El tiempo y las viejas

El tiempo y las viejas
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Datos Generales
Autor(es):Francisco de Goya
Año:1792
Técnica:Pintura al Öleo
Localización:Palacio de Bellas Artes de Lille


El tiempo y las viejas. Cuadro de Francisco de Goya conservado en el Palacio de Bellas Artes de Lille, Francia.

Historia

Es probable que esta obra formara parte de un grupo concebido por Goya como conjunto, formado por Maja y celestina en el balcón y Majas en el balcón. Esta posible serie pertenecía a Goya, y todas aparecen en el inventario de 1812, de modo que parece lógico que las hubiese hecho para sí mismo, sin contar con el mecenazgo de nadie.

Desde 1812 hasta 1836 estuvo en la colección de Javier Goya, en Madrid. Fue adquirido por el barón Taylor, junto con seis obras más, para la Galerie Espagnole del rey Louis-Philippe d'Orleans en París. Perteneció a esta institución hasta 1848. Tenía el número de inventario 24 pero nunca se expuso. En 1853 se subastó en la casa Christie's y pasó a una colección de Londres hasta que se volvió a vender, siendo adquirido esta vez por el Sr. Durlacher para su colección de París. Después perteneció al Sr. Warneck, París, y más tarde a la Srta. Genil, al Sr. Reynart y al Sr. Sauvage, quienes en 1874 lo donaron al museo de Lille.

Descripción

La protagonista de la escena es una vieja decrépita, de cuerpo flaco y consumido, como si fuera un esqueleto. Se sienta en compañía de otra vieja con aspecto de celestina, y sostiene entre sus manos un pequeño medallón que probablemente conserva la imagen de ella misma cuando era joven y bella. Otra posibilidad es que contemple la efigie de su añorado amado, ya lejano. La vieja aparece enjoyada con todo tipo de ornamentos para el pelo, pendientes y pulseras, haciendo gala de la vida acomodada que un día tuvo, mientras se sienta sobre su actual y pobre silla de esparto. Su vestido blanco de gasa, a la moda afrancesada de tiempos atrás, tiene detalles florales en azul celeste, y sin duda sería más apropiado para una jovencita. Su amiga, más discreta, lleva un traje negro con mantilla. La acompañante, servidora fiel durante toda su vida, le acerca un espejo en donde refleja su ajado rostro, triste y melancólico. La comparación de la efigie del medallón con la que ve reflejada en el espejo le produce una tremenda desazón. Detrás del espejo, Goya ha escrito Qué tal?, pregunta que la vieja no escucha, sumida en el recuerdo de su belleza marchita. Detrás de las mujeres aparece imponente la figura de Cronos, el auténtico protagonista de la composición, encarnado en un fuerte hombre con alas, de barba y pelo blancos. Sujeta una escoba con la que va a barrer a la vieja, pues ya ha llegado la hora de su muerte.

Por el pasador de pelo en forma de flecha que adorna el teñido cabello rubio de la vieja, símbolo de Cupido y del amor vivido antaño, se ha querido identificar en ocasiones a la vieja con la reina María Luisa, pues lleva una horquilla muy parecida en el retrato de La familia de Carlos IV. Sin embargo, la indumentaria y el afán de querer parecer más joven resultaban más propios de la infanta María Josefa de Borbón, ya convertida en una anciana en el retrato colectivo de la familia.

Sobre el autor

Francisco de Goya. Pintor y grabador español considerado uno de los grandes maestros de la pintura. Marcado por la obra de Diego Velázquez, habría de influir, a su vez, en Édouard Manet, Pablo Ruiz Picasso y gran parte de la pintura contemporánea. Formado en un ambiente artístico rococó, evolucionó hacia un estilo personal y pintó cuadros que, como el famoso El 3 de mayo de 1808 en Madrid: los fusilamientos en la montaña del Príncipe Pío (1814, Museo del Prado, Madrid), se cuentan entre las grandes obras maestras de la historia del arte. La más completa colección del artista se encuentra en el Museo del Prado, que atesora cerca de 150 pinturas y 500 dibujos de su mano, además de sus series de grabados.

Fuentes