Lugar histórico donde fue asesinado el niño mártir Orestes Gutiérrez
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Lugar histórico donde fue asesinado el niño mártir Orestes Gutiérrez. Ubicado en Cayo Espino en el municipio Manzanillo de la provincia Granma.
Nacimiento
Orestes Gutiérrez nace el 17 de enero de 1952 en la finca Vista Alegre, siendo hijo de Virgen Escalona y Orestes Gutiérrez Peña.
Fundamentación
En cierto lugar de la finca donde naciera Orestes, se agrupaba un pequeño caserío a principios de abril de 1958, nombrado El Pozón, donde las fuerzas rebeldes al mando del Capitán Verdecia se anotaran una nueva victoria. El 10 de abril, cuando llegó el grupo de rebeldes capitaneados por Verdecia, el niño exclamó: ¡Ahora viene Fidel!
Horas después se oyeron aviones enemigos; la táctica de arrasar los campos cubanos constituyó una alternativa de las fuerzas batistianas ante la imposibilidad de derrotar en enfrentamientos directos a los rebeldes, pues su movilidad y capacidad de ocultamiento entre la espesura del monte y la Sierra hacía harto difícil su captura. Los habitantes del lugar corrieron a refugiarse, pero no todos pudieron hacerlo pues una bomba fulmina a Elba Vázquez e hiere mortalmente a Orestes quien es recogido por su madre, que con el concurso de los allí presentes lo traslada al hospital de campaña que atiende René Vallejo Ortiz.
En el lugar el niño ve a Fidel Castro Ruz y momentos después muere a causa de la hemorragia interna producida por las heridas y contusiones recibidas. Minutos antes clamaba por su abuelita para decirle que la había querido mucho, pero ya no podía hacerlo porque iba a morir. Era Orestes como todos los niños, quizás un poco silencioso, pero precoz y alegre. Era el béisbol el juego preferido, convertía un palo de escoba en bate y un manojo de trapos en pelota profesional. Tras su muerte el Comandante en Jefe expresó: "Cuánta cobardía y alevosidad de esos pilotos que sentados cómodamente en sus aparatos, sin riesgo alguno para sus vidas asesinan mujeres y niños inocentes. Ah, hemos tomado día y hora para exigirles el castigo que merecen cuando llegue el instante de rendir cuentas y marcar sus nombres y apellidos con estigma imborrable de modo que hasta sus propios hijos se avergüencen de ellos. Los pilotos que ametrallaron Cayo Espino el 10 de abril a las 3:40 p.m son criminales de guerra que deshonran la nación cubana.
El recuerdo del niño moribundo no se borrará jamás de la mente de los campesinos. Allí en Cayo Espino levantaremos un monumento al niño Orestes Gutiérrez Escalona, símbolo de los inocentes que han caído".
Véase también
Enciclopedia de Manzanillo Consejo Popular Cayo Espino.
Fuente
Enciclopedia de Manzanillo Colaboración Andriel Reyes Sosa
