Luca Della Robbia
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Luca Della Robbia. Escultor vanguardista, impulsor del movimiento renacentista del siglo XVI en Italia.
Sumario
Síntesis biográfica
Niñez
Nació en Florencia, Toscana, Italia. Fue educado, conforme a las costumbres de la época. Nacido en una familia de escultores y ceramistas italianos su padre lo coloco a temprana edad en casa del orfebre Leonardo, hijo de Giovanni, considerado, por entonces en Florencia, como el mejor maestro en el arte de olfebrería.
Trayectoria Artística
Luca fue un escultor religioso de escuela florentina, impulsor de cambios a principios de la era renacentista. Su primera actividad como artesano fue en el mundo textil, al igual que habían hecho todos sus antepasados. No es casualidad que el apellido Della Robbia derive de rubia tinctorum, un colorante rojo para tejidos. Sin embargo, al cabo de poco tiempo, Luca se interesa por la escultura y la arquitectura debido, tal vez, a su amistad con personajes como Brunelleschi, Donatello, Ghiberti, Leon Battista Alberti, Michelozzo y Lorenzo el Magnífico. Sus intereses humanísticos lo guían hacia la escultura de barro cocido, un arte muy conocido y apreciado en la antigüedad, que renace en el s. XV fruto del interés por el pasado. Hacia 1440 empezó a emplear relieves de terracota (arcilla al horno), cubierta con barniz (vitrificado), de colores en conjuntos arquitectónicos y escultóricos, entre los que cabe destacar el ciborio de Santa Maria de Peretola, los lunetos con La Resurrección y La Ascensión de la catedral de Florencia, los tondos de la capilla Pazzi, las delicadas Madonas, el monumento fúnebre del obispo Federeghi (actualmente en Santa Trinità) y el techo de la capilla del cardenal de Portugal en San Miniato al Monte. Luca da un nuevo impulso a los trabajos de tierra cocida vidriada y, gracias a ellos, se hace rico y famoso. Así, en 1446, compra una gran casa en la calle Guelfa de Florencia y, allí, instala su taller que fue muy famoso en todo el mundo durante más de un siglo. De este taller salen esculturas, relieves y otras obras que obtienen un inmediato éxito comercial debido a su bajo coste, a la posibilidad de enviarlos a lugares lejanos e inaccesibles y a la resistencia e impermeabilidad de los materiales. Su primera obra documentada es La cantoría de mármol de la catedral de Florencia, de la que se conservan diez relieves. Del mismo período son los cinco paneles hexagonales con Las artes liberales del campanile de Giotto. De los cinco hijos que continuaron la actividad paterna destacan Giovanni Della Robbia y Girolamo Della Robbia
Su obra
Luca fue un vanguardista de su época y sus obras se destacan por la originalidad y frescura que encantan a primera vista. La técnica utilizada para generar el material básico, la cocción y el brillo de sus lacas era exclusivo y provenía de una receta desarrollada por su misma familia, dedicada por generaciones al uso artístico de la arcilla. Una vez terminada la escultura, se pintaba de color blanco para simular marmol y finalmente se sellaba con esmalte incoloro. Entre sus principales obras se destacan:
- Niño con Vela
- Cristo y Tomás
- Madonna con el Niño y dos ángeles
- Tabernáculo para Santa María Novella en la Colegiata de Peretola
- Virgen con Lilas
- Palco de Coro
- Cantoría de la Catedral de Florencia 1431-1438
- Medallones de Campanille 1437-1439
- La Puerta de Bronce de la misma Catedral 1446
Últimos años
Della Robbia fué contemporáneo de Donatello, el gran maestro del Renacimiento, pero esto no le impidió para nada brillar con un estilo separado del que tenía este gran. Gracias a la perfección de sus obras, Della Robbia esta situado en la historia de la escultura como uno de los mejores. Su figura representa a aquellos que el arte les conmueve para actuar con heroismo. Della Robbia, como buen pionero, arriesgó todo por innovar los estilos medievales reinantes. La expresión de sus obras comprueban que valió la pena, otorgándole sobradamente, un lugar de privilegio en la historia de la escultura europea.
Muerte
Luca Della Robbia falleció en febrero de 1482.
