Kochia scoparia

Kochia scoparia
Información sobre la plantilla
Kochia scoparia.jpg
Nombre Científico:'
Reino:Plantae
Subreino:Tracheobionta
División:Magnoliophyta
Clase:Magnoliophyta
Subclase:Caryophyllidae
Orden:Caryophyllales
Familia:Oleaceae
Género:Fraxinus
Especie:F. americana

Kochia scoparia. Es una planta anual de la familia Chenopodiaceae, rústica, de bajo costo de producción y de bajo consumo de humedad, tiene un alto contenido de proteína es resistente a la sequía y crece en gran variedad de suelos, incluyendo los salinos y erosionados e incluso en los subhúmedos, aunque debe quedar claro que es sensible a los excesos de humedad.

Origen

Es originario de la depresión salina de Barabinskaya, cerca de Novosibirsk en la región Centro-Sur de Asia y se estableció en América a principios de este siglo. En México, se utiliza desde hace más de 25 años, ya se conoce en más de 15 entidades federativas, entre ellas destacan: Durango, Chihuahua, Coahuila, Sonora, Querétaro, Hidalgo, Tlaxcala, Oaxaca y Puebla.

Reproducción

Se reproduce mediante semilla, que es dispersada por el viento, el agua, y especialmente cuando la planta entera es arrancada y llevada por el viento.2 La semilla puede resistir hasta un año en el suelo sin germinar.

Usos

La planta se utiliza como alimento humano, medicina tradicional, forraje y control de erosión. Las semillas se utilizan para un aderezo llamado tonburi en japonés. Su textura es similar al caviar, por lo que suele llamársela caviar terrestre o caviar de montaña. Las semillas tienen de 1 a 2 mm de diámetro, de color verde obscuro brillante.

El tonburi se utiliza también en la medicina tradicional china, que le atribuye propiedades para prevenir desórdenes metabólicos como hiperlipidosis, hipertensión, obesidad y ateroesclerosis. En un estudio de ratones consumiendo una dieta rica en grasas, un extracto de tonburi limitó el desarrollo de obesidad.

La planta tiene además bastante utilidad como forraje para el ganado, con la ventaja de medrar en suelos secos. Kochia scoparia tiene también aplicaciones ornamentales y como control de erosión de suelos.

Importancia

La coquia es importante en el mejoramiento ecológico del medio ambiente en virtud del bióxido de carbono que fija, por el mayor ingreso de energía que le proporciona al ecosistema, por la retención del agua de lluvia, por la adición de materia orgánica al suelo, por la utilización que favorece de terrenos marginales, por la recuperación de agostaderos, por los mejores ingresos económicos que propicia como consecuencia de los altos rendimientos de forraje, por la explotación de la ganadería de traspatio que a su vez disminuye la pobreza extrema en el medio rural, por el incremento de la producción pecuaria en carne, leche, huevo y sus derivados y por la utilización directa en el consumo humano igual que el quelite o la espinaca, entre otros.

Aspectos agronómicos

La Coquia requiere de condiciones óptimas de humedad durante la germinación y la emergencia. En los primeros 20 días, el crecimiento es lento, ya que apenas alcanza una altura de 2-3 cm; después puede crecer más de 1 metro por mes y alcanzar alturas hasta de 2 m al momento de corte.

La coquia sólo requiere labranza mínima, para la siembra el terreno previamente debe rastrearse a fin de eliminar las hierbas competidoras. Se utilizan de 8 a 10 kilogramos de semilla por hectárea en terrenos de temporal, de 6 a 8 en terrenos con riego y de 1 a 2 en siembras con equipo aéreo. La siembra puede ser en líneas separadas entre 40 y 60 centímetros una de otra para controlar las hierbas competidoras y como en la alfalfa se recomienda no depositar la semilla a más de 3 milímetros de profundidad.

De preferencia debe aplicarse abono orgánico, o una fertilización con 60 kilogramos de nitrógeno y 40 de pentóxido de fósforo por hectárea. El terreno debe de estar libre de malezas, de lo contrario el rendimiento de la Coquia disminuirá considerablemente.

Para germinación y establecimiento en suelos arenosos, donde la evaporación es alta, la coquia necesita de 2 a 3 riegos ligeros. En los suelos arcillosos que se agrietan cuando secos, debe sembrarse en húmedo. En condiciones de temporal, le bastan 200 milímetros de lluvia para producir satisfactoriamente. La Coquia es tolerante a las Triazinas.

El momento de corte adecuado se da cuando la floración está a 5%, período cuando la planta alcanza su mayor contenido proteínico, el cual es de 16 a 28%. Es importante hacer el corte a 15 cm sobre el ras del suelo para facilitar el rebrote. La Coquia es una planta anual; por lo tanto, el número de cortes varía de uno a tres y está en función del clima y suelo. El primer corte es el de mayor rendimiento, razón por la cual algunos productores prefieren volver a sembrar, sobre todo cuando obtienen de 70 a 80 ton/ha de forraje verde en 65- 75 días.

Ventajas

  • Amplia adaptación a climas y suelos.
  • Tolerante a la salinidad (hasta 14ds/m),
  • Crece en tepetates roturados,
  • Resistente a la sequía, una vez establecida en buenas condiciones de suelo.
  • Soporta bajas temperaturas, cuando germina.
  • Resistente a plagas y enfermedades.
  • El forraje se puede conservar en forma de silo, de heno y de “pellets”.
  • Forraje de alta calidad, comparable con la alfalfa.
  • Rústica y económica.
  • Alta relación beneficio/costo. (5:1; 7:1)

Consumo de agua

La Coquia se distingue también por su bajo consumo de agua, requiere 4 - 6 veces menos que lo que necesita la alfalfa ya que con sólo 200 mm de lluvia se llega a producir de 40 a 70 toneladas de forraje verde por hectárea y en condiciones de riego con 50-60 cm de agua, la producción puede alcanzar de 80 a 130 ton/ha de materia verde. La Coquia se presenta así, como una alternativa para reducir el abatimiento de los acuíferos (Comarca Lagunera, Costas del Pacífico, el Bajío, Valle de México y Valle de Puebla) Bajo condiciones de temporal, se recomienda la captación de lluvia con microcuencas ó con manejo de escurrimientos superficiales, con el objeto de incrementar los rendimientos de forraje.

Enlaces externos

Fuentes

  • Muhaidat, R. (2007), «Diversity of Kranz anatomy and biochemistry in C4 eudicots», American Journal of Botany 94: 362, doi:10.3732/ajb.94.3.362
  • Han LK, Nose R, Li W, Gong XJ, Zheng YN, Yoshikawa M, Koike K, Nikaido T, Okuda H, Kimura Y (October 2006). «Reduction of fat storage in mice fed a high-fat diet long term by treatment with saponins prepared from Kochia scoparia fruit». Phytotherapy Research : PTR 20 (10): pp. 877–82. doi:10.1002/ptr.1981. PMID16892459.
  • Rankins DL, Smith GS, Hallford DM (July 1991). «Serum constituents and metabolic hormones in sheep and cattle fed Kochia scoparia hay». Journal of Animal Science 69 (7): pp. 2941–6. PMID 1885 403.