Zona de Santa Catalina
| Zona de Santa Catalina | |
|---|---|
  Nombre descrito en la Lista del Patrimonio de la Humanidad. | |
 El Monasterio de Santa Catalina | |
| Coordenadas | 28°33′22.428″N 33°58′31.548″E |
| País |  Egipto |
| Tipo | Cultural |
| Criterios | i, iii, iv, vi |
| N.° identificación | 954 |
| Región | Países árabes |
| Año de inscripción | 2002 (XXVI sesión) |
La Zona de Santa Catalina incluye el llamado Parque Nacional de Santa Catalina, que ocupa una gran parte de la región centro sur del Sinaí. Incluye Gebel Moussa, Gebel Katharina, Gebel Adir, Gebel Baab y Gebel Tarbush. El monasterio ortodoxo de Santa Catalina se encuentra dentro del Parque Nacional, a los pies del monte Horeb, donde según los registros del Antiguo Testamento, Moisés recibió las Tablas de la Ley. La montaña es conocida y venerada por los musulmanes como Jebel Musa. Toda la zona es sagrada para tres religiones del mundo: el cristianismo, el islam y el judaísmo. El monasterio cristiano, fundado en el siglo VI, es el más antiguo todavía en uso para su función inicial. Sus paredes y edificios son de gran significación para los estudios de la arquitectura bizantina, así como las colecciones sobresalientes de manuscritos e iconos cristianos primitivos. El paisaje montañoso y accidentado, que contiene numerosos sitios y monumentos arqueológicos y religiosos, forma un telón de fondo perfecto para el monasterio. Esta área fue incluida en la lista de sitios Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en el año 2002.
Descripción
El Monasticismo ascético en zonas remotas se impuso en la iglesia cristiana primitiva y dio lugar a la creación de comunidades monásticas en lugares remotos. El Monasterio de Santa Catalina es uno de los primeros de ellos, y el más antiguo que ha sobrevivido intacto, después de haber sido utilizado para su función inicial sin interrupción desde el siglo VI. Demuestra una relación íntima entre la grandeza natural y compromiso espiritual.
Con la destrucción de Petra por los romanos, los sobrevivientes se convirtieron en nómadas. La región del Sinaí, conocida por los romanos como Palestina Tertia, se convirtió en un desierto salvaje, y como tal atrajo al principio anacoretas cristianos. Tras la marcha de los romanos en la segunda mitad del siglo IV, la anarquía general finalmente llevó a las comunidades monásticas a buscar ayuda. Esta fue suministrada por el emperador bizantino Justiniano I, que envió equipos de arquitectos y albañiles para construir una fortaleza por debajo de la eminencia rocosa identificada por los monjes como el Monte Sinaí, con el doble objetivo de proteger a la comunidad y asegurar el camino de Aqaba a Suez.
El Monte Sinaí es identificado por los musulmanes como el Monte de Moisés (de ahí su nombre árabe, Jebel Musa / Gabbal Moussa), y para ellos, como para los cristianos, este es el lugar donde Dios hizo un pacto con su pueblo, al dictar las Tablas de la Ley a Moisés. La iglesia principal de la Transfiguración, fue construida alrededor del año 560, justo por la época de la muerte de Justiniano. Su primera dedicación fue a la Virgen María, pero esto fue más tarde cambiado a la mártir Santa Catalina a mediados del siglo III, cuya cabeza y mano se conservan como reliquias en la iglesia. Las comunidades cristianas del Monasterio de Santa Catalina siempre han mantenido estrechas relaciones con el Islam. En 623 un documento firmado por el Profeta mismo, conocido como el Actiname (Santo Testamento), eximió a los monjes de Santa Catalina del servicio militar y de impuestos, y llamó a los musulmanes a darles toda la ayuda. Como un gesto de reciprocidad a la comunidad monástica permite la conversión de una capilla a una mezquita durante el califato fatimí (909-1171).
El complejo del monasterio está completamente rodeado por un muro macizo. Está construido con sillares de granito vestidos; sin embargo, las secciones superiores fueron restauradas por orden de Napoleón, utilizando, bloques de piedra más pequeños desnudos. La pared está decorada en lugares con símbolos cristianos tallados, como cruces, monogramas, etc La estructura principal dentro del recinto es la Iglesia de la Transfiguración, que es obra del arquitecto bizantino Stephanos; está construida en granito, en forma basilical, con una amplia nave central, dos laterales definidos por columnas graníticas con capiteles compuestos de símbolos cristianos, un ábside y un nártex. Cada una de las naves laterales tiene tres capillas, y hay uno a cada lado del ábside.
Detrás del ábside está la parte más sagrada del monasterio, la capilla de la zarza ardiente, que se incorpora a la capilla del siglo IV construida por la piadosa emperatriz Elena, madre de Constantino el Grande, y dedicada a la Santísima Virgen María. El campanario neoclásico es obra del monje Gregorius y fue construido en 1871. El antiguo refectorio rectangular tiene murales del siglo XVI en las paredes. Aquí se encuentra la biblioteca más antigua en el mundo cristiano, considerada sólo superada por la del Vaticano, tanto en términos de números, así como el valor de su colección.
La mezquita fatimí, en el sitio de una pequeña capilla cruzada, fue construida entre 1101 y 1106. Es de planta rectangular, con un pequeño minarete adosado en la esquina norte y un pequeño patio en la parte delantera, que forma el techo del pozo restaurado de la antigua prensa de oliva y el molino. Un suministro constante de agua fresca es proporcionado por la Fuente de Moisés, que se nutre de un manantial subterráneo. Las celdas de los monjes se disponen a lo largo de las caras internas de las paredes. Fuera de los muros está el jardín triangular del monasterio, creado durante muchos años por los monjes, que trajeron el suelo aquí y hacen tanques para almacenar agua para el riego. Al lado del jardín están el cementerio y osario.
Justificación para la inscripción
- Criterio (i): La arquitectura del monasterio de Santa Catalina, los tesoros artísticos que alberga, y su integración interna en un paisaje agreste se combinan para hacer que sea un ejemplo excepcional del genio creativo humano.
- Criterio (iii): El Monasterio de Santa Catalina es uno de los ejemplos más tempranos de la tradición oriental de un asentamiento monástico cristiano situado en una zona remota. Demuestra una relación íntima entre la grandeza natural y compromiso espiritual.
- Criterio (iv): El monacato ascética en zonas remotas se impuso en la iglesia cristiana primitiva y dio lugar a la creación de comunidades monásticas en lugares remotos. El Monasterio de Santa Catalina es uno de los primeros de estos y el más antiguo que ha sobrevivido intacto, siendo utilizado para su función inicial sin interrupción desde el siglo VI.
- Criterio (vi): La zona de Santa Catalina, se centró en el santo monte de Monte Sinaí (Gebel Musa, el Monte Horeb); al igual que la ciudad vieja de Jerusalén, es sagrado para tres religiones mundiales: el cristianismo, el islam y el judaísmo.
