Francisco del Plano
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Francisco del Plano Destacado pintor y decorador, natural de Aragón, activo en su tierra natal y en Navarra y el País Vasco.
Síntesis biográfica
Procedente de una familia de artistas; su padre, Ambrosio del Plano, fue pintor y dorador, y su abuelo materno, Juan García de la Cueva, también lo fue. Se debió de formar profesionalmente en el ámbito familiar, y la actividad de su primera etapa profesional fue la de dorador, ocupando cargos en la Cofradía de San Lucas, de doradores, de Zaragoza. En 1679 casó con Antonia Canfranc y Peralta, de la que tuvo 8 hijos, entre ellos Valero, que será procurador de la Real Audiencia de Aragón; Felipe, que será pintor; y Antonio, que será dorador; éstos colaboraran en muchas de las obras contratadas por su padre.
Es en torno a 1700 cuando debió de comenzar sus realizaciones pictóricas; destacó en sus decoraciones al fresco y al temple, en las que, según Palomino, igualaba a los grandes quadraturistas boloñeses Colonna y Mitelli; también pintó al óleo con un estilo un tanto monumentalista, predominio del dibujo, y ciertas pervivencias claroscuristas, pero matizadas; por último, fue proyectista de arquitecturas provisionales o efímeras, y dibujante solicitado. En cuanto a su producción es variadísima, aunque, lamentablemente, buena parte de ella se haya perdido.
En 1704, Francisco del Plano trabaja en Teruel, realizando las pinturas de los bastidores del monumento de Semana Santa de la catedral, y buena parte de los frescos del convento de las clarisas, obras desaparecidas. En Zaragoza tuvo su casa y su taller instalado en la calle del Carmen. En 1716, el cabildo metropolitano le encargó el diseño de la portada de la capilla de San Lorenzo del templo del Pilar, contratando en 1718 el fresco de la cúpula y los grandes lienzos murales que ornan dicha capilla. Ese mismo año diseñó y ornó con pinturas un gran arco triunfal colocado en la calle del Pilar con motivo de las fiestas que Zaragoza celebró para conmemorar la traslación del Santísimo al nuevo templo del Pilar.
En 1723 pintó al fresco en el testero de la iglesia de Santiago de Zaragoza (desaparecida) la batalla de Clavijo, así como unas tribunas fingidas en los lunetos del coro y otros ornamentos varios, para los que contó con la colaboración de sus hijos, Felipe y Antonio. En 1725 realizó unos bastidores pintados para la parte posterior del retablo mayor de la iglesia de San Gil de Zaragoza, obra también desaparecida. Por esas fechas, en colaboración con el pintor Miguel Lorieri, realizaron los dos grandes lienzos que hay en la capilla de San Agustín de La Seo de Zaragoza.
Hacia 1730 habría que situar las pinturas al temple, perdidas en 1809, para la antesacristía o sacristía de la iglesia de Nuestra Señora del Portillo, de Zaragoza. Otras obras más se podrían añadir al buen hacer de Francisco del Plano a lo largo de su dilatada vida profesional, que terminó con la muerte en su casa zaragozana.
Bibliografía
Ansón Navarro, A.: «La pintura aragonesa del siglo XVIII anterior a Goya»; en Atlas de Arte Aragonés, Institución «Fernando el Católico», (C.S.I.C.), 1980. Arco, R. del: «La pintura en Aragón en el siglo XVII»; S.A.A., núm. VI, 1954, pp. 73-74. Ceán Bermúdez, A.: Diccionario histórico de los más ilustres profesores de las Bellas Artes en España; Madrid, 1800, t. IV, p. 103. Viñaza, conde de la: Adiciones al Diccionario Histórico de Ceán Bermúdez; Madrid, 1894, t. III.
Fuentes
- Artículo sobre Francisco del Plano publicado en la Gran Enciclopedia Aragonesa. Consultado el 20 de Mayo 2019. (Creative Commons|Licencia Creative Commons)
