Millepora alcicomis

Coral de fuego ramoso
Información sobre la plantilla
Millepora alcicornis.jpg
Clasificación Científica
Nombre científicoMillepora alcicomis (Linnaeus, 1758)
Reino:Animalia
Filo:Cnidaria
Clase:Hidrozoa
Orden:Capitata
Familia:Milleporidae

Coral de fuego ramoso. El resto de las integrantes del género está considerada dentro de esta especie.[1] La forma delicatula se encontró en las aguas interiores del Golfo de Guacanayabo y se considera endémica de Cuba. El nombre científico de esta especie es Millepora alcicomis.[2]

Características fenotípicas

Tipo de coral

Colonial.

Aspecto

Colonias ramificadas de forma variable (mayormente en forma de candelabro) o costrosas. Las ramas suelen ser delgadas, cilíndricas o algo aplanadas, dispuestas en uno o varios planos. Se han descrito dos formas: la alcicornis, que se corresponde con el tamaño medio a mayor, y la delicatula (Martínez-Estalella, 1980), de características similares pero dimensiones menores.

Tamaño

Generalmente no se elevan más de 25 cm del suelo, pero algunas pueden superar los 50 cm. El grosor oscila entre 0.3 y 1 cm, en la parte de las ramas.

Color

Carmelita claro o amarillo mostaza.

Cálices

Forma

Cilíndricos.

Distribución

Gastrozoides rodeados por 4 a 7 dactilozoides. (5 a 50 gastroporos por cm2 y 45 a 200 dactiloporos por cm2).

Diámetro

Gastroporos con 0.18 a 0.28 mm de diámetro y dactiloporos con 0.08 a0.20 mm de diámetro aproximadamente.

Cenósteo

Poroso.

Hábitat

Abunda mayormente entre los 5 y 25 m de profundidad y pueden alcanzar en ocasiones los 40 m. Cubren con frecuencia gorgonas, objetos sólidos del fondo y eventualmente raíces de mangle.

Reproducción

Sexo desconocido. Posee una fase de medusa incompleta. Gemación extratentacular. Buena tasa de reclutamiento.

Resistencia

Poco resistentes al daño mecánico y a niveles importantes de tensión hidrometeorológica. Suele soportar los efectos de la contaminación de origen urbano con mucho más éxito que la mayoría de las especies de escleractinios.

Enfermedades

Banda negra y plaga blanca. Sensible al blanqueamiento.

Referencias

Fuentes

  • González, S. (2004). Corales pétreos: jardines sumergidos de Cuba. La Habana: Editorial Academia.