Necrosis grasa

Necrosis grasa
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Concepto:Trastorno provocado por traumatismo o infección en el que las grasas neutras tisulares se desdoblan en ácidos grasos y glicerol. La necrosis grasa es más frecuente en las mamas y las regiones subcutáneas. También puede desarrollarse en la cavidad abdominal tras un ataque de pancreatitis que produzca una liberación de enzimas pancreáticas.

Necrosis grasa. En su forma más típica, suele presentarse en mujeres obesas y/o con mamas voluminosas, preferiblemente mayores de 40 años, que refieren haber sufrido un traumatismo a ese nivel en los días previos.

Muchas pacientes durante el cumplimiento de sus labores hogareñas sufren algunos traumatismos, que después no recuerdan porqué no les dieron la debida importancia, y por tanto, a veces, en el interrogatorio no es fácil precisar el antecedente del golpe, pero se debe insistir en la búsqueda de este dato.

Examen físico

Cuando se examina a la paciente portadora de esta enfermedad, lo primero que se piensa es la presencia de un cáncer de la mama, pero, si se logra determinar la existencia de un golpe, se debe insistir en la realización de un buen diagnóstico diferencial.

Al interrogatorio, en las formas más típicas se recogerá el dato de que la piel estuvo mucho más inflamada en los días previos y que ha disminuido la inflamación, aunque a veces demora mucho tiempo en recuperar su coloración normal, lo cual está en dependencia de la reabsorción total del hematoma.

A la inspección se comprobará lo anterior, así como una elevación de la zona tumoral, lo que provoca evidente asimetría con el otro lado. A la palpación se encuentra un tumor duro, irregular, mal delimitado, poco doloroso, la piel puede estar algo retraída a ese nivel e incluso pueden palparse adenopatías axilares pequeñas.

Exámenes complementarios

La mamografía muchas veces no es concluyente y, ante la duda, el radiólogo suele sugerir la realización de una BAAF, por lo que muchas veces se indica este examen desde el mismo instante en que se recibe a la enferma. La citología suele ser concluyente, pero, en caso que no lo fuera, se puede recurrir a otra más abarcadora con agujas de tru-cut, o incluso practicar una biopsia escisional para congelación.

Es importante aclarar que, un traumatismo no excluye la posibilidad de un cáncer. Incluso, la práctica médica ha demostrado que una paciente puede haber tenido un aumento de volumen de la mama por un tumor maligno durante algún tiempo y que no se haya percatado de ello. Sin embargo, recibe un traumatismo de variable intensidad en la mama tumoral y es cuando se comienza a palpar y descubre ese tumor que tenía previamente y del que no se había percatado.

Por tanto, ante una mujer con las características citadas no se puede hacer el diagnóstico clínico de necrosis grasa y se debe obtener su confirmación citológica o histológica, pues, si se tratara de una neoplasia maligna, se impone realizar el diagnóstico lo antes posible.

Tratamiento

El tratamiento suele imponerse con antiinflamatorios sistémicos o preferiblemente tópicos, como puede ser con fomentos fríos de suero fisiológico, seguidos por la aplicación local de alguna crema antiinflamatoria, y entre estas se sugiere, por su facilidad de obtención, la de manzanilla. Otra posibilidad es la aplicación local de fomentos fríos de manzanilla, tantas veces al día como la paciente los pueda realizar. En casos graves o pacientes con algún tipo de inmunosupresión, es imprescindible la antibioticoterapia.

Fuentes