Virgen del Patrocinio

Virgen del Patrocinio
Información sobre la plantilla
La Caridad del Cobre.jpg
Religión o MitologíaCatólica
SincretismoOshún u Ochún
Día celebración8 de septiembre
Patrón(a) o Dios(a) dePatrona de Cuba
País o región de origenBandera de Cuba Cuba
Venerado enCuba

Nuestra Señora del Patrocinio. Es el título de una advocación mariana que se vincula a la intercesión que la Virgen María ejerce sobre sus devotos como amparo, protección y auxilio, y resaltando una de las características más humanas de la función de la figura de la madre. No existen unos rasgos específicos que hayan generado una iconografía propia que uniesen el nombre a un tipo concreto de imagen. Esto ha permitido que en algunas comunidades locales pudieran conceder el título del Patrocinio a una determinada imagen de gran devoción cambiando su nombre antiguo por éste.

Historia

Durante el movimiento de fervor inmaculista que tanto conmocionó a España —villas, ciudades y corte, pueblo sencillo, élites ilustradas y clero—, en buena parte del siglo XVII, es donde surge la aparición de una nueva advocación para la Virgen, por la piedad y devoción del monarca y España es la que consigue el título del Patrocinio para reconocer auxilio de María.

Felipe IV estando sinceramente agradecido de los favores que por medio de la Virgen había recibido quiso poner los territorios de la corona bajo el patrocinio de María, y Alejando VII accedió a la petición del monarca:

«[...]como el mismo Felipe (según nos hizo saber) desee en gran manera para dar gracias a la Virgen María, madre de Dios, por muchísimos beneficios que con piadoso afecto confiesa haber recibido de su mano, que en todos los reinos de España se celebre cada año en alguna de las domínicas de Noviembre una fiesta particular que ha de llamarse del Patrocinio de la bienaventurada Virgen María; nosotros, alabando muchísimo en el Señor el piadoso intento del mismo rey Felipe[...] concedemos y otorgamos a los amados hijos, clero secular y regular de los dichos reinos de España, que en alguna domínica del mes de Noviembre que ha de señalar el Ordinario, puedan celebrar todos los años fiesta del Patrocinio de la bienaventurada Virgen María[...] movidos de piadosa caridad, concédenos misericordiosamente en el Señor indulgencia plenaria[...] Dado en Roma, en Santa María la Mayor, bajo el anillo del Pescador, el día 28 de julio de 1656»[1].

Por una Cédula Real se comunicó el Breve pontificio y algunos detalles generales de la celebración que anualmente se debía hacer:

«El Rey. En la devoción que en todos mis Reinos se tiene a la Virgen Santísima, y en particular con que yo acudo en mis necesidades a implorar su auxilio, cabe mi confianza de que en los aprietos mayores ha de ser nuestro amparo y defensa; y en demostración de mi afecto y devoción, he resuelto que en todos mis Reinos se reciba por Patrona y Protectora, señalando un día, el que pareciere, para que en todas las ciudades, villas y lugares de ellos se hagan novenarios, habiendo todos los días Misas solemnes con sermones, de manera que sea con toda festividad, y asistiendo mis Virreyes y gobernadores y Ministros, por lo menos un día, haciéndose procesiones generales en todas partes, con las imágenes de mayor devoción de los lugares, para que con gran solemnidad y conmoción del pueblo se celebre esta fiesta.»[2]

Aún siendo una advocación reducida, en las fechas próximas al Breve pontificio y a la Real Cédula, por diversos lugares de España y América se extendió el título del Patrocinio a imágenes ya existentes que cambiaron de titulación y se erigieron en patronas de villas y pueblos.

Advocación mariana

Una advocación mariana es una alusión mística relativa a apariciones, dones o atributos de la Virgen María. La Iglesia católica reconoce innumerables advocaciones en torno a la figura de la madre de Jesús, a las cuales se rinde culto de diversas maneras.

De acuerdo con la doctrina de la Iglesia católica, las advocaciones que se dirigen a María son única y exclusivamente modos de llamarla desde el punto de vista bíblico relacionados a ella, acciones, lugares o mensajes que la identifican, nada más. Aclarando con ello que solo hay una Virgen María, siendo además estos representados a través de la pintura, arte y escultura pictórico religioso.

Tipos de advocaciones

Existen dos tipos de advocaciones: las de carácter místico, relativas a dones, misterios, actos sobrenaturales o fenómenos taumatúrgicos de la Virgen, como Anunciación, Asunción, Presentación, etc; y las apariciones terrenales, que en muchos casos han dado lugar a la construcción de santuarios dedicados a la Virgen, como a la del Pilar (en Zaragoza, España) o la de Lourdes (en Lourdes, Francia), a la de Fátima (en Fátima, Portugal), Virgen de Guadalupe en México, la Virgen Divina Pastora en (Barquisimeto, Venezuela), la Virgen de Coromoto (Guanare, Portuguesa, Venezuela), la Virgen de la Caridad del Cobre (Cuba).

Referencias

  1. Bullarum Diplomatum et Privilegiorum Sanctorum Romanorum Pontificum. Auguste Taurinorum MDCCCLXIX, t. XVI, p. 199-200 (Alexander VII).
  2. Texto tomado de, Fuente: Vida de la Virgen María: con la historia de su culto, México 1883, pp. 516-517.

Fuentes