Miguel Francisco Viondi y Vera
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Miguel Francisco Viondi y Vera nació en La Habana el 7 de octubre de 1846.Abogado, Alcalde de la Villa de Guanabacoa .
Síntesis biográfica
El abogado Miguel Francisco Viondi y Vera nació en La Habana el 7 de octubre de 1846. Fue alcalde de la Villa de Guanabacoa en 1879, en virtud del Convenio de Paz del Zanjón. En su bufete trabajaron José Martí y Juan Gualberto Gómez, a quienes lo unió una fuerte y sincera amistad. No olvidemos que en su majestuosa casa (Máximo Gómez esquina San Antonio) pernoctaba el Apóstol durante sus frecuentes visitas a Guanabacoa. Inicialmente integró las filas del Partido Liberal Autonomista, pero una vez que Valeriano Weyler decretó su política de represión y exterminio en contra del pueblo cubano, el licenciado Viondi puso sus energías a disposición del Comité Revolucionario de la Villa de Guanabacoa, llegando a ocupar la presidencia del mismo. Estas actividades conspirativas provocaron su encarcelamiento en la fortaleza de la Cabaña. Aun antes de terminar la Guerra del 95, Viondi tuvo la valentía de denunciar el atroz asesinato de varios guanabacoenses en los campos de La Jata. Su fortuna personal y la de su familia las dedicó a la causa de la libertad.
Accionar Revolucionario
Durante la República Viondi ocupó altas responsabilidades políticas. Entre ellas las más sobresalientes fueron: miembro de la Comisión Consultiva durante la segunda intervención militar norteamericana(1906-1909) ; Representante a la Cámara en 1908; Letrado Consultor de la Secretaría de Justicia en 1915; y, en 1917, Comisionado Encargado del Diario de Sesiones y del Archivo de la Comisión Consultiva. A los servicios prestados en el desempeño de tan altas responsabilidades públicas habría que agregar los innumerables beneficios que de manera particular realizó a favor de los guanabacoenses necesitados
Vivió
Casona colonial situada en la calle Máximo Gómez No. 126 esquina a San Antonio, en la Villa de la Asunción de Guanabacoa. Es una vivienda del sigloXIX, medianera que se organiza alrededor de un patio interior. Ella evidencia los códigos del neoclasicismo. Su fachada es sencilla, la caracterizan los grandes vanos; en primera planta son guarnecidos por jambas y en segunda protegidos por guardapolvos, pilastras embebidas, el balcón corrido, la cornisa y el pretil.
Monumento a Viondi
A las 8:45 de la noche del miércoles 13 de abril de 1921 quedó constituido en Guanabacoa el Comité Gestor encargado de erigir un monumento al ilustre cubano don Miguel Francisco Viondi y Vera, Hijo Adoptivo de esta Villa. Este comité fue presidido por el alcalde municipal Diego Salustiano Franchi y Sosa, en cuyo despacho se celebró la primera reunión en la fecha anteriormente señalada. Para ocupar la vicepresidencia fue designado el Dr. Francisco María Héctor. El primer asunto discutido por los miembros del comité fue el referido al costo del monumento y el lugar donde éste debía erigirse. Por unanimidad fue designada la plazoleta de Santalla como el lugar más idóneo para tal finalidad. El dinero para financiar la obra provendría de una colecta organizada a nivel nacional. De esta manera se logró que el aporte de los guanabacoenses fuera acompañado de las contribuciones monetarias de varios gobernadores provinciales y alcaldes municipales de toda la República de Cuba, pese a la crisis por la que atravesaba el país. En La Habana, por ejemplo, el Consejo Provincial y el gobernador de la provincia, cooperaron con un donativo que ascendió a la suma de 1 500 pesos. El alcalde Diego Franchi, en un mensaje enviado a los miembros del Ayuntamiento municipal, les informó de las labores que venía desarrollando el recién constituido Comité pro monumento a Viondi. Al respecto —señalaba Franchi— los promotores de esta idea habían acordado que “siendo la plazoleta llamada de Santalla el lugar más adecuado para ello, se solicitase del Ayuntamiento por conducto del Ejecutivo, que acordase permitir (…) llevar a efecto esa obra en dicho lugar, sin que por ello se le originase ningún gasto, pues estos corren todos por cuenta del mencionado Comité”. Fueron analizados varios proyectos y planos de parques hasta que finalmente resultó elegido uno que había sido diseñado y propuesto por el Dr. Francisco María Héctor, principal propulsor de la idea. En la sesión del Comité celebrada en la noche del 14 de julio de 1922 se acordó conferirle al señor Héctor un voto de confianza "para que formulara las bases del contrato que se habría de celebrar con el escultor que hubiera de realizar la obra, fijando el alcance de la misma, determinando la clase de monumento según lo estimare conveniente, de acuerdo con los recursos con que contara el Comité (…) hasta lograr la consecución del propósito". Haciendo uso de las amplias facultades depositadas en él, procedió el Dr. Francisco María Héctor a firmar el contrato de la obra con el reconocido escultor italiano Aldo Gamba. El convenio especificaba que el monumento de referencia consistiría "en un busto de mármol sobre pedestal de travertino, debiendo medir busto y pedestal, dos metros o más, de altura, con la inscripción: AL LICENCIADO MIGUEL F. VIONDI Y VERA, quedando terminada dicha obra en 6 de Junio del presente año de 1923". deber y fundamento de toda moral." Finalmente se develó el monumento en la noche del 26 de junio de 1923 por el propio doctor Héctor, siendo alcalde de Guanabacoa el señor Joaquín Masip y Domínguez. El día fijado para develarlo era el 24, pero tuvo que ser suspendido por causa de un torrencial aguacero que cayó aquella noche, habiéndose celebrado 48 horas más tarde, 26 de junio de 1923 por el propio doctor Héctor, siendo alcalde de Guanabacoa el señor Joaquín Masip y Domínguez.
Fuente
- De la Guardia, Elpidio: Historia de Guanabacoa. Imprenta “Noticias”. Guanabacoa, 1946.
- Herrera López, Pedro A.: “Un pueblo sin historia es menor de edad”. Revista UNION Guanabacoa Caballeros Católicos. Año XXIV No. 2, febrero de 1957.
- Castellanos, Gerardo: Relicario Histórico. Frutos coloniales y de la vieja Guanabacoa. Imprenta Alfa. La Habana, 1948.
- Archivo Municipal de Guanabacoa
