Diferencia entre revisiones de «La Fama (escultura)»
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| − | + | La Fama, representa a la diosa mensajera de [[Zeus]], la que propaga las buenas y malas noticias, los rumores… y siempre provoca desórdenes y malentendidos entre los mortales. | |
| − | + | Algunas revistas digitales la catalogan como hija de Afrodita, la deidad del amor, otras fuentes señalan que es la última descendiente de Gea, la diosa de la tierra, y los romanos dicen que es la «Voz pública». Pero nadie parece tener la verdad en la mano. | |
| − | + | El poeta latino Virgilio, que vivió en el año 70 a.n.e, en su obra Eneida, asume que La Fama habita en el centro del mundo y reside en un palacio sonoro (con mil aberturas para que entren las voces del pueblo y las deidades), se rodea de la credulidad, el error, la falsa alegría, el terror, los chismes y personifica el demoníaco poder de la publicidad y el rumor. | |
La estatuilla, con la clásica túnica griega y su largo y silente cornetín, se confabula con capiteles, cornisas y columnas sui géneris para atraer al visitante, guantanamero o foráneo, y a los no pocos admiradores del arquitecto que murió en Cuba y al servicio de la Revolución. | La estatuilla, con la clásica túnica griega y su largo y silente cornetín, se confabula con capiteles, cornisas y columnas sui géneris para atraer al visitante, guantanamero o foráneo, y a los no pocos admiradores del arquitecto que murió en Cuba y al servicio de la Revolución. | ||
| − | + | Como escultura no es significativa solo por su ubicación, sino también por los valores que agrega al entramado urbano de la ciudad, donde se rodea de diversas formas y estilos que van desde el clasicismo al neoclasicismo y el barroco, un ambiente estrictamente ecléctico donde hace galas de su exigente gusto. La escultura, si bien resulta relevante por su altura y visibilidad desde distintos puntos de la ciudad, lo es también por la historia familiar que guarda y la significación que posee para los guantanameros. | |
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| + | Grácil, ingrávida, serena, tu helénica euritmia redime de venal [[mercantilismo]] —pregonando su gesta— a mi aldea natal.|Regino Boti}} | ||
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| − | + | La Fama fue aprobada por la [[Asamblea Municipal del Poder Popular]] como Símbolo de la Ciudad de [[Guantánamo]], en abril de [[1993]], luego de una consulta popular, según consta en los documentos de archivo. Cada año, en saludo al [[1 de diciembre]], fecha en la que se conmemora el aniversario del otorgamiento del título de villa a la ciudad de Guantánamo, en [[1870]], se desarrolla una sesión solemne de la Asamblea Municipal del Poder Popular, donde se entrega una réplica de La Fama a personalidades que contribuyen de manera relevante al desarrollo del territorio en sus diferentes renglones y manifestaciones de la vida social, económico, productiva, política y cultural; entre las personalidades que han recibido este reconocimiento se encuentran: el Comandante en Jefe [[Fidel Castro Ruz]] , primero en recibirlo;[[Los Cinco Héroes]] Prisioneros del Imperio, y el comandante [[Julio Camacho Aguilera]]. | |
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| − | + | *Documentos de archivo disponible en la Asamblea Municipal del Poder Popular Guantánamo. | |
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| − | + | *[[Boti Regino Eladio]], [[El Mar y la Montaña]], (versículos indemnes), Editorial Oriente, Santiago de Cuba, 1985. | |
| − | + | *Donatién Ileana, Lobaina Danae, Sánchez Eusebia y Tablada Odalys [[Las huellas de un genio]], Editorial El Mar y la Montana, Guantánamo, 2010. | |
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La Fama. Escultura creada por el ingeniero José Lecticio Salcinesa quien se le reconoce el mérito de soñar con esta majestuosa escultura, que desde el año 1993 fue designada símbolo de la ciudad de Guantánamo, y está situada en la parte más alta del Palacio Salcines.
Ubicación
Está ubicada en la cúspide del Palacio Salcines, localizado en el centro urbano de la ciudad de Guantánamo, en la calle Pedro Agustín Pérez esquina Silverio del Prado. En la parte superior del inmueble y en forma de cúpula hay un mirador sobre el cual se alza la escultura La Fama, que fue esculpida por el italiano Américo J. Chini y solo basta subir una escalera del tipo caracol para acceder a su punto más alto.
Características
La Fama fue situada, desde 1922, por el ingeniero José Lecticio Salcines Morlote en la cima de la que se convertiría en la construcción de estilo ecléctico más emblemática de la arquitectura local: su propia casa. Un escultor italiano, Américo J. Chini, la pulió.
La Fama, representa a la diosa mensajera de Zeus, la que propaga las buenas y malas noticias, los rumores… y siempre provoca desórdenes y malentendidos entre los mortales.
Algunas revistas digitales la catalogan como hija de Afrodita, la deidad del amor, otras fuentes señalan que es la última descendiente de Gea, la diosa de la tierra, y los romanos dicen que es la «Voz pública». Pero nadie parece tener la verdad en la mano.
El poeta latino Virgilio, que vivió en el año 70 a.n.e, en su obra Eneida, asume que La Fama habita en el centro del mundo y reside en un palacio sonoro (con mil aberturas para que entren las voces del pueblo y las deidades), se rodea de la credulidad, el error, la falsa alegría, el terror, los chismes y personifica el demoníaco poder de la publicidad y el rumor.
La estatuilla, con la clásica túnica griega y su largo y silente cornetín, se confabula con capiteles, cornisas y columnas sui géneris para atraer al visitante, guantanamero o foráneo, y a los no pocos admiradores del arquitecto que murió en Cuba y al servicio de la Revolución.
Como escultura no es significativa solo por su ubicación, sino también por los valores que agrega al entramado urbano de la ciudad, donde se rodea de diversas formas y estilos que van desde el clasicismo al neoclasicismo y el barroco, un ambiente estrictamente ecléctico donde hace galas de su exigente gusto. La escultura, si bien resulta relevante por su altura y visibilidad desde distintos puntos de la ciudad, lo es también por la historia familiar que guarda y la significación que posee para los guantanameros.
Renombrados especialistas, entre ellos Gaspar Atares Faure, Premio Provincial de Arquitectura, coinciden en que en la Villa del Guaso esa corriente rompió con la parquedad de construcciones anteriores al primer tercio de la centuria pasada y proporcionó persistencia decorativa a las fachadas e interiores de las casas de esta ciudad.
El primer nivel fue proyectado desde sus inicios con el concepto de planta libre, puesto que acogería al gabinete del profesional que al morir dejó una valiosa documentación técnica, la mayor parte dispersa o perdida.
El hormigón armado predominó en la mansión, cuyas instalaciones eléctricas e hidrosanitarias se empotraron en tuberías de cobre, y los vitrales remedan los de similares (pero no tan acabados) palacetes erigidos por la burguesía habanera, en la primera mitad de la anterior centuria.
A tan majestuosa obra dedicó Regino Eladio Boti, poeta guantanamero los siguientes versos:
Símbolo de la ciudad
La Fama fue aprobada por la Asamblea Municipal del Poder Popular como Símbolo de la Ciudad de Guantánamo, en abril de 1993, luego de una consulta popular, según consta en los documentos de archivo. Cada año, en saludo al 1 de diciembre, fecha en la que se conmemora el aniversario del otorgamiento del título de villa a la ciudad de Guantánamo, en 1870, se desarrolla una sesión solemne de la Asamblea Municipal del Poder Popular, donde se entrega una réplica de La Fama a personalidades que contribuyen de manera relevante al desarrollo del territorio en sus diferentes renglones y manifestaciones de la vida social, económico, productiva, política y cultural; entre las personalidades que han recibido este reconocimiento se encuentran: el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz , primero en recibirlo;Los Cinco Héroes Prisioneros del Imperio, y el comandante Julio Camacho Aguilera.
Fuentes
- Documentos de archivo disponible en la Asamblea Municipal del Poder Popular Guantánamo.
- Boti Regino Eladio, El Mar y la Montaña, (versículos indemnes), Editorial Oriente, Santiago de Cuba, 1985.
- Donatién Ileana, Lobaina Danae, Sánchez Eusebia y Tablada Odalys Las huellas de un genio, Editorial El Mar y la Montana, Guantánamo, 2010.
