San José de Calasanz
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San José de Calasanz. Pedagogo, fundador y santo.
Síntesis biográfica
(Peralta de la Sal, H., 11-IX-1557 - Roma, 25-VIII-1648). Pedagogo, fundador y santo. Estudió humanidades en Estadilla y la carrera universitaria en Lérida, Valencia y Alcalá, consiguiendo el doctorado en teología. Se ordenó sacerdote el 17-XII-1583. En 1585 asiste a las Cortes de Monzón y actúa de secretario de la comisión de reforma de los agustinos recoletos de Aragón. Interviene en la visita apostólica a Montserrat con el obispo Gaspar J. de la Figuera. Entre 1587-92 trabaja pastoralmente en su diócesis de Seo de Urgel, desempeñando a la vez los cargos de secretario del cabildo, maestro de ceremonias y oficial eclesiástico de Tremp. Viajó a Roma en febrero de 1592 y allí permaneció hasta su muerte. Fue preceptor del príncipe Felipe, sobrino del cardenal Marco Antonio Colonna. Como socio de varias cofradías se ejercitó en obras de caridad, especialmente en la enseñanza de la doctrina cristiana, que le mereció ser llamado «el mayor catequista de Roma».
En 1597 fundó en el Transtíber una escuela elemental, «la primera escuela pública, popular y gratuita de Europa», según Von Pastor. Abandonó ya toda otra ocupación, para dedicarse totalmente a los niños, abrir escuelas y organizar un cuerpo de maestros. En 1617, Paulo V erigió la «Congregación de las Escuelas Pías» y nombró prefecto a Calasanz, quien vistió el hábito religioso el 25-III-1617. Gregorio XV elevó la Congregación en 1621 y le dio el título de «Orden de los Clérigos Regulares Pobres de la Madre de Dios de las Escuelas Pías». Un año después aprobó el mismo papa las Constituciones y nombró a Calasanz general de la Orden. Fue beatificado el 18-VIII-1748 y canonizado el 16-VII-1767. Pío XII le declaró, el 13-VIII-1948, «celestial patrono de todas las escuelas populares cristianas del mundo».
La obra calasancia sacudió por su bondad y oportunidad a la sociedad de su tiempo. La idea del santo, que aparece en su lema Para gloria de Dios y utilidad del prójimo, recoge la doble línea espiritual y social. Sus religiosos fueron y siguen siendo los únicos que profesan en la Iglesia un cuarto voto de dedicación exclusiva a la enseñanza. José de Calasanz buscó, por medio de la educación integral, la felicidad total del hombre, desde la niñez; proclamó que la reforma de la sociedad sólo puede lograrse mediante la cultura y a través de la enseñanza, que calificó como «el ministerio más digno, más noble, más meritorio, más beneficioso, más útil, más necesario, más natural, más razonable, el que merece mayor agradecimiento, el más agradable y el de mayor gloria» (Memorial al cardenal Tonti). Buscó siempre los métodos didácticos más eficaces y modernos y esto le llevó a relacionarse con Bayano, Scioppio, Campanella y Galileo. Fue defensor y difusor de la «ciencia nueva» matemática, organizó definitivamente la escuela primaria graduada, ideó un «bachillerato» de nivel medio y práctico, creó las primeras normales y ejercitó el método preventivo, que dos siglos más tarde desarrollaría don Bosco. Todas sus ideas e intuiciones quedaron plasmadas en sus colegios, siempre gratuitos y abiertos sin distinción a jóvenes de toda raza, credo y clase social. Si tuvo alguna debilidad, fue la de querer más a los más necesitados.
En menos de cuarenta años, las Escuelas Pías servían a Europa con unos 500 religiosos maestros en 40 colegios. El marqués de Ariza las reclamó para sus tierras en 1614, y en 1648 las pedía para sus ciudades el Consejo Real del Reino de Aragón. Hoy están extendidas por Europa, Asia, África y América. En todas las ciudades donde hay Escuelas Pías cuenta el santo aragonés con algún monumento. Pero nadie ha sabido captarle e inmortalizarle mejor que Goya en La última comunión de San José de Calasanz.
Obras
• Documentum princeps de la pedagogía calasancia (1610)
• Sesenta sentencias espirituales (1617-18)
• Memorial al cardenal Tonti (1621)
• Constituciones de las Escuelas Pías (1622)
• Corona de las Doce Estrellas (1623)
• Constituciones del colegio Nazareno (1630)
• Narración y progreso de las Escuelas Pías del año 1600 al de 1634
• Declaraciones a las Constituciones (1637)
• Epistolario (9 vols., editados en Roma, 1950-56)
Y una larga serie de escritos menores: libros de cuentas, profesiones, memoriales, patentes, entre los que destacan las Instrucciones para los maestros, la Prerrogativa de la Ciudad de Zaragoza, las Cualidades del buen religioso, Tres piadosos ejercicios y el pequeño catecismo titulado Algunos misterios de la Vida y Pasión de Cristo Señor Nuestro.
Bibliografía
Bau, C.: Biografía crítica de San José de Calasanz; Madrid, 1949. Caballero, V.: Orientaciones pedagógicas de San José de Calasanz; Madrid, 1945. Cueva, D.: Calasanz. Mensaje espiritual y pedagógico; Madrid, 1973. Giner, S.: El proceso de beatificación de San José de Calasanz; Madrid, 1973. Poch, J.: Ensayos especializados sobre el período español del santo en Analecta Calasanctiana, 1959-79. Santha, J.: San José de Calasanz. Su obra. Escritos; Madrid 1956. Varios: Escuelas Pías. Ser e historia; Salamanca, 1978. Varios: Cartas selectas de San José de Calasanz; 2 vols., Salamanca, 1977. Vilá Palá, C.: Fuentes inmediatas de la pedagogía calasancia; Madrid, 1960.
Fuentes
- Artículo sobre San José de Calasanz publicado en la Gran Enciclopedia Aragonesa. Consultado el 09 de Mayo 2018. (Licencia Creative Commons)
