Regreso de Maceo al territorio de Bahía Honda

Para otros usos de este término, véase Antonio Maceo (desambiguación).
Antonio Maceo
Información sobre la plantilla
Maceo.jpg
Lugarteniente general Antonio Maceo
Lugarteniente General1
General de División 2
NombreAntonio de la Caridad Maceo Grajales
Años de servicio1868 - 1896
ApodoTitán de Bronce


Regreso de Maceo al territorio de Bahía Honda. Hasta su partida definitiva de la provincia. La derrota de Weyler. El primer bando de reconcentración se dictó para la provincia de Pinar del Río con la esperanza de contrarrestar las acciones victoriosas del “Titán”. Cuentan -según la tradición oral-, que para la reconcentración en el territorio, fue escogido el lugar conocido por la “zona”, en los terrenos del ingenio Santa Teresa, cerca del fuerte San Fernando ya que en este lugar predominaba las fuerzas españolas. El número exacto de víctimas que ocasionó esta demencial política, nunca se podrá saber a ciencia cierta, pero es evidente que la población de San Diego de Núñez y Bahía Honda, disminuyen en 9 432 habitantes para un 74.3%. La distribución de las pérdidas en la población de la provincia de Pinar del Río, entre 1887 y 1899, se expresa de la siguiente manera: 17 términos municipales disminuyen en población y sólo en 3 de ellos aumentan. En los términos municipales donde crece la población, inciden dos factores: son aquellos donde se asentaron los reconcentrados o se encontraban más distantes por tal motivo hubo poca o ninguna manifestación de reconcentración, además, servían de refugio a muchos pobladores de otros municipios que huían de la reconcentración, como es el caso de Pinar del Río.

Campaña de Occidente

Durante la campaña militar dirimida por Maceo en la Campaña de Occidente, se realizaron importantes acciones bélicas como los combates en Montezuelo, Tumbas de Estorino y Galalón, entre otros. El día 27 de octubre, posteriormente al combate de Soroa, Maceo se dirige a lo más intrincado de la Sierra del Rosario para establecer campamento en El Brujito, donde permaneció hasta el día 1 de noviembre que parte hacia El Roble. Antes de partir hace precisiones a los generales Pedro Días y Ríus Rivera y al coronel Juan E. Ducasse, sobre la vigilancia estricta que debían tener sobre el movimiento del enemigo; haciendo énfasis en el camino a Soroa y la construcción de sistemas defensivos –fuertes y torres, entre otros– Al respecto firmó una proclama que hizo llegar a todos los jefes: “…No me preocupa la colocación de fuertes enemigos en lugares que usted ha dado en llamar nuestra zona ¿cuál del país no lo es? La impotencia de nuestros crueles adversarios para vencernos a pecho descubierto, los hace construir trincheras, fortalezas y fortines en todas las partes que le es imposible sostenerse con las armas de combate.

Primero de noviembre

El propio día 1 de noviembre, Recibe correspondencia de La Habana, entre las cuales había una de carácter oficial escrita por Máximo Gómez en la que le ordenaba que cruzara la trocha sin pérdida de tiempo, pues su presencia era imprescindible en las regiones de Las Villas y Camaguey. Aún cuando no le explicaba las causas, se percibía que el asunto era delicado. Otras misivas de Gómez llegadas a Maceo, le esclarecía la tensa situación que se vivía alrededor del generalísimo y el gobierno de la República en Armas. Ante el reclamo de su jefe y amigo, el adalid oriental, decide cruzar la trocha para restablecer la autoridad de Máximo Gómez y restituir la normalidad y el orden en la región centro oriental. Con este objetivo, parte de El Roble acompañado de sus oficiales para acercarse a la trocha y practicar un reconocimiento de la misma. Días después, establece su cuartel general en El Brujo desde donde preparó por varios días la estrategia militar para salir de Pinar del Río.

8 de noviembre

El día 8 se dirige a La Ceiba y de ahí, parte al día siguiente con la intención de dirigirse a Tapia. Durante el recorrido al pasar frente al ingenio Manuelita, descubre una división española haciendo campamento desde el día 3. Inmediatamente, da la orden de completar su tropa compuesta por su Estado Mayor, las escoltas de Pedro Días y de Bermúdez, varios hombres del Rubí y de Sotomayor, hasta llegar a 150 hombres, quedando Ríus Rivera en la zona de Soroa y Candelaria.

9 de noviembre

El día 9, estando acampados en las cumbres de El Rubí, llega la noticia que tropas españolas procedentes de El Mariel, habían inundado el valle de Tapia y Manuelita y por el lado de Cayajabos procedentes de Artemisa, también venía otra columna. En total, había más de 10 mil soldados enemigos de las 3 armas, desplegados en el teatro de operaciones. El genio militar del aguerrido mambí, le hizo comprender que tras toda esta demostración de fuerza –6 batallones de infantería, un regimiento de caballería y 6 cañones– se escondía la presencia del Capitán General Valeriano Weyler. En total las fuerzas mambisas eran de 500 hombres mal armados.

10 de noviembre

Ante la inevitabilidad del combate, Maceo personalmente se encargó de preparar la defensa. El día 10 antes del amanecer, acompañado de 130 hombres se dirige al encuentro de González Muñoz que en esta ocasión había escalado El Rubí. Ubica a Ríus Rivera en la loma de La Madama con la intención de hostigar el centro enemigo. Mientras tanto, la avanzada cubana, se encontró de frente con la enemiga que ya ocupaba posición en lo alto de la meseta. El combate fue a quema ropa, Maceo disparó su revólver contra el capitán de la vanguardia, los españoles fueron acribillados a balazos, los mambises maniobraban disputándose el acceso a la altura. Viendo la imposibilidad de mantener la posición, se retiran al auxilio de Ríus Rivera que con sólo 120 hombres defendía el lomerío de La Madama y Gloria contra las huestes de Weyler. El combate duró hasta las 4:00 pm, dejando en el campo de batalla un saldo de 10 bajas por los cubanos y 40 por españoles según el parte militar que no incluye las sufridas por las fuerzas weylerianas.

Pedro Vargas Sotomayor

“En Chile hay un entusiasmo grandísimo por Cuba y si más cerca estuviera tendríamos miles de chilenos en campaña y sin costarnos un centavo”

Pedro Vargas Sotomayor, formó parte de los combatientes extranjeros que asumieron los riesgos y combatieron decididamente al lado de los cubanos, escribiendo páginas de gloria para orgullo de la patria latinoamericana y caribeña. El 9 de noviembre de 1896 victima de una fulminante y penosa enfermedad debió a un repentino y fulminante estado de locura, murió el general chileno, a la edad 27 años en un hospital de sangre en la prefectura de Bacú en el macizo montañoso del Rubí, Bahía Honda, donde fue enterrado. El 16 de diciembre de 1896, el Consejo de Gobierno de la República en Armas le ratificó el grado de general de brigada con antigüedad de 8 de abril de 1896. Las tropas del coronel Segura radicadas en Soroa, avanzan rumbo a Cabañas para encontrarse con Valeriano Weyler que vivaqueaba con sus fuerzas ahí. El día 11, al pasar por la loma del Delirio, fue sorprendido por el brigadier Ducasse, que le produce varias bajas y lo obliga a regresar. Maceo que conocía de la incapacidad de Weyler, creyó que éste se había unida a Segura para tomar el tren en San Cristóbal y regresar a La Habana. Esta idea lo llevó a preparar el cruce de la trocha por Guanajay. Después de hacer un reconocimiento infructuoso sobre ella, decide regresar al Rosario, donde se dio cuenta de su grave error de apreciación. Weyler, creyendo encontrar a Segura, ordenó a González Muñoz que marchara a Río Hondo, adentrándose él en los montes de Oleaga por donde vago perdido, hasta alcanzar la vía férrea, siendo esta la mayor oportunidad que tuvo Maceo de atraparlo.

Resumen de acciones

En resumen, los días comprendidos entre el 9 y el 18, Valeriano Weyler lleva a cabo una campaña contra las fuerzas de Antonio Maceo en los alrededores del Rubí. El sólo participa en las acciones del día 10 contra Maceo en las estribaciones del Rubí. El día 13, abandona el teatro de operaciones y se refugia en Candelaria. Hasta ese día sin contar a los enfermos había sufrido más de 400 bajas, por sólo 56 en el bando cubano, a pesar de lo encarnizado de los combates librados en El Rubí, La Madama, San Blas, Valparaíso, Loma de Vizcaíno, Buena Vista y El Brujito. En el período comprendido del 17 al 25 de noviembre, El general Maceo practicó reconocimiento sobre todo el teatro de operaciones para constatar el estado de devastación que existía en toda la comarca. Conciente de esta situación, tomó todo las medidas necesarias para dejar asegurada la defensa del territorio, designando al frente de las fuerzas de Pinar del Río al general Ríus Rivera. El 25 se despide definitivamente de Bahía Honda, y se dirige hacia el Jobo, de donde sale el día 3 de diciembre en horas de la noche, para realizar el cruce de la trocha por la bahía del Mariel. Con esta acción se despide de Pinar del Río, e ingresa en la provincia de La Habana, donde pierde la vida el 7 de diciembre de 1896. La presencia de Maceo en el territorio se puede resumir en 122 días, de los 305 que permaneció en la provincia de Pinar del Río, se estableció en más de 20 campamentos en nuestras montañas y desarrollo 24 combates importantes (la batalla de Cacarajícara, combates en Tapia, batalla del Rubí entre otros) de los 54 que materializó en la provincia.

Fuentes

  • Agüero, Arístides. Representante diplomático del Partido Revolucionario Cubano en Chile, 18 de mayo de 1897, citado por René González Barrios en Chile en la independencia de Cuba.
  • González Barrios, René. Chile en la independencia de Cuba, Casa Editorial verde Olivo, Ciudad de La Habana, 2007, Pp. 103-121.
  • Franco, José Luciano. Obra Citada, p. 310.