Parálisis laríngea

Parálisis Laríngea
Información sobre la plantilla
Parálisis del nervio laríngeo.gif

Parálisis Laríngea. Se pueden clasificar en dos grupos: aquellas en que se afectan aisladamente determinados músculos, y las globales de toda la musculatura. A ellas se debe añadir la mal llamada parálisis de dilatadores.

Son las producidas por lesión de los nervios motores de la laringe y en ellas se afecta la musculatura de toda la hemilaringe.

Tipos de parálisis laríngeas

Existen dos grandes grupos de parálisis laríngeas: centrales y periféricas

Parálisis periféricas

Son con mucho las más frecuentes, y aunque pueden ser idiopáticas o de origen neural, la mayoría de las veces son de naturaleza compresiva o traumática, a nivel torácico o cervical.

Parálisis centrales

Son mucho menos frecuentes y están producidas por lesiones del núcleo ambiguo, son, por tanto, parálisis asociadas. En su forma genuina, se afectan los pares IX,X y XI, lo que constituye el llamado síndrome bulbar anterior. Otras veces aparecen los síndromes de Avellis, Schmidt o Jackson,

Causas

Causas idiopáticas

  1. Congénitas Neuríticas
  2. Tóxicas (muy poco frecuentes)

Causas cervicales

  1. Traumatismos Cáncer de esófago
  2. Cáncer de tráquea, Cáncer de hipofaringe, Cáncer de tiroides, Cirugía tiroidea
  3. Intubación laríngea

Causas torácicas:

  1. Traumatismos, incluyendo los quirúrgicos Tumores mediastinicos
  2. Cáncer broncopulmonar Cáncer de tráquea Cáncer de esófago
  3. Tuberculosis pulmonar Aneurisma de aorta y subclavia Estenosis mitral por dilatación de la aurícula izquierda

Tratamiento

El tratamiento de las parálisis laríngeas va dirigido a corregir la disfunción vocal, la aspiración, la disnea y la ineficacia tusígena, por lo tanto la indicación como el tipo de tratamiento a emplear y el momento en que es aconsejable realizarlo varía en gran medida según las circunstancias y del tipo de parálisis.

El tratamiento rehabilitador va dirigido a desarrollar un mejor control de la respiración y soporte aéreo, reducir al mínimo posible los mecanismos compensadores hipercinéticos, y utilizar el área de frecuencias en las que se puede mantener con más facilidad el tono vocal.

Fuentes