiedad, no su marido.
Separación de hombres y mujeres
En las sinagogas Caraítas (Beit HaKenesset) se encuentran lugares donde tienen espacios para los hombres y las mujeres; sin embargo la razón de esto no está estrictamente basada en el género. Como en las mezquitas musulmanas, los Caraítas hacen muchas de sus oraciones reclinados en el suelo. Cuando las mujeres se arrodillan, se ponen en riesgo de exponerse a los hombres que estén arrodillándose detrás de ellas. Este detalle hace que marque la ubicación de ellos para con ellas, y eso se debe a que es una tradición que está basada en la modestia, en lugar de en la exclusión de las mujeres.
Costumbres
El mundo judío tiene como eje primordial a La Torá, que es el núcleo de la religión judía, entregada por escrito en dos tablas a Moisés, conocida como La Torá Escrita. Los mismos consideran que todo el mensaje está recogido y planteado en la Tora escrita, sin necesidad de las ampliaciones de la Torá Oral, que se compiló años después.
En sus sinagogas, lugar sagrado para sus rezos, no hay ni sillas ni mesas. Se reza descalzo porque así lo hizo Moisés ante la Zarza que no se consumía. No encienden velas en Shabat. No usan tfilin de ninguna manera. Cuentan la Cuenta del Omer de manera distinta. El judaísmo para ellos se transmite por vía paterna, no materna.
Karaísmo en la Actualidad
Para los Caraítas la historia humana de la era actual es considerada como el periodo del "Gran Exilio". Que nos es más que la era descrita por Las Escrituras Hebreas, donde se predice que la Nación de Israel abandonará el verdadero camino del Creador por la religión de fabricación humana. En las escrituras, los encargados de trasmitir el mensaje, los profetas enseñan que esta era acabará con el retorno de Israel al Creador bajo el liderazgo del ungido Rey de la Casa de David y con adopción de la religión de las Escrituras Hebreas por toda la raza humana.
Esta era del Gran Exilio, se muestra con la sucesión de la profecía mientras el Omnipotente "oculta Su rostro" a causa de los pecados de Israel, pero está escrito que el único camino al conocimiento del Divino es a través de las Escrituras Hebreas, las cuales contienen la completa y perfecta instrucción de la voluntad divina revelada a los profetas de Israel. Viviendo de acuerdo con la instrucción divina, los hombres, los judío, pueden salvarse del pecado, tal como está escrito, y esto se debe a que Dios premió a la humanidad con Su perfecto conocimiento demostrando su inmenso amor y su misericordia, tal como está escrito: "¿Acaso me complazco yo en la muerte del impío -- declara el Señor DIOS -- y no en que se aparte de sus caminos y viva? " (Ezequiel 18:23).
