Cuenca parisiana
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Cuenca Parisiana. Región geográfica del norte y el centro de Francia que corresponde en esencia a la llanura que circunda la ciudad de París. Limita al oeste con el macizo Armoricano, al norte con el canal de la Mancha, al este con los Vosgos y las Ardenas y al sur con el macizo Central. Avenada por el río Sena, se trata de una cubeta sedimentaria cuyos rebordes están formados por colinas al oeste (como las de Maine y del Perche) y cuestas al este. El umbral de Poitou marca la línea de contacto al suroeste con la cuenca aquitana.
Historia
El área se corresponde con la región histórica de Île-de-France, que ha variado su significado desde la época merovingia, en la que este topónimo designaba tan sólo al pequeño distrito que rodeaba París, hasta englobar la nación entera. Al margen de las divisiones administrativas, siempre cambiantes desde finales de la edad media, la cuenca parisina es en la actualidad la zona más densamente poblada de Francia. Ha servido como polo de atracción a un gran número de inmigrantes llegados desde todos los lugares del país, lo que a supuesto que su población se haya cuadruplicado desde mediados del siglo XIX hasta alcanzar los once millones de personas con que contaba al finalizar el siglo XX.
Localización
Se pueden distinguir varias conjuntos: al norte y al noroeste se extienden las mesetas de Picardía y Normandía. Al este, se encuentran los denominados ‘pays de côtes’: Champaña, Lorena y el norte de Borgoña. Al sur, se extiende la meseta la Beauce, que se abre hacia el valle del Loira. En el centro se halla la meseta central de la Île-de-France, que se prolonga por Brie, Hurepoix, Vexin y Valois. Dos grandes cuencas hidrográficas dividen la cuenca parisina en dos: la del Loira y sus afluentes (Loir, Cher, Indre, Vienne) al sur, y la del Sena y sus afluentes (Eure, Loing, Yonne, Aube, Marne, Aisne y Oise) al centro y al norte.
Suelo
El subsuelo de la cuenca parisina alberga yacimientos de petróleo. La fachada litoral, abierta hacia el canal de la Mancha, acoge al primer puerto francés, El Havre. Las grandes llanuras y mesetas del centro de la cuenca están dedicadas al cultivo de cereales, actividad altamente mecanizada y realizada en explotaciones de gran tamaño, conocidas como campos abiertos (openfields). Pese a que cereales y oleaginosas son predominantes, se han desarrollado otros tipos de cultivos, como la remolacha azucarera y la patata, sobre todo en el norte. En la periferia, en zonas como Puisaye, Turena y Normandía, la cría de ganado está asociada a la agricultura. La explotación de hortalizas y frutales también ha conocido un importante desarrollo, sobre todo en los valles del Sena y del Loira, así como en el Hurepoix. En cuanto a los viñedos, ocupan las comarcas del este (Champaña) y del Val-de-Loire, aunque también presentes en Sancerrois y en Borgoña.
Importancia
La cuenca parisina constituye una de primeras regiones económicas de Europa y una de las principales zonas de inversión extranjera en Francia y en Europa. La región cuenta con el primer centro de asuntos europeos, uno de los principales complejos aeroportuairios europeos, dos puertos marítimos de importancia continental (El Havre y Ruan), los más occidentales del Canal de la Mancha, y dos valles: el del Sena y el del Loira. Sin embargo, la cuenca parisina resta poco densa y se sitúa ligeramente a distancia de las grandes rutas de comercio y del espacio humanamente muy denso constituido por la Renania alemana, los Países Bajos, Bélgica y el sudeste de Inglaterra (la megalópolis europea). Por su parte, la industria, muy importante y diversificada (con plantas de alta tecnología y centros de investigación), se distribuye principalmente en la aglomeración parisina, el valle del Oise y el curso bajo del río Sena. De hecho, la región constituye el primer conjunto industrial de Francia. La presencia de la capital y su aglomeración urbana han hecho de la cuenca parisina la región mejor equipada en cuanto a redes de transporte, oleoductos y gasoductos, aeropuertos e incluso centros de enseñanza superior.
