Palacios reales de Abomey
| Palacios reales de Abomey | |
|---|---|
  Nombre descrito en la Lista del Patrimonio de la Humanidad. | |
 Conjunto de los palacios reales | |
| Coordenadas | 7°10′60″N 1°58′60″E |
| País |  Benín |
| Tipo | Cultural |
| Criterios | iii, iv |
| N.° identificación | 323 |
| Región | África |
| Año de inscripción | 1985 (IX sesión) |
| En peligro | 1985-2007 (retirada en 2007) |
Los Palacios reales de Abomey, construidos en la ciudad de igual nombre, en el departamento de Zou Benín, anteriormente la capital del antiguo reino de Dahomey, incluida la República de Dahomey, que se convirtió en Benin hoy en día. Son un grupo de estructuras de tierra construidas por los Fon entre los siglos XVII y XIX, (alrededor de 1625). Uno de los sitios más famosos y tradicionales de importancia histórica en el África Occidental. Estos palacios forman uno de los sitios del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, incluidos en 1985.
Sumario
Descripción
Los palacios reales de Abomey son testimonio excepcional de una tradición cultural que se ha vuelto vulnerable por el impacto del tiempo. Todavía utilizados regularmente por los rituales tradicionales y para las ceremonias reales, los edificios de los palacios son importantes no sólo por el pasado que representan, sino también por la tradición que ayudan a sostener. Para una sociedad sin documentos escritos, los bajorrelieves utilizados como elementos decorativos, sirven como un registro único del pasado, que representan los acontecimientos más significativos de la evolución de los Fon y su imperio, glorificar las victorias militares y el poder de cada rey y la documentación de los mitos, las costumbres y los rituales del pueblo Fon.
El reino de África Occidental de Abomey (anteriormente Dahomey), fundada en 1625 por el pueblo Fon, se convirtió en un poderoso imperio militar y comercial. En virtud de los doce reyes que se sucedieron desde 1695 hasta 1900, el reino se convirtió en uno de los más poderosos en la costa oeste de África. Hasta finales del siglo XIX, su principal fuente de riqueza era de venta de los prisioneros de guerra como esclavos a los comerciantes de esclavos europeos para el transporte a través del Atlántico hacia el Nuevo Mundo.
Cada uno de los doce reyes construyó un suntuoso palacio en los jardines reales de Abomey, la capital, todo dentro de la misma área, de acuerdo con los palacios anteriores en cuanto a la utilización del espacio y de los materiales. Todos ellos se caracterizan por una serie de constantes estructurales: en el área amurallada, cada palacio tiene sus propias paredes y también se construyen en torno a tres patios: el patio exterior es el lugar de las ceremonias rituales y desfile militar; el patio interior y el patio privado, permiten el acceso a la residencia del rey y las reinas de dos zonas diferenciadas, la de los palacios y la del norte-noroeste, la zona de el Palacio de Akaba.
A través de los siglos, el complejo de palacios llegó a estar lleno de viviendas, instalaciones, murales, esculturas y una serie de intrincados bajorrelieves, que fueron utilizados como un elemento decorativo esencial en las fachadas de la mayoría de los palacios. Las paredes muestran que el poderío militar del reino de Abomey se basó, en parte, en las empresas de mujeres guerreras que coincidan con sus homólogos masculinos en fiereza y valentía. También describen animales míticos que simbolizan las características de los reyes y su poder como gobernantes.
Con el fin de desafiar la ocupación francesa en 1892, el Rey Behanzin ordenó que la ciudad (incluyendo los palacios) se quemara. La Salle des Bijoux (Salón de Joyas), el palacio de un gobernante anterior, se cree que ha sido una de las pocas estructuras que sobrevivió al fuego, por lo que sus bajorrelieves de particular importancia, han quedado como un registro histórico de la rica cultura de la Fon.
Criterios de selección de la UNESCO
- Criterio (iii): Los palacios reales de Abomey son un grupo de monumentos de gran valor histórico y cultural, debido a las condiciones que llevaron a su erección y los hechos que han contemplado. Ellos son la expresión viva de una cultura y de un poder organizado, testimonio del pasado glorioso de los reyes que gobernaron el Reino de Dahomey en los aós 1620-1900.
- Criterio (iv): Organizado como una serie de patios de creciente importancia, el acceso a cada se hace a partir de portales construidos de las paredes del recinto principal; esto hace que los palacios reales de Abomey sean un conjunto arquitectónico único. Estas estructuras fortificadas complejas ilustran el ingenio desarrollado por el poder real, desde la mitad del siglo XVII, para cumplir con el precepto establecido por el fundador del reino Wegbaja “que el reino siempre se hará mayor".
Integridad
Un inventario realizado en 1995 con el apoyo del Centro del Patrimonio Mundial, identifica y asigna 184 componentes. Del mismo modo, las dimensiones de la propiedad se rectificaron a 44 - 47 ha, y sus límites protegidos por una zona de amortiguación claramente definido. Hoy en día, más de la mitad de estos componentes han sido restaurados de acuerdo con las normas de conservación aceptadas y con el apoyo de la UNESCO y algunos socios del Estado de Benín, entre ellos las familias reales.
Autenticidad
La autenticidad del sitio se basa en la funcionalidad continua de los palacios. La celebración regular más o menos de las ceremonias tradicionales y la organización de los trabajos de rehabilitación de los edificios para eventos especiales, respetando los saberes tradicionales, fortalecen la autenticidad del sitio.
Por otra parte, ciertos elementos como el Djexo (cabaña que alberga el espíritu del rey), Adoxo (tumba del rey) y otros lugares sagrados, siempre se les ha dado una atención especial en lo que respecta al respeto de los materiales tradicionales. Técnicas de laterita, agua, madera, paja y de construcción tradicional, mantienen las referencias de cualquier intervención que debería permitir una buena transmisión de este patrimonio a las generaciones futuras. Con todo, muchas iniciativas se han tomado desde una perspectiva dinámica y con la lógica de la continuidad de la tradición.
Requisitos de protección y de gestión
La aprobación y promulgación de la Ley N º 2007-20 de 23 de agosto de 2007 sobre la protección del patrimonio cultural y el patrimonio natural de importancia cultural en la República de Benin, y el decreto sobre la regulación de la planificación urbanística de la zona de amortiguamiento del sitio en una lista elaborada por la Ciudad de Abomey en 2006, proporciona un marco seguro para la protección de la propiedad. Además, el sitio de los palacios reales de Abomey siempre ha incluido espacios sagrados que son respetados por las familias reales y las poblaciones. La organización de las ceremonias rituales, es otra manera de salvaguardia apropiada.
La gestión administrativa, técnica y participativa de este sitio se rige por los decretos del Ministro de Cultura. Además de la existencia de una estructura técnica de la gestión diaria, dirigida por el Director de la obra, un Consejo de Administración en el que participan todas las partes interesadas (ayuntamiento, poblaciones, familias reales, especialistas en patrimonio, estado), permite la gestión participativa dinámica de esta propiedad. Las actividades llevadas a cabo en el sitio respetan las disposiciones del plan para la conservación, gestión y valorización del sitio. La precariedad de los materiales de construcción utilizados en el sitio, las actividades humanas y los fenómenos naturales que puedan amenazar al estado de conservación de la propiedad, se encuentran entre los elementos que reciben una atención especial a través de un plan de gestión de riesgos y un mecanismo de seguimiento, en relación con los dos temas de gestión y diferentes medios de intervención en el sitio.
