Capilla Sixtina
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La Capilla Sixtina. Su nombre viene dado por el Papa que llevó a cabo el proyecto de construcción: Sixto IV. Forma parte de un conjunto histórico y artístico muy importante, no sólo en Italia sino en Europa, realizado por Giovannino de´ Dolci. En un principio estuvo dedicado a la celebración de ceremonias solemnes y cónclaves que tuvieron relevancia, aunque la mayor importancia y fama viene dada por la magnitud de los frescos que posee, la mayoría pintados por Miguel Ángel Buonarroti.
Sumario
Ubicación y estructura
Se halla en un edificio situado en la esquina suroeste del núcleo medieval del Palacio Pontificio. Antes se encontraba en este lugar un oratorio probablemente del siglo XIII, quizás de la época de Nicolás III, del cual quedan sólo unas pocas menciones en los documentos.
La Capilla Sixtina presenta una estructura muy sencilla. El aula rectangular, sin ábside, mide 40, 23 m de largo por 13, 41 m de ancho y tiene una altura de 20, 70 m. Está cubierta por una bóveda de cañón, con bovedillas laterales de descarga que corresponden a las 12 ventanas cimbradas que dejan pasar la luz. El piso lleva incrustaciones polícromas de mármol. Una barandilla de mármol con rejas separa la zona del presbiterio, reservada al clero oficiante, de la zona destinada a los fieles. En el s. XVI se colocó más atrás para ampliar el presbiterio y en un principio empalmaba con el coro. Ambas obras están adornadas con delicados relieves.
Historia
La decoración primera de la Capilla Sixtina, con episodios de la vida de Moisés y de Cristo, y con retratos de los papas, fue realizada por un grupo de pintores formado en un principio por Perugino, Sandro Botticelli, Domenico Ghirlandaio y Cosimo Rosselli, ayudados por sus respectivos talleres, a los que pertenecían, entre otros Piero di Cosimo, Bartolomeo della Gatta y Luca Signorelli. Estos últimos realizaron los dos últimos frescos de la serie de Moisés. En la bóveda, Pier Matteo d´Amelia pintó un sencillo cielo estrellado. Los trabajos comenzaron en 1481 y terminaron en 1482. El 15 de agosto de 1483 Sixto IV, consagró la nueva capilla dedicada a la Asunción de María. Perugino fue el autor de la pintura de la Asunción, que se perdió, y de los dos primeros recuadros del ciclo de Moisés y del ciclo de Cristo, que Miguel Angel borró para pintar el Juicio Final. De Perugino se encontró sólo la firma.
Los tres papas que sucedieron a Sixto IV dejaron la capilla tal como la habían encontrado. Julio II della Rovere, sobrino de Sixto IV, resolvió, en cambio, modificar la decoración de la bóveda y, en 1506, comisionó ese trabajo a Miguel Angel Buonarroti, quien trató inúltimente de sustraerse al deseo de Julio II.
Miguel Angel comenzó los trabajos el 10 de mayo de 1508, con la ayuda de algunos colaboradores como Jacopo d´Incaco y Francesco Granacci, a quienes despidió no bien aprendió la técnica de la pintura al fresco, que él nunca había practicado. En octubre de 1512 quedó terminada la bóveda, y el 1 de noviembre, Día de todos los Santos, se inauguró con una misa solemne.
Nuevamente, a fines de 1533, se le encargó a Miguel Angel que transformara la decoración de la Capilla. Esta vez, Clemente VII de Medici pidió al artista que pintara en la pared del altar el Juicio Final. Miguel terminó aceptando el trabajo pero no comenzó a pintar hasta 1935, cuando Pablo III, que había sucedido a Clemente VII, se lo impuso.
En un principio se destruyeron las pinturas del siglo XV de la pared, la cual fue revestida con ladrillos, dándole una leve inclinación. Miguel Angel comenzó a pintar sobre esta superficie completamente solo en el verano de 1536 y terminó la inmensa obra (200 metros cuadrados de área con 391 figuras) en el otoño de 1541. El 31 de octubre de ese mismo año, Pablo III, que había seguido con impaciencia los adelantos del artista, celebra unas vísperas solemnes ante la extraordinaria obra que, como atestigua Giorgio Vasari, ¨llenó de estupor y admiración a toda Roma¨.
Recorrido
Los episodios de la vida de Cristo y Moisés, que cubren las paredes de la capilla, están estrechamente vinculados entre sí. Esto se nota en los tituli (inscripciones en latín) colocados encima de los frescos, que se refieren al episodio principal o a uno secundario. Por consiguiente, una lectura correcta supone una visión conjunta de las historias de Moisés y de Cristo. El programa iconográfico fue establecido sin lugar a dudas por Sixto IV o por un teólogo de su corte con la intención de subrayar la continuidad de la historia de la salvación en el Antiguo y en el Nuevo Testamento.
Viaje de Moisés. Fresco de Perugino. Se representa a Moisés que se despide de su suegro antes de volver a Egipto, el angel enviado para castigar al Profeta por no haber circuncidado a su hijo, la circuncisión. Los dos papas, junto a la ventana, son Clemente I y Evaristo.
Bautismo de Cristo. Fresco de Perugino. Episodio representado en el centro. Aparece a la izquierda el Redentor predicando, y a la derecha el Bautista predicando. Los papas son Anacleto y Alejandro I.
Episodios de la vida de Moisés. Fresco de Botticelli. Moisés mata al egipcio que había maltratado a un israelita, huye de Egipto, defiende a las hijas de Jetró de los pastores y les ayuda a abrevar el rebaño, descalzo se postra ante la zarza ardiente y sale de Egipto a la cabeza de los israelitas. Los papas son Sixto I e Higinio.
Tentaciones de Cristo. Fresco de Botticelli. Están representadas en el fondo. En primer plano la Purificación del leproso. Entre los presentes, varios retratos: con el bastón de mando Girolamo Riario, caudillo del Papa. Los papas son Telésforo y Pío I.
Paso del Mar Rojo. Fresco de Biagio di Antonio. Se representa al pueblo que se reúne gozoso alrededor de Moisés, los egipcios arrollados por las aguas, Moisés y Aarón ante el Faraón. Entre los retratos se reconoce al cardenal Bessarione en la imagen del anciano con el relicario ubicado a la derecha de Moisés; el guerrero vuelto casi de espaldas es Roberto Malatesta. Los papas son Aniceto y Eleuterio.
Vocación de los primeros apóstoles. Fresco de Ghirlandaio. Aparecen de rodillas, delante de Cristo, Pedro y Andrés; su llamamiento y el de Juan y Santiago. Entre los retratos, el de Argirópulo y Giovanni Tornabuoni, tesorero del Papa, con el hijito Lorenzo. Los papas son Sotero y Víctor.
Entrega de las tablas de la Ley. Fresco de Cosimo Rosselli. Aparece ilustrada la entrega, la adoración del becerro de oro, Moisés rompe las tablas de la Ley, el cástigo de los idólatras, el regreso de Moisés con las tablas de la Ley. Los papas son Ceferino y Urbano I.
Sermón de la Montaña. Fresco de Cosimo Rosselli . La escena está en el centro y a su derecha se representa la Curación del leproso. Los papas son Calixto I y Ponciano. Castigo de Coré, Datán y Abirón. Fresco de Botticelli. Además de este episodio, está representado el Intento de lapidar a Moisés, el Arco de Constantino y un pórtico de estilo clásico. Los papas son Antero, de Fra´Diamante, y Cornelio.
Entrega de las llaves. Fresco de Perugino. Jesús, con un gesto simbólico, transmite esta continuidad a Pedro, fundador del Papado. Se representa el Pago del tributo y el Intento de lapidar a Cristo. Se repite dos veces el Arco de Constantino. Entre los retratos, el segundo personaje, partiendo de la derecha, es Giovannino de´Dolci; el tercero, Baccio Pontelli y el quinto, vestido de negro, Virginio Orsini. Los papas son Fabián y Lucio I.
Testamento de Moisés. Fresco de Luca Signorelli y Bartolomeo della Gatta. Representado el Testamento en primer plano, a la derecha. A la izquierda, Moisés entrega el bastón de mando a Josué. En el fondo, el ángel muestra a Moisés la tierra prometida; el Profeta baja del Monte Nebo y la Muerte de Moisés. Los papas son Esteban I y Dionisio.
Última Cena. Fresco de Rosselli y de Biagio di Antonio. Se representa este episodio, la Oración en el huerto, la Captura de Jesús y la Crucifixión. Los papas son Sixto II, de Botticelli, y Félix I.
Disputa por el cuerpo de Moisés, de Matteo di Lecce (1571-1572). Reemplaza la obra maestra de Signorelli. Los papas son Eutiquiano, de Ghirlandaio, y Marcelo I.
Resurrección, de Hendrik van den Broeck (1571-1572). Reemplaza la obra maestra de Ghirlandaio. Los papas son Marcelino y Cayo.
En la parte frontal de la Capilla, en la pared del altar, se encuentra la representación del Juicio Final. La escena está dominada por Cristo, que se encuentra en actitud de juzgar con brazo levantado. Todos los personajes de la obra parecen estar envueltos por un ambiente apocalíptico, que es penetrado por el dramatismo de la muerte y la vida. La bóveda, realizada entre 1508 y 1512, presenta una distribución arquitectónica en la que son adaptados los diferentes personajes de la composición.
En la parte central de la bóveda se encuentran nueve escenas sobre diferentes acontecimientos históricos relatados en la Biblia. Si se hace una exposición cronológica de los hechos, en primer término se ve a Dios separando la luz de las tinieblas, la creación del Sol y los astros, la separación de tierras y aguas, la creación de Adán, la creación de Eva, el pecado original y la expulsión del paraíso terrenal, sacrificio de Noé, el diluvio universal y la ebriedad de Noé. Todas estas escenas se encuentran rodeadas por diferentes figuras desnudas, profetas y sibilas.
A continuación de la capilla se encuentran otras estancias que conforman propiamente el conjunto, unas decoradas por Rafael, y del cual reciben ese nombre. Son un total de cuatro salas: la primera estancia es la llamada Estancia del Incendio del Borgo ya que Rafael Sanzio representó este hecho en la pared situada frente a la ventana. La segunda sala es la de La Signatura, donde se muestran, por medio de tres de sus frescos, lo que ha de considerarse bueno, bello y verdadero. Los frescos que los representan son La Escuela de Atenas, La Disputa del Santísimo Sacramento y El Parnaso. La tercera estancia es llamada de Heliodoro. Aquí podemos ver otros cuatro frescos: León I deteniendo a Atila, Expulsión de Heliodoro del Templo, El milagro de Bolsena y La liberación de San Pedro de la cárcel. La última estancia es la de Constantino y fue decorada toda ella por discípulos de Rafael.
Una vez pasadas estas estancias, se encuentra la Logia de Rafael, unas galerías con arcos realizadas por Bramante y Rafael. La decoración de los arcos está basada en elementos del Antiguo Testamento y fue realizada por discípulos de Rafael. Pasadas estas galerías, se halla la Capilla de Nicolás V, decorada por Fra Angelico con escenas de la vida de San Esteban y San Lorenzo. Si se vuelve a las Estancias de Rafael, se accede a la Galería de los Mapas, donde hay diferentes mapas de Italia y otros países, obra de Banti. Le sigue la Galería de los Tapices, donde son expuestos tapices cuyo diseño fue realizado por Leonardo y Rafael. La siguiente sala es la Galería de Los Candelabros porque posee candelabros de diferentes épocas como la romana y la griega, así como diferentes obras de escultura. Un poco más adelante está la Sala de la Biga, donde está un grandioso carro del s. I a.C. Por último, podemos ver el Museo Gregoriano Egipcio y el Museo Gregoriano Etrusco, que poseen grandes piezas de las épocas a las que hacen alusión, y los jardines, que aun siendo pequeños son muy bellos por la configuración arquitectónica al modo italiano del Cinquecento.
Obras representadas
- Entrega de las llaves creada en 1480
- Escenas de la vida de Moisés creada en 1481
- Rebelión contra la Ley de Moisés creada en 1481
- Sacrificio y tentaciones de Cristo creada en 1481
- Vocación de los primeros apóstoles creada en 1481
- Sermón de la montaña y curación del leproso creada en 1482
- Ultima Cena creada en 1482
- Creación de Eva creada en 1509
- David y Goliat creada en 1509
- Diluvio Universal creada en 1509
- Embriaguez de Noé creada en 1509
- Expulsión del Paraíso creada en 1509
- Ignudi creada en 1509
- Ignudi creada en 1509
- Ignudi creada en 1509
- Ignudi creada en 1509
- Josías y sus padres creada en 1509
- Judith y Holofernes creada en 1509
- Profeta Isaías creada en 1509
- Profeta Joel creada en 1509
- Sacrificio de Noé creada en 1509
- Serpiente de bronce creada en 1509
- Sibila Délfica creada en 1509
- Sibila Eritrea creada en 1509
- Zacarías creada en 1509
- Zorobael y sus padres creada en 1509
- Capilla Sixtina Bóveda creada en 1510
- Creación de Adán creada en 1510
- Ezequie creada en l1510
- Ezequías y sus padres creada en 1510
- Ozías y su madre creada en 1510
- Sibila Cumea creada en 1510
- Achim-Eliud creada en 1511
- Aminabad creada en 1511
- Asa y sus padres creada en 1511
- Asa-Josaphat-Joram creada en 1511
- Azor-Sadoch creada en 1511
- Castigo de Amán creada en 1511
- Creación de la luz creada en 1511
- Creación de las planetas y los astros creada en 1511
- Creación del Mundo creada en 1511
- Eleazar-Mathan creada en 1511
- Ezequías-Manasses-Amón creada en 1511
- Ignudi creada en 1511
- Ignudi creada en 1511
- Ignudi creada en 1511
- Ignudi creada en 1511
- Jacob-Joseph creada en 1511
- Jessé con sus padres creada en 1511
- Jessé-David-Salomón creada en 1511
- Jonás creada en 1511
- Josías-Jechonías-Salathiel creada en 1511
- Naason creada en 1511
- Osías-Joatham-Achazcreada en 1511
- Profeta Daniel creada en 1511
- Profeta Jeremías creada en 1511
- Roboam y sus padres creada en 1511
- Roboam-Abias creada en 1511
- Salmon-Booz-Obed creada en 1511
- Salomón y sus padres creada en 1511
- Sibila Líbica creada en 1511
- Sibila Pérsica creada en 1511
- Zorobabel-Abiud-Eliachim creada en 1511
- Juicio Final creada en 1537
Restauración
En 1964 se inició un programa de restauración de todas las obras que finalizó en 1994 con el descubrimiento del Juicio Final enteramente restaurado; dirigida por Gianluigi Colalucci, la restauración se ha realizado con una mezcla solvente compuesta por bicarbonatos de sodio y amonio, carboximelcelulosa y un fungicida diluido en agua destilada. Con agua destilada se lavaba la zona a trabajar y se aplicaba la solución durante unos 3-4 minutos, lavando cuidadosamente la superficie tratada y dejando descansar un mínimo de 24 horas, realizando una segunda aplicación durante otros 3-4 minutos para lavar definitivamente con agua destilada. De esta manera se ha descubierto la importancia del color en la pintura de Miguel Ángel, que compagina con la fuerza escultórica de los personajes.
