José Tomás Errázuriz
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José Tomás Errázuriz. Pintor chileno preferentemente de retratos ("Retrato" de 1891) y paisajes ("Gaviotas en el Támesis", "Niños en el paisaje", "Balcón y flores"). Su producción no es muy numerosa, ya que todo lo hizo con mucha prolijidad. Fue diplomático en las ciudades de París, Francia y Londres, Inglaterra. Fue pintor por afición pese al gran tiempo que dedicó a esta actividad, pocas veces firmó sus cuadros, y éstos se conocieron en Chile sólo varios años después de su muerte. Su carrera de diplomático la ejerció en las ciudades de París y Londres, lugares donde el pintor vivió la mayor parte de su vida y pintó casi toda su obra, visitando sólo esporádicamente su patria.
Síntesis biográfica
Nace en Santiago en noviembre de 1856 y falleció en Europa en abril de 1927. Hijo de Maximiano Errázuriz, uno de los chilenos con más fortuna de la época, manifestó inclinaciones por el arte desde muy pequeño.
Se casó con Eugenia Huicci, una bella joven, quien desempeñó un papel importante en los salones intelectuales europeos de principios de siglo, ya que entre sus amistades estuvo Picasso, quien realizó un hermoso dibujo de ella; Juan Gris y el poeta Guillaume Apollinaire.
Trayectoria artística
En 1883 abandonó Chile y se instaló en París, donde estudió bajo la dirección de Humbert y Giroez y expuso en el Salón de París de 1886. Entabló amistad con los notables retratistas Giovanni Boldini y John Singer Sargent, cuya huella se advierte en algunos retratos femeninos realizados por Errázuriz posteriormente.
La época de verano era aprovechada por el artista para ir al campo acompañado de su familia y pintar las aldeas de Gales, en la vieja Inglaterra, a las campesinas y sus aldeas de rústicas casonas en Bretaña.
Obra
Utilizó siempre recursos plásticos refinados y realizó obras muy bien ejecutadas y de atractiva temática, demostrando predilección por lo sencillo y campestre.
En los interiores, el tema principal fue la mujer pensativa y triste. Aquí es donde logró una calidad cromática excepcional. Fue siempre respetuoso de los valores plásticos y en sus obras desplegó mesura y equilibrio.
Una de las características más importantes de la obra de Errázuriz fue la reelaboración racional de la realidad que se percibió claramente en la composición de los elementos plásticos, cuyo reordenamiento fue la consecuencia de un análisis riguroso de lo real, que permitía su integración en la tela como un todo pictórico.
El dibujo jugó un papel prioritario en su visión pictórica, elemento plástico que él dominó con gran maestría y calidad: estructura el objeto, lo delimita y lo define.
Premios
Recibió premios como la primera medalla en el Salón Oficial de Santiago (1877); segunda medalla en el Salón Oficial de Santiago (1878); mención honrosa, Salón de París, Francia (1888); primera medalla en el Salón Oficial de Santiago (1888).
