Estación Polar Cebra (película)
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Estación Polar Cebra. Película estadounidense de 1968 dirigida por John Sturges. La cual fue protagonizada por Rock Hudson que interviene en un drama bélico como el Comandante James Feraday.
Sinopsis
Un agente de inteligencia norteamericano y un espía, deben desplazarse de forma urgente, a la estación polar científica “Cebra” a bordo de un submarino nuclear. El buque tiene como misión rescatar a los científicos, tras la emisión de señales de socorro, pero el verdadero motivo del viaje sólo lo conoce el espía, y no es su intención revelarlo a nadie a bordo del submarino.
Argumento
El Comandante James Feraday, Rock Hudson, de la USN, tiene nuevas órdenes por parte de sus superiores: ha de hacerse con la ayuda de David Jones, Patrick McGoohan, un civil británico, el Capitán Anders, Jim Brown, un infante de marina resistente con un pelotón de soldados, Boris Vaslov, Ernest Borgnine un ruso amable, y la tripulación del submarino nuclear USS Tigerfish al Polo Norte para rescatar a la tripulación del Drift Ice Station Zebra, una estación meteorológica en la cima del mundo. La misión adquiere nuevos y peligrosos giros cuando la tripulación descubre que no todo es como parece a Zebra, y que hay quien no se detendrá ante nada para evitar que la misión sea completada.
Reparto
Sobre la película
- Un film basado en la novela homónima de Alistair MacLean (1963), famoso autor escocés de superventas de libros de acción como ("Los cañones de Navarone"), fue dirigida por John Sturges y rodada casi toda en estudio y en alta mar.
- Obtuvo dos nominaciones a los Oscar 1968 (Eefectos especiales visuales y Fotografía). Excelente film que rememora, sin duda alguna, la guerra fría y hasta donde pueden llegar los intereses por poseer información sensible.
- Contó con la intervención del submarino norteamericano (“USS Ronquil”) (SS-396), que en 1971 fue transferido a la Armada Española, con el nombre de (“Isaac Peral”) (S-32), hasta que fue dado de baja en el año 1984.
- Magnífica fotografía y banda sonora. Impresiona ver sumergirse y emerger al “Ronquil” al compás de la música. Imperdible para los nostálgicos.
