Desierto de Farafra

Desierto de Farafra
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Países Bandera de Egipto Egipto

Desierto de Farafra o Desierto Blanco de Farafra. Es uno de los misterios de Egipto que hay que descubrir por sus características piedras calizas, de belleza indescriptible, un territorio lleno de dunas y arena de color blanco. La erosión ha ido limando asperezas en las rocas, provocando de esta manera unas esculturas naturales dignas del mejor de los artistas.

Historia

El origen de este desierto se remonta a los inicios del Paleógeno, aproximadamente hace unos sesenta millones de años, cuando esta zona integraba el lecho de un mar de escasa profundidad que cubría la vasta capa de roca arenisca que se extendía sobre la actual región de Nubia. Durante los siguientes treinta millones de años, se acumularon en el lecho marino depósitos de yeso y rocas sedimentarias de piedra caliza conformando un estrato que alcanzaba los trescientos metros de profundidad. Posteriormente, las formaciones de casquetes de hielo hicieron retroceder las aguas del Océano Atlántico, provocando la desaparición de este antiguo mar. El viento erosionó durante millones de años los yermos páramos del lecho del antiguo mar. Aún hoy en día pueden encontrarse en la zona numerosos yacimientos marinos en las capas de piedra caliza, como fósiles de moluscos, crustáceos, peces o vestigios coralinos petrificados.

Área natural protegida

Fue declarado parque nacional y área natural protegida por el gobierno egipcio en el año 2002, un lugar que integra el hábitat del Halcón opaco o del fénec, abarcando una superficie de casi cuatro mil kilómetros cuadrados de desierto atípico, donde sus extensas llanuras se encuentran salpicadas de caprichosas formaciones que recuerdan a las siluetas de los hongos y sustituyen a la clásica imagen de las ondulantes dunas de arena que se pierden en el horizonte. Se muestra majestuoso bajo la luz del ocaso, cuando el sol torna el blanco tiza de las rocas en tonos púrpura y anaranjados, simulando un paisaje ajeno a este planeta, así como sus noches de luna llena, donde sus tonos blanco azulados evocan un paisaje del Ártico, lo cual le ha ganado el sobrenombre del "desierto de hielo" entre los oriundos de la región.

Geografía

Localización

El Desierto de Farafra, conocido como el Desierto Blanco se encuentra en la frontera oriental del Sahara, en Egipto, situado a unos 45 km al norte de la ciudad de Farafra, al oeste del país y a 450 km al sur-oeste de El Cairo. Es una vasta extensión de tierra en el Desierto Occidental entre Bahariya y el Oasis de Farafra.

Clima

El clima es muy variado, por el día con el sol es asfixiante la calor, llegando en la noche bajo la luz de la luna a cambiar grandemente hasta hacer una temperatura super fría.

Flora y fauna

La zona no está habitada, tan sólo es accesible mediante autos todoterreno o camello, tan sólo algunas tribus de beduinos lo cruzan, apenas un pequeño porcentaje de los 5000 habitantes que tiene la región.

Se pueden encontrar algunos zorros nocturnos que viven en pequeñas cuevas o madrigueras y el Halcón Opaco.

Fuentes