Solvencia económica

Solvencia económica
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Solvencia económica. La solvencia económica es básicamente la capacidad que tiene una persona de atender las obligaciones adquiridas. También se puede decir que es el respaldo con el que cuenta para atender sus necesidades, por ejemplo, su salario o alguna renta.

Qué es solvencia económica

La solvencia económica hace referencia a la capacidad para hacer frente a las obligaciones contraídas como, por ejemplo, el poder pagar una vivienda, unas facturas, un auto o cualquier otra cosa. En otras palabras, se refiere a la capacidad de pago para cumplir con las obligaciones pertinentes.

Las personas que tienen solvencia económica suelen contar con el dinero suficiente como para hacer frente a sus compromisos o deudas diarias o mensuales.

En definitiva, un individuo se considera solvente cuando puede pagar; mientras que si no puede la persona se considera insolvente.

Esto se puede traducir a las empresas o entidades también. En este caso, la solvencia económica se basa de dos factores fundamentales que son la solvencia técnica y la efectiva:

La solvencia técnica es aquella que la empresa posee cuando tiene la capacidad de generar con su propia actividad la autofinanciación suficiente para poder hacer frente a sus deudas.

La solvencia efectiva es cuando la empresa o entidad no es capaz de hacer frente a sus deudas con la tesorería generada por la propia actividad. Por lo tanto, para poder hacer frente a sus deudas necesita vender activos o conseguir financiación adicional. De esta manera, conseguirá ser solvente de forma efectiva, pero no técnica. Es decir, será solvente a corto plazo, aunque a largo plazo no. La solvencia efectiva solo es efectiva en la puntualidad de pago.

¿Por qué es importante la solvencia económica?

Uno de los beneficios de la solvencia económica, o también conocida como solvencia financiera, es que el disponer de ella te hará la vida más fácil en el momento de solicitar un préstamo. Piensa que, a mayor solvencia, más alto es el préstamo que puedes pedir.

“Si tienes unos ingresos o recursos elevados, estarás garantizando el pago del dinero que te presten. De esta manera, los bancos o entidades prestamistas confiarán más en ti, ya que dispones de más capacidad de pago.”

Por eso, en general las posibilidades de aprobación de la solicitud de un préstamo son mayores si se lleva unos meses cobrando un salario elevado o teniendo unas buenas fuentes de ingresos.

Es por eso que, para demostrar que tienes solvencia económica suficiente, tienes que presentar un comprobante de ingresos en la mayoría de los casos.

Además, la situación familiar también se tomará en cuenta, ya que de una forma indirecta también puede afectar a la capacidad de reembolso. Por ejemplo, si tienes muchos hijos, las posibilidades de conseguir un préstamo van a bajar, ya que no dispondrás de tanta solvencia financiera. En cambio, si no tienes hijos, las posibilidades serán más altas porque en principio el dinero o solvencia que dispones es solo para ti.

¡Solvencia y liquidez!

En muchos casos estos dos términos van de la mano, pero son distintos. Las diferencias entre solvencia y liquidez vienen relacionadas con la seguridad financiera de un individuo o una empresa.

La liquidez es la cualidad que tienen los activos financieros en convertirse en dinero. En otras palabras, significa hacer frente a los compromisos de pago más inmediatos en un momento oportuno.

En cambio, la solvencia es la capacidad que tiene un individuo o empresa para realizar sus pagos y así cumplir con sus deudas financieras. Es decir, hay que contar con los recursos suficientes como ayuda o respaldo para poder cumplir con las obligaciones que tiene el individuo o la empresa.

Tipos de solvencia

Solvencia técnica: acreditación de la experiencia previa, o sea, que, si eres abogado, justifiques que has ejercido como abogado en los últimos 3 años y no como agente inmobiliario (por ejemplo), aunque tengas la titulación de derecho…

Solvencia económica: acreditación de los medios económicos y financieros. Si tienes un pequeño bufete y estás moviendo al año unos pocos miles de euros, no podrás presentarte a concursos de cientos de miles… a no ser que vayas en Unión Temporal con otro despacho o que tomes prestada la solvencia económica de éste mediante adscripción de medios externos…necesitarías un Hermano Mayor que te acompañe.

Las solvencias están reguladas en la Ley y existen varias formas bien definidas para acreditarlas, pero no infinitas y arbitrarias.

Fuentes de solvencia

Las bases de la solvencia son principalmente los activos y el patrimonio es decir, la demostración clara de donde provienen los ingresos y que bienes son susceptibles de vender para generar liquidez.

Un manejo adecuado de la deuda y unas garantías reales que respalden las operaciones crediticias se convierten en los mejores indicadores de solvencia.

Beneficios

En la medida que usted pueda demostrar mayor solvencia, se le va a facilitar el acceso a créditos de mayor cuantía y a su vez garantizar el pago cumplido de las obligaciones ya adquiridas. Tener solvencia seguramente le permitirá negociar tasas de financiación, cuotas de manejo, costos asociados y obtener algunas ventajas de los bancos al momento de solicitar un producto o servicio.

Tipos de insolvencia

Tener solvencia económica o solvencia financiera es muy importante para ciertos momentos como, por ejemplo, el momento de pedir un préstamo.

“Desgraciadamente hay algunos momentos en los que no se cuenta con la solvencia necesaria y se incurre en la insolvencia.”

Hemos dividido la insolvencia en dos tipos (según su temporalidad):

Insolvencia económica permanente

Podemos decir que este es uno de los peores escenarios en que te puedes encontrar. Lo primero que debes hacer en este caso es reconocer que tienes un problema. Para que estés tranquilo, todo tiene solución. La base del problema es el siguiente: en tu balance de ingresos y gastos, hay algo que no funciona. Esto hace que los segundos sean superiores a los primeros. Al ser un problema de dos caras, se puede solucionar por las dos vías.

“Por un lado, mírate bien los gastos. Todos los gastos. Seguramente que habrá algunos que no se pueden tocar como son los relacionados con los suministros de la casa. En cambio, hay otros que sí puedes tocar porque son prescindibles.”

Para reducir el total de lo que gastas tienes que empezar a prescindir de aquellos que no son tan importantes. Si en el futuro mejora tu solvencia, podrás volver a disfrutar de los caprichos que te sacaste en el pasado.

Por otro lado, también puedes tratar de incrementar tus ingresos. Una solución es ampliar tu formación y buscar un nuevo puesto de trabajo que te aporte más ingresos. O si crees que tienes bastante tiempo libre, puedes buscar un trabajo de unas horas más para que te aporte los beneficios que te falten para conseguir la solvencia necesaria.

Insolvencia económica temporal

La Insolvencia económica temporal es mejor situación que la Insolvencia económica permanente, pero tampoco es buena y recomendable encontrarse en ella.

Hay muchas soluciones que te pueden ayudar a salir de este problema. Por ejemplo, una son los préstamos inmediatos, donde puedes pedir cantidades de dinero bajas para poder salir del bache.

“Otra opción es vender algún objeto o producto que tengas para así poder conseguir dinero rápido y solventar la insolvencia.”

Dependiendo de cuál es el gasto que te provoca la insolvencia, existen otras soluciones. Si tienes una factura alta, puedes negociar para que te fraccionen la deuda. Si hay intereses o costes adicionales, también lo tendrás que negociar.

Hay otras opciones, por ejemplo, puedes sacar el dinero de alguna cuenta de ahorros que tengas, o también pedir dinero a familia o amigos.

¿Cómo demostrar solvencia económica?

Si necesitas demostrar tu solvencia económica, utiliza el certificado de solvencia económica. Este es un documento que lo puedes redactar por ti mismo. En este se apuntan cuáles son los ingresos económicos y/o los bienes personales. Algunas entidades prestamistas solicitan esta carta, además de embajadas.

“El certificado de solvencia económica se utiliza en el momento de solicitar un producto financiero. También se puede usar para solicitar una visa de trabajo en el extranjero.”

¿Qué es la solvencia económica de una empresa?

La solvencia de una empresa es un indicador que se aprecia en los informes contables. Este tiene relación con la cantidad de activos de una entidad, y de qué forma compensan los pasivos. El tener un buen balance entre esos permite a la empresa afrontar cualquier obligación sin importar el plazo.

Las condiciones de solvencia económica permiten al órgano de contratación asegurarse que puede confiar que la empresa que resulte adjudicataria va a terminar el servicio o suministro, están reguladas y tienen límites. No obstante, no se piden siempre, existen muchas licitaciones que eximen de justificar solvencia económica a los licitadores. Cada vez más y sobre todo en importes pequeños. Como te decimos siempre: No tienes excusa para no licitar.

¿Cómo acredita la solvencia una empresa?

La solvencia de una empresa se puede medir:

• El volumen de negocios (las ventas)

• El patrimonio neto de la sociedad

• Un informe del pago de impuestos

Cómo se puede mejorar la solvencia económica

A continuación, una serie de consejos que debes seguir si quieres tener una buena solvencia económica. Estos son:

• Mantén el equilibrio entre lo que ganas y lo que gastas. Paga siempre a tiempo todas las deudas en plazos realistas. No intentes pagar antes si no puedes. Tampoco dejes que pase más tiempo del necesario, ya que si no los intereses serán más altos y pagarás más.

• Crea un colchón para así aumentar la solvencia. Este colchón sirve como seguro para el futuro. Es verdad que el futuro es incierto, o sea que nunca sabes lo que puede llegar a pasar. Es por eso que el tener el colchón económico te puede llevar cierta tranquilidad.

• Con el objetivo de tener una buena solvencia financiera y económica tienes que ser precavido. Eso significa que debes evaluar los meses en que vas mejor y los otros en que flaqueas un poco. La idea es que logres sacar un mayor porcentaje de los grandes ingresos para las épocas más duras. Así siempre gozarás de buena liquidez.

• Es importante crear hábitos saludables. Analiza lo que haces en tu día a día y piensa qué hábitos son saludables o no. Si encuentras hábitos que no lo son, los puedes sustituir practicando deporte o disfrutando de tu tiempo libre con actividades más beneficiosas para la salud.

• Establece metas para ganar más solvencia. Este puede ser un plan para mejorar tus finanzas personales, por ejemplo. La idea aquí es que vayas ganando más solvencia a medida que pasa el tiempo.

Fuentes

Solvencia económica, ¿qué es?

¿Por qué es importante la solvencia económica para endeudarse?

Solvencia económica y financiera ¿Qué es? ¿Cómo acreditarla?