Francisco Camilo

Francisco Camilo
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Datos personales
Nombre completoFrancisco Camilo
Nacimiento1615
Madrid, Bandera de España España
Fallecimiento1671
Madrid, Bandera de España España
OcupaciónPintor
Datos artísticos
ÁreaPintura
MovimientoBarroco
Artistas relacionadosPedro de las Cuevas

Francisco Camilo. Pintor español. Hijo de Domenico Camilo, pintor florentino que participó en la decoración del monasterio de El Escorial.

Trayectoria profesional

A la muerte de su padre, su madre se casó en segundas nupcias con el pintor madrileño Pedro de las Cuevas, con quien el joven Camilo aprendió el arte de la pintura.

En la órbita cortesana realizó cuadros de los reyes de España para la decoración del salón de comedias del Alcázar de Madrid. En el mismo palacio participó a partir de 1641 en la decoración al fresco de la galería de poniente sobre las fábulas de Ovidio. De este trabajo, destruido, que realizó junto a Julio César Semini, ha quedado principalmente la impresión que causó en el rey Felipe IV, que criticó el aire de composición religiosa del conjunto.

En Madrid trabajó para distintos conventos, como el de San Felipe el Real, para el que crearía obras como San Joaquín y la Virgen niña o San José con el Niño dormido, ambos en el Museo de Huesca. A su mano se debieron obras tan populares como la representación de la Virgen de Belén que se exponía en la iglesia de San Juan de Dios, en el madrileño convento de Antón Martín, obra venerada y copiada hasta la saciedad. También participó en la serie de cuadros antijudaizantes de maltratos al Crucifijo para el convento madrileño de los capuchinos de la Paciencia, buen ejemplo de su dominio compositivo en el desarrollo de estas escenas de interiores.

Dentro de la provincia de Madrid, realizó algunas obras para la cartuja de El Paular, hoy en el Museo del Prado, para el convento de capuchinos de El Pardo, o para la iglesia de la localidad madrileña de Santorcaz.

Su actividad artística se extendió más allá del círculo de la Villa y Corte. Así encontramos sus obras producidas para distintas instituciones de la ciudad de Salamanca, como la casa profesa de la Compañía de Jesús, o la iglesia del convento de Clérigos menores (Ciudad Rodrigo, Salamanca). Su producción para ciudades como Toledo y Segovia fue elevada; entre ellas se encuentran las obras de 1662 para el santuario de la Fuencisla, en la ciudad castellano-leonesa, muy apreciadas en su época.

Su obra fue muy abundante, dada su precocidad, aunque de desigual calidad. Estilísticamente se inclina hacia los postulados artísticos procedentes del ámbito italiano y muestra una tendencia a crear composiciones de complicadas agrupaciones de figuras, insertas en grandes espacios, propiciados por el uso de formatos de gran tamaño. En sus obras predomina el colorido de gamas azuladas por encima de la inquietud tenebrista que caracteriza al panorama artístico de su época. Deposita el acento de sus composiciones en el agitado movimiento de sus escenas, que crean una sensación de barroquismo apasionado.

Colaboró con escultores de renombre policromando sus estatuas, por ejemplo, el Cristo del Perdón para el desaparecido convento del Rosario de Madrid, obra de Manuel Pereira.

El elevado número de sus pinturas que conserva el Museo del Prado da idea de lo extenso de su producción, entre la que cabe destacar la Sagrada Familia o la Trinidad en la tierra, iconografía de gran éxito en época inmediatamente posterior. Igualmente dignos de mención son los cuadros procedentes del madrileño convento de los carmelitas descalzos, con escenas como El martirio de san Bartolomé o San Jerónimo azotado por los ángeles.


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