Itzamná

Itzamná
Información sobre la plantilla
Itzamna.jpg
Religión o MitologíaMitología Maya

Itzamná. Dios de la Sabiduría, inventor de las ciencias y conocimientos. Es una viva representación del padre que está en secreto, del real ser que cada uno lleva en su interior, dios como padre es sabiduría y como madre es amor, hijo de Hunab Ku se destacaba a la cabeza del panteón maya.

Iconografía

Aparece representado como un viejo de mandíbulas sin dientes y carrillos hundidos. Su nombre tiene dos jeroglíficos, el primero, que puede ser una representación convencional de su cabeza, y el segundo que contiene como elemento principal el signo del día Ahau. Este signo de día, significaba "rey, emperador, monarca, príncipe o gran señor"; de manera que el segundo de los jeroglíficos del nombre de Itzamná declara su posición como jefe del panteón maya. Nunca se ve asociado su nombre con la destrucción o desastre; y nunca aparece en los códices acompañado de los símbolos de la muerte.

Mitología

Hace mucho, pero mucho tiempo, el señor Itzamná decidió crear una tierra que fuera tan hermosa que todo aquél que la conociera quisiera vivir allí, enamorado de su belleza. Entonces creó El Mayab, la tierra de los elegidos, y sembró en ella las más bellas flores (símbolo de las virtudes que se obtienen cuando eliminamos defectos) que adornaran los caminos, creó enormes cenotes cuyas aguas cristalinas (representación de las aguas creadoras, de la fuerza sexual que sabiamente trabajada nos conduce al triunfo, a la luz) reflejaran la luz del sol y también profundas cavernas llenas de misterio (alegoría del inframundo o mundos infiernos, destino final de todo aquel que no elimine sus Yoes).

Después, Itzamná le entregó la nueva tierra a los mayas (El Paraíso o tierra prometida) y escogió tres animales para que vivieran por siempre en El Mayab y quien pensara en ellos lo recordara de inmediato.

Los elegidos por Itzamná fueron el faisán, (símbolo del Espíritu, del Padre que está en secreto) el venado (representación maravillosa del hijo que sólo sigue los consejos del Padre) y la serpiente de cascabel (alegoría sublime de la Madre, la fuerza femenina, que el hijo debe utilizar sabiamente para recuperar la tierra prometida).

Los sabios mayas vivieron felices en esa tierra y se encargaron de construir palacios (representación de la Piedra Filosofal ya pulida, la catedral del alma que debemos construir) y ciudades de piedra (alegoría del Sexo, del trabajo con la piedra: El Sexo, piedra de tropiezo y roca de escándalo según rezan las Sagradas escrituras), mientras, los animales que escogió Itzamná no se cansaban de recorrer.

Fuentes