Cristo en el huerto de los Olivos

Cristo en el huerto de los Olivos
Información sobre la plantilla
Cristo en el huerto de los Olivos Andrea Mantegna.jpg
Datos Generales
Autor(es):Andrea Mantegna
Año:1460
País:Francia
Datos de la Pintura o dibujo
Estilo pictórico:Renacimiento Italiano
Técnica:Óleo sobre lienzo
Localización:Galeria Nacional de Londres

Cristo en el huerto de los Olivos. Óleo sobre tabla en el estilo del Renacimiento Italiano. Varios pintores famosos tambien utilizaron este relato biblico para plasmarlo sobre lienzo.

Ubicación

Se encuentra en la Galeria Nacional de Londres.

La obra

Este cuadro forma parte de la llamada "fase Bellini" de Andrea Mantegna. Este artista había entrado en contacto con Giovanni Bellini, el pintor veneciano, con cuya hermana se había casado. El estilo más cálido y decorativo del Giambellino se infiltró en la fría solidez de Mantegna y dio como fruto cuadros como éste o como el Cristo Muerto.

La construcción de la escena, sin embargo, mantiene la solidez de carácter arquitectónico, con figuras rotundas como enormes esculturas. La escena está dividida en tres planos: el primero, donde se encuentran los apóstoles dormidos, Jesús y los ángeles. El segundo, que es el camino por donde se ve venir a Judas con los soldados. Y el fondo, con una preciosa ciudad amurallada al pie de una montaña rocosa. La relación entre los tres planos es algo torpe y pareciera que los planos medio y final sirven de telón a la escena principal, como la organización de un escenario de teatro.

Transmite

La imagen está repleta de pequeños detalles que parecen anécdotas: los conejitos en el camino, las garzas en el río, el ibis en la rama del árbol... incluso en la ciudad el espectador puede perder su vista encontrando pequeñas alusiones a la historia sagrada, como por ejemplo la columna con el toro en la cima, el símbolo de la idolatría.

Mantegna además hace uso de la perspectiva geométrica con profusión: esta técnica de construcción del espacio fue desarrollada por los pintores de la época, el Quattrocento, puesto que facilitaba la elaboración de fondos figurativos en sustitución de los tradicionales fondos dorados del Gótico. Por otro lado, para proyectar correctamente una perspectiva geométrica eran necesarios ciertos conocimientos de geometría y matemáticas, lo que respondía al deseo de los pintores de abandonar el anonimato de los artesanos para ascender a la categoría de las artes liberales, propias de aristócratas e intelectuales.

Fuentes