Carlos Paéz Vilaró

Carlos Páez Vilaró
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Datos personales
Nombre completoCarlos Páez Vilaró
Nacimiento1 de noviembre de 1923
Montevideo, Uruguay
Fallecimiento24 de febrero de 2014
Punta Ballena, Uruguay Bandera de Uruguay Uruguay
NacionalidadUruguaya
OcupaciónPintor, ceramista, escultor, muralista, escritor, compositor, constructor, director
ParejaMadelón Rodríguez Gómez (1953-1973),Verónica Algorta (1973-1978),Annette Deussen (1989-2014)
HijosCarlos Miguel, Mercedes, Agó, Sebastián, Florencio y Alejandro
Premios
* Premio.
  • Premio.

Carlos Páez Vilaró.Fue un pintor, ceramista, escultor, muralista, escritor, compositor y constructor uruguayo.

Síntesis biográfica

Hijo de Doña Rosa Vilaró Braga y del Dr. Miguel Ángel Páez Formoso. Fue el menor de tres hermanos, siguiendo a Miguel y a Jorge.

Al ser autodidacta, investigó a profundidad las culturas más diversas para hallar la raíz de su inspiración. Fue así como pintando y escribiendo, recorrió el mundo montando sus talleres en los sitios más diversos.

El contacto permanente con las actividades desarrolladas por sus padres entre libros, arte, arquitectura, decoración o las creaciones más diversas, se integraron naturalmente al proceso de su niñez.

Viajó a Argentina

Marcado por una fuerte vocación artística partió en su juventud a Buenos Aires, donde se vinculó al medio de las artes gráficas y conoció a los más destacados dibujantes de la época. Atrapado por la magia de la noche porteña, Buenos Aires provocó sus primeros balbuceos en el arte.

Tomó como fuentes de inspiración el tango, los bares y cabarets, donde solía dibujar a la noche en sus mesas. Estos temas marcaron a fuego la iniciación de su carrera de artista y nunca dejaron de aparecer en los distintos períodos de su prolífica obra.

Regreso a Montevideo

A los 20 años regresó a Montevideo donde, impactado por comparsas de los barrios Sur y Palermo, y por el conventillo Mediomundo donde se estableció, se vinculó a la comunidad afrouruguaya y comenzó a colaborar en la preparación del desfile de llamadas, interiorizándose en el folclore afrodescendiente.

A partir de este acercamiento realizó varias obras pictóricas mostrando distintos aspectos de la cultura y de la vida cotidiana del afrouruguayo: llamadas, bailes, religiosidad, casamientos, nacimientos, velorios, etc.

Se entregó totalmente al tema, pintando cientos de obras, componiendo candombes para las comparsas, dirigiendo coros, decorando sus tambores o actuando como incentivador de un folklore que en ese momento luchaba por imponerse contra la incomprensión.

Viaja diferentes Países

Agotado el tema, fue inevitable su partida hacia Brasil. Allí iniciaría un largo viaje a través de varios países donde la negritud tenía fuerte presencia como Senegal, Liberia, Congo, Camerún y Nigeria. En ellos realizó numerosas pinturas y murales en adhesión a la lucha que los africanos comenzaban hacia la liberación de su continente.

Grupo de los 8

Formó parte del Grupo de los 8, agrupación de artistas plásticos uruguayos que surgió en 1958, integrada también por Oscar García Reino, Miguel Ángel Pareja, Raúl Pavlovsky, Lincoln Presno, Américo Sposito, Alfredo Testoni y Julio Verdie, quienes sumaron fuerzas para incentivar el arte del momento en sus vertientes más experimentales.

En la década del 50 conoció a Picasso, Dalí, De Chirico y Calder en sus talleres. Ese peregrinaje europeo inicial, el contacto con la pintura, los museos y los artistas, le dieron el impulso que necesitaba para un regreso a su país con entusiasmo.

Entre ellos, Pablo Picasso lo deslumbró al invitarlo a pasar revista de su obra, en su residencia-taller de “Villa California” en los Alpes Marítimos.


En 1960 expusieron junto a artistas como Willem De Kooning, Roger Hilton y Lucio Fontana en la gran exposición internacional del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, invitados por su creador y director, el crítico y poeta Rafael Squirru.

El tiempo y la atención que le brindó, iban a quedar grabados para siempre en su memoria, como uno de los episodios más remarcables y emocionantes de su vida, provocando además su incursión en el mundo de la cerámica.

Ese mismo año, Jean Cassou, Director del Museo de Arte Moderno de París, lo animó a presentar su obra en la Maison de l’Amérique Latine. Su repercusión hizo que pasara luego a ser exhibida en Inglaterra y en los Estados Unidos. Fiel a su espíritu de investigador, recorrió numerosas islas de los Mares del Sur pintando, escribiendo y filmando.

Matrimonios

Se casó en 1955 con Madelón Rodríguez Gómez y se divorció en 1961. Con ella tuvo tres hijos: Carlos Miguel, Mercedes y Agó. En 1989 se casó con Annette Deussen, y tuvieron tres hijos: Sebastián, Florencio y Alejandro.

Proyecto Casapueblo

En 1958 empezó a construir Casapueblo la denominada por él mismo como una «escultura habitable» ubicada en Punta Ballena a 13 Km de Punta del Este.

Con el tiempo además de su hogar, el lugar se convirtió en taller y posteriormente también en museo y hotel, siendo uno de los atractivos turísticos del departamento de Maldonado en Uruguay.

Según el propio Páez Vilaró "La construí como si se tratara de una escultura habitable, sin planos, sobre todo a instancias de mi entusiasmo. Cuando la municipalidad me pidió hace poco los planos que no tenía, un arquitecto amigo tuvo que pasarse un mes estudiando la forma de descifrarla.

Festival de Cine de Cannes

En 1967 cerró el Festival de Cine de Cannes con un filme documental sobre aquella peripecias titulado Batouk. Antes, en 1960, había pintado en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Washington el mural Raíces de la paz, considerado entonces el más largo del mundo por sus 162 metros.

Como guionista de Cine

Además de la pintura incursionó en el cine en 1967, como coguionista de la película Batouk, dirigida por Jean-Jacques Manigot, largometraje de 35 mm en color de 65 minutos de duración. Los coguionistas fueron Aimé Césaire y Leopold Sedar Senghor que aportaron poemas. La película participó del Festival de Cannes de 1967.10​

También existen referencias a una película experimental titulada Une Pulsation, basada en una secuencia de imágenes tomadas por Carlos Páez Vilaró durante un viaje alrededor del mundo con su amigo Gérard Leclery, la película realizada en París incluía música de Astor Piazzolla.

Según los autores del libro Le Grand Tango: The life and Music of Astor Piazzolla luego de la realización de dicha película, Piazzolla le hizo llegar a Páez Vilaró un casete con una nota adjunta "Gracias por la libertad que me has dado, me siento como un nuevo Piazzolla".

Historia sobre su Hijo

El 13 de octubre de 1972 se vio vinculado a una historia muy alejada del arte. El avión en el que viajaba su hijo Carlos Miguel desapareció en la Cordillera de los Andes que integraba el equipo de Rugby Old Christians, durante los 72 días que duró su desaparición fue uno de los líderes en la búsqueda de sobrevivientes. De dicha experiencia surge su libro Entre mi hijo y yo, la Luna. Luego de setenta días de dolorosos rastreos tuvo la alegría de recuperarlo vivo en vísperas de la Navidad.

En retribución a la solidaridad recibida por el pueblo chileno, pintó un mural en el hospital de Santiago, sumando así una obra más a su campaña del color para el dolor, que lo llevó a lo largo de su vida a poner alegría en los hospitales a través de sus pinturas.

En Nueva York

Años más tarde se radicó en Nueva York, instalando su atelier en un pent-house de la Quinta Avenida. Inspirado por la vida y el color de los supermercados, realizó en Manhattan, una serie de obras y collages en los que utilizó cajas y todo tipo de materiales encontrados en la vía pública. Su entusiasmo por el patín sobre ruedas hizo que dedicara la mayor parte de sus cuadros de Nueva York a ese tema.

A partir del año 1970, vivió alternadamente en Estados Unidos, Brasil y Uruguay. En San Pablo fundó el Taller de Artesanos, trabajó en tapicerías y diseñó el Club de Polo Helvetia. El ritmo de vida paulista y la cordialidad con la que fue recibido, hicieron que creara fuertes lazos de amistad y se sintiera estimulado a realizar fabulosas series de pinturas, que quedaron en colecciones particulares.

Luego instaló su taller en Buenos Aires, donde vivió catorce años. Durante este lapso canalizó su inagotable capacidad creativa en esculturas, ediciones literarias, y múltiples series de pinturas, en las que expresó su búsqueda constante a través de las formas y el color.

Fue así que en una antigua casa de madera en la región de Tigre, su atelier argentino se fue convirtiendo en una prolongación de su estudio en Uruguay.

Como Arquitecto

Sin ser arquitecto, en ese período construyó su casa y al mismo tiempo una capilla multicultos en la timonera de un cementerio, tomando el trabajo con concepto de escultura y actuando con total libertad. También se dedicó a la cerámica, la escultura, la música y las letras.

Fue pionero en integrar la pintura tanto a objetos de la vida cotidiana como a aviones, patrulleros, colectivos y barcos. Tal es el caso del velero- escuela “Capitán Miranda”, que lleva el sol de Páez Vilaró en sus velas.

“Pintor del medio del río”, como solía autodenominarse, lo confirmó en 1997 al dividir su actividad entre sus dos talleres de Argentina y Uruguay. De esta forma dedicó la nueva etapa a cumplir con múltiples compromisos internacionales, realizando exposiciones retrospectivas en la Biblioteca Nacional de Beijing; en el Opera House de El Cairo y en el Palacio de la Creatividad en Alejandría, invitado por los gobiernos de China y Egipto.

Muerte

Falleció el 24 de febrero de 2014 en su Casapueblo,donde vivía y trabajaba.

El pasado 7 de febrero se despidió de su tambor, instrumento estrechamente ligado al carnaval, en un artículo publicado por el diario local El País en el que decía: (es) “un final que nunca quise aceptar, pero que la vida nos obliga a cumplir”.

Libros

  • 1981 Mis cuentos de siete vidas
  • 1982 Entre mi hijo y yo, la luna
  • 1996 Albert Schweitzer en el reino de los Galoas
  • 1998 Arca bichos
  • 1998 Arca bichos
  • 2012 Posdata

Premio

En 2003, fue nombrado “ciudadano ilustre de Montevideo” y en 2005 recibió en Buenos Aires el premio como “artista de las dos orillas”.

Fuentes