Laísmo

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Concepto:Uso de los pronombres personales "la" y "las" en función del complemento indirecto para referentes del género femenino en lugar de las formas estándar "le" y "les". En ciertos dialectos del español el laísmo es un fenómeno extendido.

Laísmo. Fenómeno gramatical que se produce cuando se utilizan los pronombres personales átonos de complemento directo del femenino (la y las) en función de complemento indirecto, donde deberían haberse escrito los pronombres personales átonos de complemento indirecto (le o les).

La norma culta, así como las convenciones de la Real Academia Española, condenaron el laísmo hace ya muchos siglos y su empleo se considera un vulgarismo grave, incluso cuando se da en entornos y dialectos profundamente laístas.

Laísmo

El laísmo consiste en la utilización de los pronombres la o las como complemento indirecto: La di a Laura el libro; las enseñé el jardín. El laísmo es siempre incorrecto.

Uso normativo

La lengua castellana mantiene la antigua declinación latina y uso de los casos latinos en los pronombres personales y la evolución de la lengua castellana tiende a la eliminación total de los casos latinos, reflejo que tenemos en la tendencia a suprimir la diferencia de funciones entre el complemento directo y complemento indirecto por medio del género.

Esto se traduce en el uso de "la" y "las" en función de complemento (objeto) indirecto; cuando el referente es femenino en vez de "le" y "les".

Cuando un "laísta" dice: La pegué, un no "laísta" entiende que "la cosa" referida fue pegada (con un adhesivo) y no "golpeada", que es lo que el "laísta" quería decir. Aunque la RAE no dice que este uso sea incorrecto (como sí hace con el resto de laísmos), lo desaconseja basándose en su uso localizado a zonas tradicionalmente laístas.

El "le" indirecto es ambiguo; para quitar la ambigüedad utilizamos un segundo pronombre con preposición: Dale un beso, a ella (a él).

La Real Academia de la Lengua Española condenó el laísmo en 1796.

Variedades laístas

  • El laísmo es frecuente en el dialecto madrileño: A ella, la dolía la cabeza (en lugar de: A ella, le dolía la cabeza) o A ella, la dije que se fuera al cine (en lugar de: A ella, le dije que se fuera al cine).
  • El laísmo también es frecuente en Castilla y León, sobre todo en la provincia de Palencia. Asimismo es utilizado en Santander capital y sus alrededores.

Fuentes