Valle del Cibao (República Dominicana)

Valle de Cibao Occidental
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Región de la República Dominicana
EntidadRegión
 • PaísBandera de la República Dominicana República Dominicana
Población 
 • TotalHasta 2 017  4 046 032 hab, hab.
Valle del cibao.jpg

El Valle del Cibao Occidental es avenado por el sistema hidrográfico del Río Yaque del Norte, que lo recorre longitudinalmente hasta desaguar en el océano Atlántico, después de formar un extenso delta próximo a la desembocadura. Es tal la importancia del Río Yaque del Norte y sus tributarios en esta región que a este valle se le conoce también como Valle del Yaque del Norte.

En tiempos geológicos, luego de que ocurriera el levantamiento de tierras durante el Mioceno, al este - sudeste de Santiago, que dividió el antiguo canal marino en dos, quedó en el lado occidental un golfo de poco profundidad, el "Golfo Yaquensis". Este golfo fue rellenado por los sedimentos que bajaban principalmente de la Cordillera Central, hasta rellenarlo completamente.

Límites

Está limitado al Norte por la Cordillera Septentrional (Sierra de Montecristi), al Sur por la Cordillera Central (Sierra del Cibao), al Oeste por el océano Atlántico y Haití y al Este por las pequeñas elevaciones que lo separan del Valle Oriental.

Regiones

Es posible dividir esta región en tres sub-regiones, tomando en cuenta principalmente las condiciones de lluvia:

La primera, que va desde Santiago hasta, aproximadamente, Esperanza y Mao, con una precipitación anual comprendida entre 750 mm y 1000 mm. La zona de vida es Bosque seco Subtropical (Bs-S) aunque ya en las proximidades de Santiago se observa el bosque seco de transición a bosque húmedo subtropical. La línea entre los bosques secos y húmedos se ha ido desplazándose hacia el Este y ya se puede encontrar a mitad de camino entre Santiago y La Vega. Es la zona más poblada de toda la Línea Noroeste, incluyendo las ciudades (de este a oeste) Santiago de los Caballeros, Villa Bisonó, Villa González (Navarrete), Esperanza y Mao.

La segunda sub-región, al Oeste de Esperanza y Mao, presenta una precipitación anual menor de 750 mm. Dentro de esta sub-región se encuentra la "elipse de la seca", que es la elipse dentro de la cual la precipitación media anual es menor de 600 mm, o sea, una de las más escasas del país, y cuyo centro se localiza aproximadamente en Villa Vásquez. La zona de vida de esta región es el Bosque seco Subtropical (Bs-S). Es la sub-región menos habitada de la Línea Noroeste (anteriormente le llamaban El Desolado), siendo los principales centros urbanos Monte Cristi, Villa Vásquez y Guayubín.

Por último, tenemos la sub-región que podríamos llamar pre-montana, localizada al sur de la Sierra de Zamba y en el pie de monte norte de la Cordillera Central. Generalmente su pluviometría es mayor de 1000 mm al año y su zona de vida predominante es el Bosque húmedo Subtropical (Bh-S), aunque también es frecuente el bosque seco de transición a bosque húmedo subtropical, especialmente en los alrededores de Sabaneta, con una alta población de cana (Sabal causiarum = Sabal umbraculifera) y guanos (Coccothrinax spp.). Las principales poblaciones son Dajabón y Sabaneta (Santiago Rodríguez).

Aunque no pertenecen realmente a la Línea Noroeste, por tradición y geopolítica se incluyen otras poblaciones, tales como Monción y Loma de Cabrera, que realmente se localizan en la Sierra del Cibao (Cordillera Central).

En todo el Valle Occidental del Cibao, especialmente en la porción occidental de la sub-región pre-montana, las sabanas son comunes (sabana es una extensión de tierra cuya vegetación está formada por gramíneas y con pocos árboles). Estas sabanas están separadas unas de otras por ríos y/o pequeñas colinas arboladas (por lo menos en tiempos anteriores). Algunas de ellas son, y tomando el camino de Dajabón hacia Guayubín: Santiago, Jácuba, Larga, Talanquera, Escalante, Canoa, La Antona. En casi todas ellas se celebraron batallas durante la Guerra Domínico-Haitiana y durante la Restauración.

Hidrología

La hidrología del Valle Occidental del Cibao está dominada por el río Yaque del Norte y sus tributarios. El Yaque del Norte, al entrar al Valle del Cibao, gira hacia el Noroeste y atraviesa todo la Línea Noroeste, desembocando en la Bahía de Montecristi. Sus tributarios principales provienen de la Cordillera Central y apenas unos pocos arroyos y cañadas se originan en la Cordillera Septentrional.

Los principales afluentes del Yaque del Norte, mientras transcurre por la Línea Noroeste, son, de este a oeste:

Río Ámina, de 74 km. Se une al Yaque del Norte al sudoeste de Esperanza. Sus principales tributarios son el Inoa y el Guanajuma.

Río Mao, de 105 km., siendo el más largo de los afluentes del Yaque del Norte, al cual se une cerca de la ciudad de Mao.

Río Guayubín, que los franceses llamaban "Rebouc" durante los siglos 17 y 18. Tiene una longitud de 76 km. y se une al Yaque del Norte cerca de la ciudad de Guayubín, donde hay una pequeña laguna paralela al río.

Río Maguaca, que se une al Yaque del Norte cerca del poblado de Castañuelas.

Además de la cuenca del río Yaque del Norte, en esta región se encuentra la cuenca del río Dajabón o Masacre, el cual constituye la frontera norte con Haití. Este río, de 55 km. de longitud, nace en el Pico del Gallo y desemboca en la Bahía de Manzanillo.

El Valle del Cibao es una región diferenciada fisiográficamente, con diversos factores del medio físico. Además de sus áreas aledañas, existen 31 zonas relativamente homogéneas que permiten ubicar cultivos agrícolas adaptables.

Este valle se extiende desde la Bahía de Samaná hasta Manzanillo en Monte Cristi, tiene una longitud de 225 kilómetros, con anchuras entre 10 y 45 kilómetros, estrechándose en Santiago y ampliándose entre La Vega, Cotuí y San Francisco de Macorís, continuando en Haití con el nombre de Llanura del Norte.

Los suelos del Valle del Cibao son los de mayor importancia agrícola del país, siendo diferentes en clima e hidrología en ambas subregiones (oriental y occidental).

Sin embargo, los suelos de las cordilleras Septentrional y Central son diferentes a los de las llanuras. Estos suelos de las cordilleras son poco profundos, afectados por rocas, de topografía accidentada y erosionables, lo que limita su capacidad agrícola. Son suelos para la explotación forestal.

Contaminación del agua

La aplicación inapropiada de fertilizantes, pesticidas y herbicidas en la agricultura intensiva, así como los desperdicios de animales en la avicultura y la pecuaria, son fuentes de contaminación del agua. Altos contenidos de sales y nutrientes como el fósforo, nitrógeno, hierro y otros en el agua, están asociados con drenajes de zonas agrícolas y re-uso del agua de riego.

El consumo humano de agua contaminada tiene efectos negativos para la salud. El agua contaminada llega a la población al ser tomada directamente de las fuentes originales, como ríos y pozos, al ser servidas sin tratamientos suficientes por los acueductos, o al hacer un manejo inadecuado en los hogares como el almacenamiento en recipientes y envases contaminados, en tanques oxidados y en cisternas sin oxigenación.

Las enfermedades más documentadas asociadas con la contaminación del agua incluyen las diarréicas, fiebre tifoidea, enfermedades del “niño azul” y enfermedades ocasionadas por alto contenido de plomo y otros elementos tóxicos en el agua al ser injerida por niños y mujeres embarazadas.

El consumo de alimentos crudos principalmente vegetales, irrigados con agua contaminada, produce enfermedades estomacales e intestinales, registradas en aumento en el país. Por ejemplo, la Amebiasis, por lo que se debe tener bajo consideración la producción de vegetales, siendo siempre vigilantes de la calidad del agua, en su cultivo y manejo postcosecha.

Otros elementos

El crecimiento poblacional junto a la construcción de viviendas sin planificación, ocasiona contaminación de las aguas superficiales y subterráneas en el Valle del Cibao, debido al no tratamiento de las aguas residuales proveniente de las viviendas, restaurantes, hoteles, y por el uso de sumideros y letrinas.

Estas aguas superficiales y subterráneas que son utilizadas en muchos acueductos de importancia, reciben en ocasiones afluentes sin el debido tratamiento de potabilización y de conducción final hacia los hogares.

Ríos, playas y otras fuentes acuíferas en las cuales se desarrollan actividades de recreación y de piscicultura reciben estas aguas contaminadas por las diferentes acciones descritas con resultados negativos.

Crecimiento urbano

Santiago de Los Caballeros es la ciudad principal del Cibao, con una población en el año 2002 de 622,100 habitantes. Esta provincia no escapa al manejo inadecuado de las construcciones, empujadas por un aumento poblacional en crecimiento, sin un ordenamiento territorial basado en el uso del suelo, con formación geológica, topografía e incidencia de fenómenos meteorológicos y telúricos.

El crecimiento urbanístico de Santiago hacia la cordillera Septentrional debe de ser bien analizado. Esta cordillera posee estructuras de suelos en los cuales con frecuencia ocurren deslizamientos y agrietamientos con pérdidas humanas y materiales significativas.

Los planes de desarrollo de todas las provincias que integran el Valle del Cibao deben de ser elaborados y actualizados, si existen en cada municipio, siguiendo las leyes y normas establecidas y en coordinación con las secretarías de Estado de Agricultura, de Medio Ambiente y Recursos Naturales, de Obras Publicas y Comunicaciones y las organizaciones comunitarias involucradas. El avance en las construcciones físicas debe tener como objetivo principal el no deterioro de los recursos suelo-agua-aire.

La conservación de los recursos naturales garantiza un desarrollo sostenido en armonía, libre de contaminación y rico en fuentes para la vida humana. La Federación de Municipios y la Secretaría de Trabajo crearán una estrategia para la creación de empleos en los municipios, zonas donde se vive principalmente de la agricultura. Aunque los bancos ofrecen tasas entre 10% y 12% para préstamos hipotecarios nuevos, los vigentes no han bajado de 16.5% anual.

Fuentes

1. [1] 2. [2]